Regresan las enfermedades respiratorias agudas: ¿cuáles son las más presentes?

Las enfermedades respiratorias agudas regresan especialmente en la temporada invernal, misma que ya se ha hecho presente en toda la República mexicana con baja de temperaturas considerables que irán de los 4 a 8 grados por las mañanas, además de que se prevén 56 frentes fríos desde diciembre hasta marzo de 2024. Esto inevitablemente nos pone en alerta ya que virus y bacterias como influenza, SARS-CoV-2, Virus Sincicial Respiratorio (VSR) y neumococo se hacen presentes.

De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), hasta la Semana Epidemiológica (SE) 43, en Norteamérica la actividad de influenza y VSR han permanecido en niveles bajos presentando un ligero incremento; los casos de enfermedad de tipo influenza (ETI) se han mantenido bajos; por otro lado, los casos de infección respiratoria aguda grave (IRAG) han mostrado un incremento asociado a influenza.

En México el pasado 15 de noviembre, el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica emitió un aviso epidemiológico por incremento de la circulación de virus respiratorios, incluyendo influenza, Covid-19 y otros, con predominio del VSR. “Desde el inicio de la temporada invernal 2023-2024, en aquellas personas cuyas pruebas resultan negativas a influenza y Covid-19 se observa la circulación de otros virus respiratorios, con predominio de VSR en grupos de menores de 10 años”.

En el último corte dado a conocer por la Secretaría de Salud, de la semana epidemiológica 40 a la 45, las entidades de residencia con mayor número de casos confirmados por otros virus respiratorios (OVR) son el Estado de México y la Ciudad de México. El total de casos confirmados a OVR es 456 (63 %), de ellos 288 corresponden a VSR. Los grupos de edad que reportan mayor número de casos son el grupo de 1 a 4 años, menores de 1 año y el grupo de 5 a 9 años de edad. En cuanto a Influenza, se reportan 1003 casos positivos, de los cuales son: 73 % A (H1N1), 16.8 % por influenza B, 9.6 % por influenza A No Subtipificable, 0.6 % por influenza A (H3N2).

¿Qué ha pasado con el Covid-19?

A propósito de la temporada, El Economista platicó con el doctor Santiago Moreno Guillén, especialista en microbiología y parasitología. Él comparte que el año pasado en estas épocas, como llevábamos todos cubrebocas el descenso de gripas fue notorio, “virtualmente la gripa desapareció”, pero ahora que ya no llevamos mascarilla, tenemos que estar atentos a otro tipo de escenarios que convivan con gripas y covid.

Dijo que el comportamiento del coronavirus hasta ahora no ha sido estacional, pues han habido olas en diferentes momentos del año, pero todavía no podemos encasillar al virus. En estos momentos, la tasa de pacientes confirmados de coronavirus en los últimos 14 días es de 0 por cada cien mil habitantes, sin embargo todavía hay preguntas, tanto de la gente, como de la ciencia, sobre lo que pasará con covid, “aunque no parece estar tan presente este invierno, todo se prevé que con la evolución que está habiendo y si no ocurre algún cambio no previsto, deberíamos tener un invierno con tendencia a la disminución en el número de casos además de hospitalización y muertes. Hoy vemos una cierta estabilidad”.

El especialista reconocido a nivel mundial por sus aportaciones a la inmunización de virus como la tuberculosis, VIH, y SARS CoV-2, pide no minimizar los síntomas, pues en tiempos de la pandemia hubiéramos acudido de inmediato al médico, “hoy no tomamos en cuenta los diferentes virus y eso puede disminuir el diagnóstico temprano y por lo tanto, la posibilidad de atender de manera oportuna”. Fue contundente, “sigue siendo fundamental hacer pruebas y saber exactamente a qué nos enfrentamos”.

Agrega sobre covid que lo más probable es que veamos en esta época una situación controlada, “el error sería vivir con el temor de una hecatombe, que es poco probable, pero también sería un error pensar que la covid es una enfermedad que ya no existe, pues el riesgo de infectarnos sigue prevalente”.

Dijo que el covid ha sido una enfermedad muy aleccionadora en todos los niveles y una de las cosas que ha traído es que se han producido progresos en el conocimiento de la enfermedad y el remedio para ella a una velocidad vertiginosa, el ejemplo máximo es la vacuna, pero junto con eso, en tiempo récord se han generado medicamentos orientados al tratamiento de la enfermedad.

“Al principio se trabajó fundamentalmente en los enfermos hospitalizados que estaban por enfermedad grave y cómo hacer para remediar la consecuencia fatal, cuando esa situación quedó orientada, la preocupación era que mucha gente que estaba en su casa, se infectaba de covid y no había manera de evitar que algunos de ellos cayeran en hospitalización. Con ello vino la preocupación de intentar conseguir medicamentos en las fases más precoces de la enfermedad y así disminuir hospitalización”.

Así ahora tenemos productos que demostraron que disminuyen de manera importante la hospitalización, tenemos un intravenoso y otro oral, se llama Paxlovid (Nirmatrelvir/ritonavir) el cuál está indicado para personas que tienen Covid y tienen probabilidades de pasar a enfermedad grave, entre los factores son: mayores de 50 años, independientemente de si están vacunadas o no. Para adultos entre 18 y 50 años, solo si tienen algún factor de riesgo (ser fumador, hipertensión, diabetes, insuficiencia renal, enfermedad neurológica, supresora, sobrepeso, entre otras).

El especialista también menciona que la idea será vacunarnos con la vacuna adaptada o de segunda generación, porque vacunarnos con la vacuna de la variante original procedente de Wuhan nos ayudaría muy poco o nada, y una persona vulnerable sí que puede pasarla mal.

Concluye que de lo que podemos estar seguros es que nuevos agentes microbianos van a aparecer y es casi seguro que antes o después volveremos a tener una pandemia, casi seguro de procedencia animal, como los últimos casos (VIH, Gripe, SarS-CoV-2, etc). “Tenemos que ser prudentes, entender que esto nos puede volver a pasar y todo lo que hemos aprendido, de control, funcionamiento de hospitales, de funcionamiento de la sanidad, de la creación de medicamentos, y en general de la respuesta global, nos haya servido para la próxima”.

nelly.toche@eleconomista.mx