"Boom" económico del deporte femenil apunta a 2024

El deporte femenil apunta a vivir su "boom" económico en 2024. De acuerdo con un estudio de la consultora internacional, Deloitte, la élite de la industria deportiva femenina superará los 1,000 millones de dólares en ingresos, por primera vez, el próximo año y estima que mantenga ritmo ascendente.

La predicción de Deloitte para 2024 es de ingresos globales por 1,280 millones de dólares, una cifra que representará un aumento del 300% respecto a la primera vez que la firma de origen británico realizó este estudio, que fue apenas en 2022.

Los ingresos de la industria deportiva femenil se denominan élite porque contemplan eventos de máxima jerarquía internacional, como las Copas del Mundo de la FIFA o el circuito anual de la WTA (Asociación de Tenis Femenil, por su sigla en inglés), de acuerdo con los analistas detrás del estudio.

En 2022, la cifra fue de 692 millones de dólares y en 2023 dio un salto a los 981 millones, tomando en cuenta la alta expectativa para la Copa Mundial de la FIFA que se disputó entre Australia y Nueva Zelanda, que dejó récords de asistencia y audiencia a nivel global, con más de 2,000 millones de espectadores.

Para 2024, la expectativa es de 1,280 millones repartidos de la siguiente forma: 55% por vías comerciales como patrocinadores y merchandising, 27% por la venta de derechos de transmisión y el 18% restante derivado del concepto de matchday, que comprende la venta de esquilmos en los estadios.

En 2023, la cantidad se repartió en un 59% para la vía comercial, 27% para la venta de derechos de transmisión y el 14% por el matchday, mientras que un año antes la división fue de 64%, 25% y 11%, respectivamente.

La líder del grupo de estudios de negocios de Deloitte, Jennifer Haskel, reflexionó sobre la expectativa en 2024: “En los últimos años hemos visto un crecimiento excepcional en el deporte femenino en todo el mundo, impulsando un aumento significativo en su valor comercial, lo que a su vez ha generado un creciente interés por parte de los inversores. Fundamentalmente, el deporte femenino se ve cada vez más como un producto único que se diferencia cada vez más del deporte de élite masculino”.

Paul Lee, director global de investigación de tecnología, medios y telecomunicaciones, añadió: “El deporte femenino se encuentra en una trayectoria de crecimiento impresionante. Sin embargo, las emisoras, los streamers y las plataformas de redes sociales tendrán un papel importante que desempeñar a la hora de mostrar eventos importantes que capten el interés de los fans nuevos y existentes, al tiempo que crean una experiencia memorable e impactante”.

Además, el estudio especifica por disciplinas y regiones cómo se esperan los mayores impactos de los ingresos globales. En ese sentido, se prevé que los dos deportes femeninos más valiosos en el mundo sean el futbol con una derrama estimada en 555 millones de dólares (43% del total) y el basquetbol con 354 millones (28%).

Respecto a los mercados geográficos más grandes en el próximo año, se estima que sean América del Norte con 670 millones de dólares (acaparando el 52%) y Europa con 181 millones (14%). En Estados Unidos destaca, por supuesto, la WNBA, así como la NWSL, dos de las ligas más productivas del mundo.

“Este aumento en la participación de los aficionados y los inversores está generando nuevas y mejores oportunidades para los clubes y ligas, incluidas mayores asociaciones comerciales, una mayor participación y jornadas de partido más grandes. Para garantizar que este crecimiento siga siendo consistente y sostenible, las organizaciones deportivas deben garantizar que la inversión se dirija a los lugares correctos”, remató Jennifer Haskel.