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Diablos se lleva la ‘Guerra de Guerras’ con batazos históricos
La novena capitalina ganó su primera serie de la temporada barriendo tanto en triunfos como en carreras, ya que rompió una marca que ostentaba contra Tigres desde 1955.
El próximo rival de Diablos será Sultanes de Monterrey en territorio regiomontano
Diablos Rojos del México rebalsó de ilusiones a sus espectadores en su debut de la temporada 2023 de la Liga Mexicana de Beisbol (LMB), donde el objetivo de esta institución no es otro que lograr el campeonato número 17 de su historia, anhelado desde hace casi una década (2014 fue su último año como monarcas).
La novena capitalina arrancó la campaña con el máximo nivel de potencia al barrer la serie contra Tigres de Quintana Roo (3-0), su rival más añejo y contra el que ha caracterizado la llamada ‘Guerra de Guerras’ o ‘Guerra Civil’ dentro del entorno del beisbol mexicano. La barrida se concretó con un 8-2 la tarde del domingo ante un estadio Alfredo Harp Helú repleto de aficionados divididos.
La victoria de 8-2 se sumó a la todavía más abultada que consiguieron en el Juego 2 del sábado, donde Diablos ganó 25-3, además de la remontada del Juego 1 del viernes, que terminó por 12-10 a pesar de que los capitalinos perdían 0-10 al término de la sexta entrada. Fue una serie que, en cualquiera de sus tres capítulos, ofreció espectáculo e historia.
Con el total de 45 carreras anotadas en esta serie, Diablos Rojos rompió el récord de 42 que había logrado frente a Tigres en la temporada de 1955, cuando se enfrentaron por primera vez y en una época en la que los felinos todavía coexistían con los pingos en la Ciudad de México.
Cualquier resultado iba a parecer minúsculo después de la escandalosa victoria del Juego 2, pero a pesar de eso la ofensiva escarlata volvió a explotar desde las primeras entradas al anotar siete veces en las primeras tres entradas del domingo. La cuenta se abrió con dos anotaciones, mismas que llegaron por la vía de Ramón Flores y un jonrón solitario de Japhet Amador (segundo para él en la campaña).
Dentro del Juego 3, el tijuanense Julián Ornelas fue uno de los más destacados al cerrar su participación con un 4-2, con dos empujadas y dos anotadas, mientras que Francisco Córdoba cerró de 4-2 con par de producidas y una anotada, en tanto que Moisés Gutiérrez también se fue de 4-2. Después de una tarde de 11 hits, todos los del line up lograron embasarse.
Además de romper el récord de 1955, los Diablos Rojos también lograron imponer su segunda mayor cantidad de carreras anotadas en un partido de fase regular disputado en el estadio Alfredo Harp Helú con el 25-3, que sólo es superado por el 29-0 que lograron el 5 de junio de 2019 ante Bravos de León; esos son los dos únicos registros con más de dos decenas de anotaciones en la renovada casa de los escarlatas.
“La verdad los muchachos, empezando desde el primer juego, no dejaron de pelear los turnos, vinieron de atrás, ganaron ese juego con el grand slam de Japhet y los otros juegos igual, creo que eso fue bastante importante. En el segundo juego los muchachos se soltaron bateando y con el tercer juego fue muy importante para nosotros empezar de esta manera”, evaluó Juan Gabriel Castro, mánager de Diablos, tras el cierre de la serie ante Tigres.
Gracias a esta barrida, los del México tomaron la cima de la Zona Sur de la LMB compartiendo el récord de 3-0 junto con Leones de Yucatán (sobre Bravos de León) y Pericos de Puebla (sobre Piratas de Campeche), aunque con un diferencial de carreras de +30, mientras que los otros dos se quedaron con +14 y +10, respectivamente.
El próximo rival de Diablos será Sultanes de Monterrey en territorio regiomontano, disputando los partidos entre el 24 y 26 de abril con una rotación que contempla a Yuniesky Maya, Nick Kingham y Édgar Torres, mientras que Tigres ahora se enfrentará con Pericos de Puebla.
Otros ingredientes de la serie entre Diablos y Tigres fue la presencia de Fernando ‘El Toro’ Valenzuela en el Juego 2, lanzando la primera bola del partido ante la algarabía de los cerca de 20,000 asistentes al estadio Alfredo Harp Helú, recordando que actualmente Valenzuela es parte de la directiva de la organización quintanarroense.
También en el Juego 2 el joven pelotero de 16 años de Diablos Rojos, Ángel Arredondo, pegó su primer imparable en su naciente trayectoria dentro de la LMB, tras conectar un sencillo al jardín izquierdo en la séptima entrada y produciendo una carrera en la octava, dentro de ese abultado marcador de 25-3.