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Futbol español, ¿nuevo edén para inversión mexicana?

Premios económicos por rendimiento deportivo, dinero por derechos de televisión. Algunas compañías o empresarios deciden ir por un negocio seguro en europa y hacerse del control de clubes de segunda, segunda b o tercera división.

Los problemas económicos, de gestión, compromisos con acreedores y una deuda que actualmente llega a 43 millones de euros hicieron imposible cumplir con los compromisos de pago los últimos dos meses del año a futbolistas y trabajadores.

Entonces, ¿por qué invertir 2 millones de euros en un club que se hunde en el balompié ibérico?

“Hay más certidumbre en los ingresos que puede tener un club, de entrada el tema de los derechos de televisión que opera sobre reglas de compensación muy claras y permite planificar con mayor exactitud los presupuestos. Esa certidumbre hace más atractiva la inversión en un club en España que en el caso de México, que se tiene que negociar los derechos año con año”, responde desde España, Mauricio García de la Vega, el séptimo empresario mexicano que ha invertido en la propiedad o participación accionaria de un club del futbol español entrevistado por El Economista.

Llegan a rescatar equipos

Las inversiones mexicanas (ya sea mendiante una empresa o un empresario) en el futbol español alcanzan 18.6 millones de euros desde el 2012 y con participación en siete clubes de Segunda División, Segunda B y Tercera División.

La primera inversión fue la de Grupo Carso, que se hizo de 34% de las acciones de Real Oviedo a cambio de 2 millones de euros. En todos los casos, los empresarios mexicanos han llegado en crisis financieras y deportivas.

Carlos Slim es quien más ha invertido en el futbol español, ya que a la cifra inicial, una vez que el equipo logró el ascenso a Segunda División en el 2015, otorgó créditos por 9.6 millones de euros para hacer más competitivo al equipo, deuda que cambió por acciones hasta convertirse en el socio mayoritario con 71.1%.  La inversión mínima que han realizado los empresarios mexicanos es de al menos 1 millón de euros.

En Segunda B está Mauricio García de la Vega y sus socios (de los cuales no dio nombre) en el Real Murcia, en la misma categoría el Club Deportivo Toledo con Gonzalo de Val (empresario textil) como propietario de un equipo de Segunda B en España.

En Tercera División el fondo de inversión con sede en México, IQ Finanzas (liderado por Álvaro López) hizo un primer intento con el Real Avilés donde sólo estuvo un año y posteriormente adquirieron al Club Deportivo Cacereño donde se mantienen.

Otro club de esa categoría es el Águila FC, que fue adquirido el año pasado por Fernando Chavero (agente de jugadores), quien además tiene inversiones en la Liga Premier de México. Y  finalmente el Club de Futbol Salmantino, donde Miguel Alejandro Miranda  aportó el capital para que la empresa Desarrollos Empresariales Deportivos se hiciera de la propiedad del estadio Helmantino y los derechos para refundar al club Salamanca, que desapareció por problemas económicos.

Los motivos para invertir en España

Aunque con menor frecuencia, los cuentos de hadas también se pueden observar en España. Leganés, el flamante semifinalista de la Copa del Rey, quien eliminó a Real Madrid de la competencia este año, hace cinco años se encontraba en Segunda B, con una deuda de 800,000 euros, más del doble de su prepuesto, pero en su segunda temporada en Primera División la afrontó con un presupuesto de 45.5 millones de euros; es decir, aumentó 150 veces el dinero para la manutención del equipo.

En entrevista con El Economista, Oscar Garvin, presidente del Club Atlético de Pinto y de Proliga, organismo que agrupa a 325 clubes de Segunda B y Tercera División que tiene como objetivo mejorar prácticas de gestión en las categorías, indica que la inversión extranjera alcanza a 15% de todos los equipos y que después de los capitales asiáticos, los empresarios mexicanos son quienes más presencia tienen en clubes del futbol ibérico.

“El mayor inversor viene de Asia, pero la inversión mexicana en España puede representar hasta 5 por ciento. Los grandes países inversores son China, Corea y México, como las tres nacionalidades con mayor representación”, expresó el directivo.

Para Oscar Garvin, el futbol español ha ganado prestigio debido al desarrollo de la Liga Profesional de Futbol, con los clubes Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, así como de la selección española.

A diferencia de la Liga de Ascenso en México, donde sólo seis de los 18 equipos afiliados a la categoría tienen certificado para competir en Primera División, debido a que cumplen con la validación de estructura deportiva de fuerzas básicas, aforo en estadio mínimo de 20,000 asientos y no pertenecer a un dueño que ya tenga equipo en la Liga MX; en España, clubes como Eibar (con un estadio con capacidad para 7,100 personas), Girona (con un inmueble de 13,500 personas y un club satélite de City Football Group, dueños de Manchester City), así como Leganés, tiene oportunidad de competir y acceder a los millonarios contratos de televisión en la Primera División.

“Este es un tema meramente empresarial, vimos la oportunidad de que hay un club con un potencial muy grande, en una ciudad importante y una afición muy grande, y vemos oportunidades de mejora y estamos decidiendo nuestra entrada al club”, señaló Mauricio García de la Vega, sobre los motivos de invertir en Real Murcia, club que reside en el séptimo municipio más poblado de España, con más de 400,000 habitantes y con 10,000 abonados por temporada en Segunda B.

Inversión extranjera, aliada o enemiga

Los cambios de sede, refundaciones y desapariciones también tienen como escenario España. Alguna vez, en 1999, Murcia tuvo dos equipos en Segunda División, con lo que nació el derbi de la ciudad. El Club de Futbol Ciudad de Murcia permaneció en la ciudad hasta el 2007, cuando se vendió al equipo y el nuevo dueño traspasó la franquicia a Granada, de donde era originario.

“A peor situación del club, más fácil es la inversión externa. Intentamos que los clubes estén bien, saneados, y si tiene que entrar un inversor sea por grandes capitales, nunca a la baja, porque con cantidades pequeñas deriva en problemas”, expresa Oscar Garvin.

Mauricio García de la Vega expresó en la conferencia de prensa donde se presentó como el inversionista interesado en Real Murcia que “yo no vengo a perder dinero, sino con un proyecto ganador”. Concibe al equipo como una empresa de entretenimiento y tiene como ejemplo de administración a Real Oviedo, que sin gastos millonarios ya se encuentra en Liga Adelante, la segunda categoría, y la temporada pasada compitió por el ascenso a Primera.

“Buscamos atraer las fuentes de ingreso importantes que un club como Real Murcia puede tener”, señaló el último mexicano que desembarca en España.

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