Javier Aguirre, a completar checklist en regreso al Tri

Javier Aguirre tiene un checklist por completar en su tercera etapa como entrenador de la Selección Mexicana. Aunque tomó el cargo de manera oficial hace algunas semanas, su primera gran prueba será a partir de este fin de semana.

La Fecha FIFA de septiembre le traerá un amistoso contra Nueva Zelanda este sábado y tres días después contra Canadá (ambos en estadios de Estados Unidos). Pudiera pensarse que no hay nada en juego, pero desde este momento empieza su evaluación rumbo al Mundial 2026.

“Al optar por Javier Aguirre, (los directivos) optaron por una alternativa muy segura. Es difícil que a la gente no le guste, no podían correr mayores riesgos considerando las circunstancias y Aguirre, en ese sentido, es una buena elección, alguien que conoce la dirección técnica de la Selección Mexicana, el entorno, que es transparente, que sabe comunicarse y que puede darle un buen destino a este proyecto”, comenta para El Economista, Roberto Gómez Junco, con más de dos décadas de experiencia como analista y ex futbolista profesional.

Javier Aguirre está reemplazando a Jaime Lozano, quien fue destituido del Tri luego de ser eliminado en fase de grupos de la Copa América 2024. Llega con 65 años y tras vivir una satisfactoria experiencia con el Mallorca de España, primero salvándolo del descenso y luego llevándolo al subcampeonato de Copa del Rey.

Vivió dos etapas como entrenador de México con características diferentes, tanto en 2001 como en 2009, pues en ese momento tenía la soga en el cuello para conseguir el boleto a las Copas del Mundo de Corea-Japón 2002 y Sudáfrica 2010, respectivamente. Consiguió la participación hasta octavos de final en ambos eventos y después tuvo episodios como seleccionador en Japón y Egipto.

A más de dos décadas de distancia de su primera etapa con la Selección Mexicana, Aguirre regresa con otra apariencia profesional y personal.

“Más maduro, con esa madurez que es bien capitalizada cuando eres más inteligente y preparado. Hay gente que se puede volver vieja pero no va a madurar como técnico. En el caso de Aguirre, un hombre inteligente, sensato, que ha sido siempre muy profesional en todos los roles que ha desempeñado, sí se ve esa madurez. Es un técnico más sereno que entiende la problemática que enfrenta, la gran responsabilidad y privilegio que implica ser director técnico de Selección Mexicana”.

La Federación Mexicana de Futbol (FMF) respaldó a Aguirre para tomar las riendas del Tri hasta el Mundial 2026, donde no hay que naufragar por eliminatorias debido a que el boleto está seguro como uno de los tres países coanfitriones (junto a Estados Unidos y Canadá).

Esa es la principal libertad con la que se conducirá Aguirre, pues a diferencia de sus dos primeras etapas, no tiene la presión de rescatar el boleto a la Copa del Mundo.

“Con esa ventaja de que libras la eliminatoria, en ese sentido, puede trabajar un poco mejor. Pero el gran problema es qué tanto puede aprovechar el potencial más limitado con el que cuenta”, agrega Roberto Gómez Junco, y ahí es donde viene la disección de su checklist.

Disponibilidad de talento

Cuestionado sobre la primera tarea que Aguirre debe sacar a flote en su tercera etapa con el Tri, el actual analista de ESPN responde: “El gran reto para Javier es sacar el mayor jugo posible a un material futbolístico que no es abundante. De las veces que le ha tocado dirigir a la selección, esta es en la que menos margen de maniobra tiene en ese sentido, pues ha bajado la producción de buenos futbolistas y el plantel es más limitado”.

En el intempestivo proceso rumbo al Mundial 2002, México contaba con una camada de futbolistas como Cuauhtémoc Blanco, Jared Borgetti, Pavel Pardo, Braulio Luna e incluso Rafael Márquez, que acababa de ser transferido a Europa.

En la etapa de 2009 a 2010 la plantilla contaba con elementos como Gerardo Torrado, Óscar Pérez, Andrés Guardado y los mismos Blanco y Márquez. Todos son considerados figuras de jerarquía en el pasado reciente del futbol nacional.

La convocatoria actual cuenta con varios futbolistas que están viviendo sus primeros partidos en selección mayor: Álex Padilla, Víctor Guzmán, Alan Mozo, Erik Lira, Fidel Ambriz, Marcelo Flores, entre otros, que no son precisamente novatos a nivel de clubes.

“Me gustaría que no ampliara mucho el universo al cual recurrir, cada técnico que llega termina convocando a 60 futbolistas cuando no hay más de 25 de nivel de selección. Me gustaría que aprovechara al máximo el tiempo y, más, en la medida de convocar a menos jugadores, que verdaderamente estén los mejores y los comprometa”.

En el compromiso es donde Roberto Gómez Junco, ex jugador de equipos como Chivas, Tigres, Monterrey, Toluca y la propia Selección Mexicana, observa una de las mayores virtudes de Aguirre como entrenador.

“Se ha distinguido por su capacidad para comprometer a sus futbolistas, en el compromiso de ver cómo le hacían para salvarse del descenso, por ejemplo, en España. Las ocasiones anteriores con selección, también llegaban en situaciones críticas (…) Se comunica mejor que otros técnicos en el uno a uno y eso podrá garantizar que saque el mayor jugo posible a cada futbolista y comprometerlo, también, haciéndole entender al jugador del privilegio que significa estar en Selección Mexicana”.

Estilo y evolución

México ha ganado tres de sus últimos nueve partidos en todas las competencias, además de la decepción que causó a los aficionados el caer en fase de grupos de Copa América y, ni se diga, en fase de grupos del Mundial 2022, algo que no ocurría desde 1978.

La caída de prestigio del Tri es evidente y esa es otra de las tareas que Javier Aguirre debe intentar resolver desde la cita contra Nueva Zelanda este sábado.

“Javier Aguirre entiende que incluso en un amistoso hay un prestigio en juego. Estando tan maltratado, es importante defender ese prestigio en cada partido, por eso creo que debe recordar que siempre deben estar los mejores. Los futbolistas tienen que ganarse su lugar con lo que hacen en clubes, que Aguirre entienda la importancia de defender ese prestigio en cada partido y luego hacerlo a otro nivel en eventos más importantes”.

El analista tiene claro que “no se pueden esperar grandes resultados o un gran funcionamiento” en los primeros partidos, pero el estilo sí es una deuda por cumplir.

--¿Cuál debe ser la prioridad de Aguirre en el tema exclusivamente táctico?

--“Conseguir lo antes posible que el equipo domine a lo que juegue. A falta de grandes individualidades, porque la Selección Mexicana no puede competir en ese rubro con las potencias, tiene que remitirse a los argumentos colectivos: organizar bien a sus jugadores, comprometerlos a una forma de juego, que todos defiendan y ataquen, que sean solidarios y estén bien repartidas las tareas, obligaciones y movimientos”.

La carencia de gol en la Copa América fue uno de los aspectos más criticados en la gestión de Jaime Lozano, antecesor de Javier Aguirre. También se cuestionó su flexibilidad para cambiar de esquema táctico en resultados adversos.

No se espera que Aguirre cambie eso de inmediato, pero “es importante ir revisando la evolución del equipo, que se vaya sintiendo alguna mejoría en ese sentido, en la eficiencia colectiva que, después, lo que provoca es que florezcan más las individualidades”, apunta Gómez Junco.

El último partido de México fue el empate (0-0) ante Ecuador en el cierre de fase de grupos de la Copa América este verano. Ahora toca el turno a Javier Aguirre y su cuerpo técnico, en el que resalta Rafael Márquez como auxiliar, para escribir una nueva historia.

MÉXICO EN FECHA FIFA DE SEPTIEMBRE 2024

*Sábado 7 de septiembre

• Rival: Nueva Zelanda
• Sede: Rose Bowl; Los Ángeles, Estados Unidos
• Hora: 19:00 (CDMX)

*Martes 10 de septiembre

• Rival: Canadá
• Sede: AT&T Stadium; Arlington, Estados Unidos
• Hora: 18:30 (CDMX)