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Sudáfrica da la vida por un boleto para el Mundial
La impaciencia de miles de ciudadanos locales se desató por conseguir un lugar en la justa mundialista, generando el desorden en fila, lo que provocó la muerte de un jubilado.
Johannesburgo.- Un jubilado murió y la policía sudafricana debió intervenir en escaramuzas que se produjeron el jueves en la fila de miles de ciudadanos locales que se disputaron los 500,000 boletos en venta para el Mundial de futbol.
Las colas comenzaron a formarse el miércoles por la tarde y la frustración se incrementó mientras muchos intentaban ingresar a las filas más adelante para conseguir una entrada, incluyendo algunas para la final del 11 de julio.
La caída del sistema de computación rebasó la paciencia del público en algunos puntos de venta y el mal humor se desató.
"La policía recibió llamados", dijo Eugene Opperman, portavoz de los Servicios Policiales de Sudáfrica en Gauteng, sobre un incidente ocurrido en Brooklyn Mall Pretoria, a unos 60 kilómetros de Johannesburgo, donde la fuerza utilizó gas pimienta para restaurar el orden.
"Hubo empujones entre la gente y se decidió que la policía debía intervenir para controlar al público", agregó.
En Sandton, en el norte de Johannesburgo, enojados ciudadanos locales discutieron con la policía, que usó un vehículo para dispersar a la gente.
Un hombre de 64 años habría sufrido un ataque mientras aguardaba en una cola en Ciudad del Cabo. Era el número 565 de la fila.
Unos 120,000 boletos están disponibles para sudafricanos a 20 dólares, el precio más barato que se ha visto en Mundiales en años.
Las ventas de entradas en Sudáfrica han estado debajo de las expectativas hasta el momento y la FIFA fue criticada por venderlas en un complejo sistema en en internet que aislaba a los hinchas con menores recursos de la posibilidad de comprar, ya que están acostumbrados a obtener boletos en efectivo y en días de partido.
"Voy a besar mi boleto cuando lo tenga", dijo un hombre llamado Godfrey en el Maponya Mall, en el barrio negro más grande de Sudáfrica, Soweto. El hombre no quiso revelar su nombre completo porque no fue a trabajar para estar allí.
"La última vez que esperé en una fila como esta fue cuando fui a votar por (Nelson) Mandela", agregó, recordando la elección ganada por el líder de raza negra que puso fin al apartheid en Sudáfrica en 1994.
La FIFA había dicho previamente que las entradas para la final estaban agotadas, pero el miércoles anunció que otros 300 boletos serían liberados para el partido más importante del fútbol mundial.
Los boletos siguen estando bastante por encima de los precios normales que maneja el futbol local en Sudáfrica.
Incluso las entradas especiales de precios bajos superan más de cinco veces lo que cuestan las de los partidos domésticos.
La demanda en Sudáfrica había sido lenta al comienzo, pero en la última fase los ciudadanos locales se llevaron el 85 por ciento de los 240.000 boletos destinados a la venta entre febrero y el principio de este mes.
La FIFA indicó la semana pasada que 2,2 millones de entradas fueron vendidas para el Mundial, que se inicia el 11 de junio.
BVC