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Déficit de cuenta corriente en segundo semestre se duplica
Entre enero y junio representó 2.1 puntos del PIB, que es la proporción más baja desde el 2015 para un periodo similar.
El déficit de la cuenta corriente ascendió a 3,882 millones de dólares en el segundo trimestre del año, con lo que se duplicó el desequilibrio registrado en el mismo periodo del año pasado,cuando sumó 1,804 millones de dólares, según información del Banco de México (Banxico).
En el primer semestre del año, como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), el déficit de la cuenta corriente fue equivalente a 2.1 puntos, que es el más bajo para un periodo similar desde el 2015.
Desde Nueva York, Alberto Ramos, economista para América Latina en Goldman Sachs, explicó que éste se mantiene “moderado y estable”, pero les inquieta pues, aun cuando puede financiarse cómodamente con una cuenta de capital anclada en flujos de inversión extranjera, la economía mexicana tiene una considerable presencia de tenedores no residentes en el mercado, lo que es un factor de vulnerabilidad.
De acuerdo con la información de Banco de México, en el segundo trimestre ingresaron al país 5,391 millones de dólares en Inversión Extranjera Directa. Un saldo que resulta de 6,727 millones de dólares captados en México y una desinversión del exterior de 1,336 millones de dólares.
En el detalle de la información se observa que de los 6,727 millones de dólares de inversión directa, sólo 1,495 millones corresponden a nuevas inversiones, mientras el resto son reinversiones y cuentas entre compañías.
Inversiones, en modo de espera
Roberto Vélez, director ejecutivo del Centro de Estudios Espinosa Yglesias, expuso que la incertidumbre sobre riesgos de cambios en las regulaciones en el sector energético y del aeropuerto de la Ciudad de México, así como la asociada a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte son factores que han desalentado claramente las decisiones de inversión, particularmente Inversión Fija Bruta.
La cuenta corriente es resultado de las operaciones de comercio exterior, contratación y pago de deuda, así como los recursos que dejan los turistas al visitar el país y las remesas que envían los mexicanos que trabajan en el exterior a sus familias en el país.
Esta moderación del saldo negativo en la cuenta corriente del trimestre resulta del incremento registrado en el déficit de la balanza comercial de mercancías, que estuvo parcialmente compensado por un mayor superávit de la cuenta de remesas.
Expansión, bajo riesgo
Según la lectura de los resultados, el banco central considera que en lo que resta de este año y el 2019, la expectativa mundial sugiere una expansión favorable.
Sin embargo, encuentra riesgos para el crecimiento de la economía mundial para el corto y mediano plazos ante la escala de las disputas comerciales, el posible apretamiento de las condiciones financieras y la persistencia de riesgos geopolíticos.
“Estos factores han contribuido a una disminución del apetito por el riesgo a nivel global, a la recurrencia de episodios de volatilidad, menores flujos de capital hacia los emergentes y depreciaciones de sus monedas”, refirió.
No obstante al entorno, destacaron que, en el periodo reportado, la economía mexicana continuó captando recursos a través de la cuenta financiera, fundamentalmente por concepto de inversión directa y de cartera.