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Juncker pide a eurodiputados que no lo insulten
El presidente de la Comisión Europea pidió a los eurodiputados antieuropeos que dejaran de insultarlo, en respuesta en un debate sobre una moción de censura impulsada por los eurófobos.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, pidió este lunes a los eurodiputados antieuropeos que dejaran de insultarlo, en respuesta en un debate sobre una moción de censura impulsada por los eurófobos tras las revelaciones de evasión impositiva LuxLeaks.
Juncker respondió así durante un debate ante el pleno de la Eurocámara reunida en Estrasburgo (este de Francia) que debatía una moción de censura impulsada por el grupo antieuropeo Europa de la Libertad y la Democracia Directa (EFDD) liderado por el euroescéptico británico Nigel Farage, jefe del UKIP, a la que se sumaron los diputados del Frente Nacional francés, entre otros movimientos.
"¡Dejen de insultarme!", dijo Juncker, ex primer ministro de Luxemburgo acusado de haber fomentado un mecanismo para reducir al mínimo la imposición de las empresas multinacionales, en respuesta a la francesa Marine Le Pen, eurodiputada y líder del Frente Nacional, que comparó el nombramiento del luxemburgués al frente de la Comisión Europea como a designar a Al Capone al frente de "un comité de ética".
"Por favor, dejen de insultarme. Haré lo que prometí", añadió Juncker, que la semana pasada aseguró que combatiría el régimen fiscal conocido como 'tax ruling' o decisiones fiscales anticipativas.
Ese mecanismo, legal, son acuerdos pasados entre la administración fiscal de un país y empresas multinacionales que permiten a las compañías reducir la imposición a los ingresos.
Un grupo de periodistas de investigación reveló a principios de noviembre, pocos días después de que Juncker ex primer ministro de Luxemburgo entre 1995 y 2013 asumiera su cargo por cinco años al frente del brazo Ejecutivo de la UE, los acuerdos pasados entre la administración fiscal del Gran Ducado y 340 multinacionales.
La moción, que será votada el jueves, no tiene ninguna posibilidad de ser adoptada. Los euroescépticos tienen unos cien escaños de los 751 que cuenta la Eurocámara.
"Votemos en contra de esta moción estúpida", dijo durante el debate Guy Verhofstadt, líder de los liberales.
Los conservadores del Partido Popular Europeo dieron, como esperado, su respaldo a Juncker así como los socialistas.
erp