CCE alerta sobre escasez de combustibles tras clausura de terminales privadas de almacenamiento

Tras la clausura de terminales privadas de almacenamiento y trasvase de petrolíferos en distintos estados de la República que el gobierno federal ordenó, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) alertó que limitar la importación de gasolinas conllevará al desabasto del energético en actividades prioritarias, limita la competencia y detona la ilegalidad, en lugar de frenarla.

“El CCE expresa su profunda preocupación por la reciente clausura de terminales privadas de almacenamiento y trasvase de petrolíferos en distintos estados de la República”.

Y es que aseguró que las empresas importadoras, que fueron suspendidas, operan totalmente dentro del marco legal vigente, y en cambio observa que el obstaculizar la importación de gasolinas, tiene el objetivo gubernamental de proteger artificialmente a Petróleos Mexicanos (Pemex), en detrimento de las inversiones privadas realizadas en los últimos años.

El organismo que dirige Carlos Salazar Lomelín refirió -a través de un comunicado- que es entendible que la recuperación económica debe ser una prioridad para superar los estragos de la pandemia por Covid-19, no obstante, las acciones emprendidas por el gobierno para combatir actos ilegales en la cadena de hidrocarburos no deben perjudicar a la ciudadanía y a industria mexicana, ni pongan en entredicho el compromiso de nuestro país con los tratados internacionales de libre comercio.

El gobierno federal canceló los permisos de importación de gasolina, bajo el supuesto de atacar el contrabando en el mercado de combustibles, sobre todo aquellos de procedencia ilícita y de baja calidad.

Sin embargo, la operación de estas terminales privadas ha aumentado la capacidad de almacenamiento en México, complementando la que Pemex utiliza para su propia producción e importación, en beneficio de la seguridad y estabilidad energética de nuestro país.

“Aumentar la oferta de combustibles beneficia a las y los mexicanos, así como a la industria nacional al fomentar la competencia y tener distintas opciones de suministro de gasolinas. Por el contrario, buscar limitar la importación de gasolinas reducirá la oferta de combustibles que son utilizados para actividades básicas como el transporte público, la distribución de productos alimenticios y mercancías, entre otros”, estableció el organismo privado.

El CCE reiteró su compromiso con el principio de legalidad y plena aplicación del Estado de Derecho en México.

Admitió que el contrabando de gasolinas es un mal que afecta a la sociedad y al medio ambiente, al introducir en el mercado de combustibles aquellos de procedencia ilícita y de baja calidad.

No obstante, el sector privado reprobó que la CRE haya cancelado más de 100 permisos de comercialización de petrolíferos, gas y otros productos, entre ellos uno de la petrolera Shell y otro del grupo español Iberdrola.

lilia.gonzalez@eleconomista.mx