Lectura 4:00 min
Van por regularización extemporánea de más obras del Tren Maya
Antes de concluir este sexenio, la Sedena intenta regularizar la operación de al menos seis bancos de material que nutren de insumos de construcción al Tren Maya.
Cancún, QRoo.- Antes de concluir el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) intenta regularizar la operación de al menos seis bancos de material que nutren de insumos de construcción al Tren Maya, así como el edificio de oficinas de este proyecto férreo en Cancún.
Se tratan todas de obras que iniciaron sin los permisos correspondientes, por lo cual se ha apresurado a tramitar las autorizaciones de impacto ambiental ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Los dos procedimientos más recientes ingresados a Semarnat corresponden a dos bancos de material ubicados en Cancún y en la zona maya de Quintana Roo, cuyas dimensiones alcanzan las 70 y 95 hectáreas respectivamente.
En ambos casos, el Ejército argumenta que “para iniciar las actividades de remoción de vegetación, el proyecto cuenta con dos autorizaciones provisionales emitidas por parte de la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA), las cuales fueron otorgadas mediante el Oficio No. SRA/DGIRA/DG-01872-23 (…).
En mayo pasado Sedena inició otros cuatro procedimientos para igual número de bancos de material, de los cuales dos se ubican en el municipio de Solidaridad, uno más en Felipe Carrillo Puerto (zona maya) y uno más en Cancún.
Todos se encuentran a la espera de la autorización definitiva por parte de la Semarnat.
Incumplen sus propios plazos
Un séptimo trámite se refiere al Edificio de Oficinas Tren Maya Zona Cancún, que también inició obra hace más de un año sin la autorización de impacto ambiental ni el cambio de uso de suelo sobre terrenos selváticos de 50 hectáreas en la parte posterior del Aeropuerto Internacional de Cancún.
La Sedena tramitó el “permiso provisional” el 11 de mayo de 2023, “de cuyo procedimiento derivó la emisión del oficio número SRA/DGIRA/DG-01877-23 de fecha 12 de mayo de 2023 en cuyos establece lo siguiente:
“Deberá obtener la Autorización definitiva del proyecto, en un plano no mayor a 12 (doce) meses, contados a partir del día hábil siguiente a la emisión del presente Acuerdo, en cumplimiento de la normatividad en la materia”, según se lee en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) consultada por El Economista.
Pese a que Sedena tenía un año para regularizar la obra y tramitar la autorización ambiental antes de pasados 12 meses, inició el referido trámite apenas el pasado 16 de julio ante Semarnat, más de dos meses después del plazo marcado, según consta en la Gaceta de Semarnat; es decir, la autorización quedará lista por lo menos en septiembre próximo, más de cuatro meses después del límite marcado para regularizar los trabajos.
La obra en cuestión es un conjunto de inmuebles desde donde “se encargarán de administrar, operar, explotar y construir el proyecto Tren Maya. Éste se compone de oficinas técnico-operativas y un complejo de edificios que albergan en general: dirección, aulas de capacitación, simuladores y alojamientos al servicio del personal”.
Figura inexistente
El permiso provisional al que alude Sedena no se encuentra previsto en la LGEEPA, pues contraviene el carácter preventivo del procedimiento de evaluación ambiental, el cual tiene por objeto anticipar daños irreversibles al entorno derivado de cualquier proyecto de infraestructura o que trastoque un determinado hábitat.
Construir sin haber realizado los estudios de impacto ambiental con antelación echa por tierra el objetivo mismo del procedimiento, y la propia LGEEPA es clara al indicar que el construir y operar obras sin autorización ambiental implica la aplicación de una sanción que contempla el cierre temporal o definitivo del sitio, además de que económicamente, se debe realizar la reparación del daño ocasionado al ambiente.