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¿Por qué tomarse un café es más caro en Campeche que en Querétaro?
La estimación del gobierno federal es que la inflación este año cierre en 7.7 por ciento.
Sufrir los efectos de la inflación no es lo mismo para quienes viven en Campeche que para los queretanos. Tomarse un cafecito frente al mar campechano cuesta 10.96% más que hace un año, mientras que disfrutar la misma bebida en los portales del Centro Histórico de Querétaro vale casi lo mismo que el año pasado, pues ahí, el café, sólo incrementó 3.23 por ciento.
La inflación general anual en el país, al cierre de agosto, se ubicó en 8.70%, sin embargo, 18 entidades federativas se encuentran por encima de este porcentaje, 10 están entre 8 y 8.70% y sólo cuatro reportaron una inflación inferior a 8%, entre las que destacan Querétaro.
Comprarse ropa en Campeche, la entidad donde la inflación es más alta, de 10.37%, es más caro, ahí el precio de las prendas de mujer, vestidos y faldas, reporta un aumento de 7.15% mientras que en Querétaro, que registró la menor inflación en el país, de 7.20%, se manifestó una baja de 1.31% en los precios de estas prendas de vestir.
De acuerdo con el Inegi, en el segmento de alimentos bebidas y tabacos, la inflación fue de 16.57% en Campeche y Querétaro fue de 11.01 por ciento.
Entre los 18 Estados que superan a la inflación general, están Campeche, Oaxaca, Michoacán, Baja California, Zacatecas, Chihuahua, Chiapas, Durango, Coahuila y Morelos.
A su vez, las entidades donde el aumento de precios se encuentra por debajo de la inflación general son: Querétaro, con 7.20%; le sigue Aguascalientes, 7.63%; Ciudad de México, 7.64% y Tabasco, con un porcentaje 7.93 por ciento.
Por encima de 8% están San Luis Potosí con 8.01%; Baja California, con 8.18%; Guerrero, 8.19%, Quintana Roo, 8.19%; Estado de México, 8.20%, por mencionar algunos.
Algunas de las razones que influyen para que los datos de inflación entre una entidad y otra sean tan distintos, tiene que ver con las actividades económicas que se realizan en la región o localidad, el tipo de producción que tienen y los alimentos que producen.
Sin embargo, también influyen los patrones de consumo de sus habitantes y los ingresos salariales en la región, entre otros aspectos.
Por ejemplo, en el estado de Campeche, que se caracteriza por su producción de petróleo, la gasolina de bajo octanaje subió 7.74% y en Querétaro el aumento fue de 8.14 por ciento.
Pagan más quienes ganan menos
A pesar de que el incremento de precios en el país es generalizado, no aplica igual o no se resiente igual entre la población. Por ejemplo, existe disparidad entre una entidad y otra, pero también entre las personas que ganan más y menos.
El incremento de precios es más elevado entre la población que percibe menos ingresos. De acuerdo con los datos del Índice Nacional de Precios al Consumidor del Inegi, se refleja que para quienes ganan hasta un salario mínimo, alrededor de 5,200 pesos al mes, la inflación es de 9.55 por ciento. Esto indica que con ese dinero deberán asumir los incrementos reflejados sobre todo en alimentos y bebidas no alcohólicas, donde la inflación fue de 14.83 por ciento.
Lo anterior contrasta con los datos reportados para quienes tienen ingresos arriba de 31,116 pesos al mes, para este sector de la población la inflación fue de 8.20% menor al porcentaje general y donde el índice de precios de alimentos y bebidas no alcohólicas fue de 13.90 por ciento.
“El impacto de la inflación es mayor para hogares con bajos ingresos debido a la composición de las canastas de consumo. Dependiendo del nivel de ingresos, los hogares distribuyen sus recursos de manera diferente”, según el reporte ¿Cómo impacta la inflación a los hogares?, realizado por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Por ejemplo, resalta que mientras los hogares con menos recursos destinan 50% de su gasto al rubro de alimentos, bebidas y tabaco, la proporción que un hogar con ingresos medio altos le dedica a dichos bienes es de 43%, y a quienes tienen percepciones de hasta 54,427 pesos le asignan hasta 28 por ciento.
“Dado que la inflación actual es más pronunciada en bienes alimenticios y agropecuarios, estos incrementos afectan más a quienes asignan una mayor proporción del gasto a esos productos: los hogares con menos recursos”, afirma en el reporte del IMCO.