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Opinión

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¿Cómo comprar un auto sin endeudarse?

Un automóvil sin duda es un artículo que vale mucho dinero. Por eso mismo, muchos piensan que es prácticamente imposible comprarlo de contado. Yo pienso diferente.

Como muchas personas, compré mi primer auto a crédito. Pero ha sido el único. Todos los demás los he pagado de contado y voy a compartir cómo lo he logrado.

Ese primer coche fue un auto compacto. Tomé un crédito a un plazo relativamente corto: 24 meses. Tenía una buena cantidad ahorrada como enganche y pensé que podía pagar las mensualidades con comodidad. Pero no tomé en cuenta todos esos gastos adicionales que implica tener un carro: seguro, tenencias, verificación, mantenimiento, gasolina, etc.

Nunca me había endeudado y no me gustó para nada la experiencia. Sentí esa pérdida de flexibilidad financiera. Parte del dinero que ganaba ya estaba etiquetado en pagar la mensualidad y todos los demás gastos relacionados. Tuve que posponer otras metas y sufrí alguna vez que se presentó un imprevisto.

Por eso me dediqué a pagarlo antes de tiempo. Llegó el aguinaldo y lo destiné exclusivamente a dar un pago anticipado a capital. Me ahorré un montón en intereses gracias a eso y reduje el plazo varios meses.

Cuando finalmente salí de esa deuda y me entregaron la factura, me dije a mí mismo: nunca más. Sin embargo, me senté a ver mi plan de gastos y decidí seguir “pagando” una mensualidad de automóvil. Ya no a un banco o a una financiera, sino a mí mismo.

Esa “mensualidad” era mucho más pequeña que la que pagaba antes: aproximadamente la mitad. Ya no me sentí apretado y ya no era una obligación, sino una decisión propia. De esta manera podría ir juntando para cambiar el coche en unos años.

Siempre me ha gustado mantener mis cosas bien. En cuatro años ya tenía la cantidad necesaria para vender mi coche y comprar uno  similar de contado. Pero no fue necesario: estaba todavía en perfecto estado. Pero seguí “pagándome” la mensualidad de todas maneras. No me costaba trabajo.

Dos años después decidí que ya era tiempo de renovar el vehículo. Me lo tomaron a un buen precio en la agencia, puse la diferencia y lo pagué de contado. De hecho no necesité usar todo mi fondo (aunque sí estuve tentado a comprar uno más caro o más lujoso). Fue una buena decisión.

Desde entonces, me he seguido pagando una mensualidad para cambiar el auto. También lo cuidé mucho. El segundo me duró ocho años en óptimas condiciones.

En resumen, todos mis autos los he pagado a mensualidades. Pero también los he pagado de contado (salvo el primero): con el dinero que tengo en mano (ahorrado en mi cuenta bancaria).

La diferencia es que no me he endeudado y no he tenido que comprometer mi ingreso futuro: dinero que todavía no he ganado. Me pago a mí mismo una mensualidad según mis posibilidades, en lugar de pagar a otros (acreedores). Eso me da mucha flexibilidad porque si algún día pierdo el trabajo o se cruza una necesidad más importante, puedo cambiar mi plan (o incluso hacer uso de ese fondo).

Siempre se puede pagar de contado. Se trata de cambiar el paradigma: en lugar de comprar hoy y pagar después, uno paga hoy y compra después, cuando ya tiene el dinero. Hacerlo así, además, es mucho más barato (uno se ahorra los intereses y hasta problemas).

Este mismo concepto se puede aplicar a todo. Es simplemente cambiar la mentalidad.

contacto@planeatusfinanzas.com

Ejecutivo de alto nivel en seguros y reaseguro con visión estratégica de negocio, alta capacidad de liderazgo, negociación y gerencia. Además es columnista de Finanzas Personales en El Economista, Coach en Finanzas Personales y creador de la página planeatusfinanzas.com

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