Apertura a inversión privada: Claudia Sheinbaum

Certeza y seguridad jurídica, apertura y nuevos esquemas de inversión ofreció la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, a inversionistas de México y Estados Unidos. 

Aseguró que no cerrará las puertas a la democracia ni a las inversiones.

La presidenta de México no quiere mantener bajo su control al Poder Judicial; lo que se busca es fortalecerlo y mantenerlo lejos de la corrupción.

Anunció que a partir de una estrategia nacional de inversión, habrá esquemas de participación público-privadas diferentes; serán más sanas que las que existieron en el pasado, aseguró.

Más específicamente, ofreció que habrá reglas claras de inversión en energías limpias, las cuales se ha comprometido a colocar en el 45% del monto total de la producción de energía total. Sheinbaum habló de la necesidad de fortalecer el acuerdo comercial con Estados Unidos y Canadá.

La primera mujer que se convierte en presidenta de México, a 15 días de su toma de posesión, se presentó ante los más importantes empresarios de México y de Estados Unidos con inversiones en el país para exponerles sus planes de gobierno. Garantizó seguridad a los empresarios e inversionistas. La de ayer fue una jornada de contrastes. En las afueras del Palacio Nacional –lugar al que se cambió de última hora– los invitados a la reunión del USA-Mexico CEO Dialogue, tuvieron que cruzar frente a grupos, bien organizados, de trabajadores del Poder Judicial de todo el país, que se concentraron en todas las entradas del recinto, para gritar y mostrar pancartas en rechazo a la Reforma Judicial.

Los más de 240 CEOS de Estados Unidos y México tuvieron que bajar de sus autos y cruzar la aduana de los manifestantes.

Dentro de Palacio Nacional, en el salón Tesorería, se concentraron empresarios como Carlos Slim Domit, Bernardo Gómez, co presidente ejecutivo de Grupo Televisa; banqueros como, Eduardo Osuna, director de BBVA; Manuel Romo de Citibanamex, Adrián Otero, director general de ScotiaBank; Daniel Becker, presidente de Banco Mifel; Raúl Martínez Ostos, presidente de Barclays Bank Mexico, Emilio Romano, CEO de BoFa en México y dueños de medios de comunicación como Francisco Aguirre, de Grupo Radio Centro y Jorge Nacer de El Economista, entre muchas otras personalidades. La sesión estuvo dividida en dos. La presidenta de México se reunió primero con los integrantes del USA-Mexico Dialogue.

CEO Dialogue y el sector energético

Fue una reunión más privada, con los 60 líderes del sector privado. Ahí, se pudo observar que el CEO Dialogue marcó un nuevo capítulo en la relación México-Estados Unidos, con el sector energético al frente. La urgencia de una energía más limpia, confiable y competitiva es clara: sin ella, el nearshoring no ocurrirá.

Así se comentó en la reunión privada con la presidenta Sheinbaum, misma que se ha comprometido a alcanzar un 45% de generación con energías limpias para el final de su sexenio.

Esto implica atraer inversiones por alrededor de 40 mil millones de dólares, o 6.6 mil millones por año.

Para lograrlo, es crucial la colaboración entre el sector público y privado, tanto a nivel nacional como internacional.

Por lo pronto, es una alianza que ya se vislumbra con la participación de líderes como Tania Ortiz Mena de Sempra Infraestructura, Carlos Barrera de Atlas Renewable Energy y Carlos García, presidente de la American Chamber México, en este primer evento empresarial con EUA del sexenio.

Anuncios de inversión

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, remarcó el mensaje de certeza para las inversiones y la disposición de México para que el comercio regional que, alcanza ya el 30% del PIB mundial, siga creciendo. Aseguró que se habrían hecho anuncios de inversión que superan los 20 mil millones de dólares

Pacific Mexico con 15 mil millones de dólares para el 2025; Royal Caribbean, 15 mil millones de dólares, para un polo de desarrollo turístico; Amazon, 6 mil millones de dólares para fortalecer su red y capacidad digital en México y Pemex en conjunto con otra empresa con una inversión por 10 mil 400 millones de dólares. Lo cierto es que fueron refrendos de inversión previamente realizados. Con todo y todo, el impacto es positivo.

Bueno y malo

Lo bueno: La Presidenta abre el diálogo, ofrece garantías a inversiones y promete apertura y esquemas a empresarios e inversionistas. Se observa un reconocimiento de que el gobierno requiere que aumente la participación del capital privado nacional y foráneo. La mayoría de los asistentes con los que pude platicar registraron el evento y el mensaje de manera positiva.

Lo malo: El gobierno no escucha y minimiza las protestas por la Reforma Judicial. El mensaje gubernamental pasa por alto la falta de crecimiento económico, débiles finanzas públicas, bajo nivel de inversiones extranjeras directas nuevas, riesgo Pemex y grandes compromisos económicos que implican los programas sociales. Veremos.