El reto es brindar servicio de calidad a bajo costo

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Para el Grupo Financiero Banorte, el tercero más importante en el país por el tamaño de su cartera, las buenas perspectivas económicas y el mayor dinamismo en la actividad comercial proporcionarán las herramientas para que se consolide la estrategia del banco en el corto y mediano plazo, la cual está basada en terminar de integrar los negocios recién adquiridos y seguir en la búsqueda de mayor presencia en el sector bancario.

Guillermo Ortiz Martínez, presidente del Grupo Banorte, dice que si bien la situación del exterior aún muestra signos de debilidad económica tanto en Europa como en Estados Unidos, en México se espera un crecimiento de entre 3.5 y 4%, y ellos sabrán aprovechar la mayor competitividad de algunos sectores en los que Banorte ya tiene una fuerte presencia en el mercado, como el manufacturero.

El exgobernador del Banco de México considera necesario para Banorte aumentar el número de clientes, a través de créditos y productos financieros diversos, por lo que las reformas que ha presentado el gobierno federal en el marco del Pacto por México, y las que están pendientes, serán un apoyo determinante para segmentos del mercado como las pymes, el financiamiento a estados y el crédito al consumo.

¿Cómo influirán las reformas del Ejecutivo federal al negocio de créditos a pymes y el financiamiento a estados?

Las reformas que se han llevado a cabo, como la laboral, las relativas a la deuda de los estados y municipios, la educativa y la reforma en telecomunicaciones han sido casos extremadamente positivos, no sólo para mejorar la perspectiva de México en el exterior, sino para sentar las bases que incrementen el crecimiento potencial de la economía nacional.

Por lo que se refiere a las reformas que se discuten en el Congreso en torno del endeudamiento de estados y municipios, creo que tienden a ordenar un exceso de endeudamiento en los estados, además de que establecen condiciones para atender de manera ordenada a aquellos estados en los que hay que hacer un ajuste fiscal adicional, por lo que nosotros la vemos muy positiva para el negocio bancario y para la economía, en su conjunto.

¿Cuál es la estrategia del grupo para tener mayor presencia en el negocio de las Asociaciones Público-Privadas?

Consideramos que esta figura es un vehículo adecuado para emprender proyectos, especialmente de infraestructura, que requieren el esfuerzo coordinado del sector público y del sector privado y por consiguiente, se requiere atender el tema financiero.

En México, estos instrumentos han sido un factor importante para el desarrollo de infraestructura, aunque en menor escala cuando se compara con otros países. Sin embargo, creemos que es importante para seguir aumentando la inversión en infraestructura, por lo que en Banorte seguiremos con mucho interés trabajando en este tipo de proyectos.

¿Cuál es la estrategia de Banorte en expansión y nuevos mercados, y cómo se ha financiado?

El grupo financiero se encuentra bastante balanceado. Aproximadamente la tercera parte de los activos está administrada por el banco, otra tercera parte por la casa de Bolsa y sociedades de inversión, y una última parte por el negocio de ahorro y previsión, incluyendo la afore, por lo que vemos un balance bastante adecuado en la composición de los activos del Grupo.

Hemos hecho adquisiciones importantes, la más reciente fue la afore, posterior a la fusión con Ixe, la cual se pagó con un intercambio de acciones. En el caso de la afore, ésta se liquidó en efectivo y el banco consiguió recursos a una tasa de interés muy baja y de mediano plazo.

Estamos administrando el uso de capital por parte del banco y la generación de utilidades. El reparto de dividendos, que es relativamente bajo, de alrededor de 20%, nos permite sostener el crecimiento del grupo a mediano plazo.

Siempre estamos atentos a oportunidades que se puedan presentar para la compra o adquisición de nuevos negocios en el exterior, pero sobre todo en México. Como ustedes saben, el banco ha tenido un récord en materia de adquisiciones que ha sido exitoso, al mismo tiempo de un crecimiento orgánico.

¿Cuál es el reto para Banorte en el mediano plazo?

El reto para Banorte y para todo el sistema financiero es brindar servicios de calidad y con bajo costo a un mayor número de la población.

Esto lo lograremos con mayor competencia económica y también con una mayor penetración de los servicios financieros.

En esto hemos avanzado como sistema y se ha reflejado en menores tasas de interés y menos comisiones promedio, comparados con las que había hace algunos años.

Por otro lado, coincidimos con la visión del gobierno federal para que se incremente la formalidad en la economía. Hay que dar incentivos para que las personas se integren a la formalidad.

¿Cómo se ve el negocio de Banorte en el largo plazo?

A lo que aspiramos es a ser el mejor banco de México, no necesariamente el más grande; aunque si somos el mejor, eventualmente el tamaño del banco debe reflejar la calidad de la atención y del servicio.

Nuestro enfoque central es el cliente y estamos en un proceso intenso de revisión de todas nuestras operaciones, buscando hacerlas más eficientes. Nos vemos orientando toda la estrategia del banco hacia los clientes, que ya suman 11.5 millones de personas, además de otros 10 millones de cuentas en la administradora de fondos.

Al final del día, lo que vendemos los bancos son servicios financieros y lo que nos debe de distinguir es la atención, la rapidez y la prontitud de respuesta hacia el cliente. Respetamos a la competencia y creo que todos estamos pensando en este mismo tema.

ehuerfano@eleconomista.com.mx