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Pathbooks, en busca de escritores y lectores de historias interactivas
En América Latina, 68% de niños y jóvenes piensa que leer es aburrido y prefiere ver YouTube o jugar videojuegos, por eso creamos Pathbooks, una plataforma de lectura interactiva en línea que ha alcanzado ya un millón de descargas en más de 70 países.
En América Latina, 68% de niños y jóvenes piensa que leer es aburrido y prefiere ver YouTube o jugar videojuegos, por eso creamos Pathbooks, una plataforma de lectura interactiva en línea que ha alcanzado ya un millón de descargas en más de 70 países y que en estos días está siendo recomendada por Apple a sus usuarios, dice Jorge Caballero, CEO, escritor y programador de Pathbooks, a El Economista.
Pathbooks es una plataforma 100% mexicana que se ha convertido en el punto de encuentro de más de 5,000 usuarios y 120 escritores de Iberoamérica y Estados Unidos que gustan de la literatura romántica, de terror, ciencia ficción y hasta clásica, pero con diversos finales interactivos, donde las decisiones que toma el lector harán que la historia tenga un derrotero impredecible.
Actualmente, Pathbooks ofrece en línea más 150 historias ramificadas en más de mil finales diferentes, y Apple se ha convertido en promotora de su relanzamiento, con nuevos autores y nuevo contenido. “Es un muy satisfactorio para nosotros que Apple nos recomiende con sus usuarios porque es una empresa muy selectiva”.
La historia de Pathbooks comenzó hace tres años en un rincón de la casa de Jorge Caballero, originario de Matamoros, Tamaulipas. Pasó de escribir cortometrajes para Televisa a crear su propia plataforma digital. Combinó sus dos habilidades, como escritor y programador, para crear una plataforma de lectura interactiva que hoy está teniendo buena acogida por el público.
Caballero dice que Pathbooks siempre está en busca de escritores, tanto de aquellos que ya tienen obra publicada e incluso han incursionado en el guionismo para televisión hasta escritores aficionados que apenas van comenzando.
—¿Qué características debe tener los escritores de Pathbooks?
—En primer lugar, tienen que ser audaces y que les guste el formato, porque si escribir una historia convencional es complicado, pues escribir una historia con varios finales interactivos es un poco más complicado; deben estar abiertos a las nuevas tecnologías y a los nuevos formatos, al final del día es una nueva forma de contar historias y transmitir emociones, porque por eso leemos, porque nos divierte, nos da placer y nos emociona.
A algunos les toman más tiempo que a otros aprender esta estructura, hacer una historia con varios finales, que por otra parte es una ventaja para los escritores y plantea retos al lector. “Hay veces que como escritor batallas mucho para conseguir el mejor final, y a veces no quedas conforme, te parece que hubieras podido hacer un final distinto, por eso, la gran ventaja en este formato es que ahora las decisiones las va tomando el lector y ellas te llevan a un final que a veces ni esperas.
—¿Qué tipo de escritores e historias encuentras en la plataforma?
—Tenemos historias para todo el público. Desde libros clásicos, como La Cenicienta, El Principito, La bella y la bestia; libros de historias de terror, de ciencia ficción, romance, donde el lector debe tomar decisiones que le llevarán a un determinado final inesperado, pero del cual no tiene control. No sabe qué va pasar, y eso es lo emocionante, porque depende de las decisiones que tome.
La diferencia es que nuestra Cenicienta (con 11 finales diferentes) no tiene necesariamente que esperar a que llegue un príncipe y la rescate, puede decidir ir o no al baile del palacio, se puede convertir en veterinaria, o decidir viajar por el mundo; eso, por ejemplo, les encanta los niños y a sus padres.
En Pathbooks hay libros que tienen 4 o 5 finales hasta El Cazador, que tiene 36 finales diferentes; también hay minipathbooks para leer en el Metro.
La descarga de la plataforma es gratuita con acceso a 5 libros gratis para probar la plataforma, y la suscripción es de 99 pesos por mes o 199 pesos por 90 días.
