El impacto de las pausas de carrera de las madres trabajadoras

Hace poco me contactó una amiga que actualmente está reincorporándose al mercado laboral después de haber decidido dedicarse de tiempo completo a ser madre. Ahora enfrenta una realidad muy cruel en el entorno de trabajo: nadie cree que sea capaz de volver a tener un puesto debido a esta pausa voluntaria en su carrera.

Soy una reclutadora con más de 30 años de servicio y uno de los paradigmas que he roto en mi carrera buscando talento está precisamente relacionado con las pausas laborales, lo que también hoy es conocido como “descanso profesional” se acuerdo con una opción habilitada por LinkedIn para incluir dentro del perfil de trayectoria laboral.

¿A qué se refiere este concepto? Tiene que ver con una pausa, descanso o incluso año sabático que toma un profesional para dedicarlo a otros propósitos personales como “ser mamá, estudiar un doctorado, ir al extranjero, cuidar a algún familiar enfermo”, etc.

De acuerdo con una investigación realizada este año por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), el 29% de las personas trabajadoras ha tenido que pausar su carrera profesional en algún momento por cuestiones personales. De este grupo, el 44% son mujeres casadas y el 51% son madres.

Además, “la mitad de madres con educación superior han puesto en pausa sus carreras profesionales por motivos personales, contra dos de cada 10 padres”.

Y aunque se esté intentando normalizar esta situación, en la práctica las pausas de carrera siguen afectando a las y los trabajadores. En la mayoría de los casos, una persona que busca incorporarse nuevamente al mercado laboral se encuentra con una serie de barreras y, aunque el currículum u hoja de vida sean espectaculares, los reclutadores siguen cuestionando seriamente dichos espacios en la trayectoria.

En una entrevista de trabajo en este contexto, el ejercicio suele enfocarse más en los cuestionamientos relacionados con la discontinuidad laboral que en las experiencias o los atributos profesionales del candidato.

De dónde vienen tantas dudas de los reclutadores. Esto responde a paradigmas que enmarcan las siguientes preguntas: si esta persona dejó de laborar durante determinado tiempo, ¿necesitará realmente el trabajo? Si trabaja con nosotros, ¿podría pasar lo mismo? ¿Qué tan estable es laboralmente? Entre muchos otros cuestionamientos.

Todo esto refleja que en el fondo nos parece increíble que alguien tenga una prioridad personal superior a su desarrollo profesional y que seguimos creyendo que una pausa por voluntad propia a largo plazo se puede convertir en ‘una mancha’ en un currículum".

10 consejos para el retorno al mercado laboral

Las y los profesionistas que se enfrentan a esta situación deben ser persistentes, es la base para lograr retomar la carrera. A continuación algunos consejos si estás pensando volver al mercado laboral:

» 1. Conoce tus objetivos profesionales

Identifica qué tipo empleo deseas en función de tus horarios y disponibilidad, además el objetivo profesional debe ser claro y realista. Es muy importante establecer qué rol se adapta más con tu vida actual o que se acerque lo más posible. En muchas ocasiones, no tener un objetivo claro nos hace aceptar el primer empleo que se presente, lo que después puede interferir con nuestro rol de madre y podemos terminar por abandonarlo.

» 2. Haz tu currículum como si fuera la primera vez

Éste es uno de los elementos más importantes a la hora de buscar trabajo, ya que nos permitirá mostrar nuestras competencias y lo que podemos aportar a una empresa. Es muy importante que te olvides de la forma tradicional de hacer un CV, ya que debido a la digitalización, muchas empresas utilizan sistemas automatizados de reclutamiento (ATS por sus siglas en inglés). Ante este contexto, debes usar palabras clave que te vinculen automáticamente con la vacante.

» 3. Dedica tiempo a buscar trabajo

Organiza tu agenda, determina cuántas horas por día o qué días de la semana dedicarás a buscar trabajo. En este punto es muy importante que entres a las páginas de búsqueda de empleo para ver qué ofertas pueden adaptarse a tu experiencia profesional. En caso de no tener experiencia, destaca qué hiciste en tu nuevo rol de madre y que tus competencias están sólidamente desarrolladas.

» 4. Utiliza recursos de búsqueda de empleo

Asiste a ferias de carrera virtuales, busca en redes sociales, plataformas de empleo y sitios web de empresas y de asociaciones profesionales. Regístrate para recibir alertas de trabajo diariamente o semanales por correo electrónico. Actualmente, muchas páginas de empleo cuentan con aplicaciones móviles lo que te permite recibir las alertas de empleo directamente en tu celular.

» 5. Identifica tus habilidades

Señala los logros que resalten las habilidades necesarias para un determinado trabajo. Es muy probable que te entrevisten con el método STAR, un sistema de entrevista basado en las conductas o comportamientos mostrados por los candidatos y que permite evidenciar sus competencias.

Este esquema se basa en el siguiente principio: “Comportamientos pasados predicen comportamientos futuros”, por lo que en la entrevista se presentan situaciones (S) reales para identificar las tareas (T) y acciones (A) realizadas por la persona, así como los resultados (R) obtenidos.

Algunos ejemplos de este tipo de preguntas son:

• Dame un ejemplo específico de una tarea que tuviste que realizar en equipo, ¿cuál fue tu aportación y en qué contribuyo exactamente al logro del resultado?
• Dime qué has hecho para motivar a tus compañeros de equipo a lograr los resultados esperados, ¿cómo lo manejaste?

Responde siempre en pasado y con sinceridad sobre el papel que jugabas, lo importante eres tú.

» 6. Refuerza el networking

Esto Implica habilidades de comunicación, organización y marca personal, además de conservar y ampliar la red de contactos. Busca apoyo en tu círculo cercano, pues es muy probable que por esta vía encuentres varias alternativas laborales. Nuestros contactos pueden además apoyarnos de otras formas, por ejemplo, puedes pedirle a alguien que te haga una entrevista para identificar mejor tus competencias y tener más claridad al buscar empleo.

» 7. Considera contrataciones temporales

Contempla este tipo de vacantes como oportunidades para adquirir nuevas habilidades y una alternativa para tu regreso profesional. Podrías comenzar cubriendo un reemplazo o una plaza temporal y de ahí saltar a un empleo más estable.

» 8. Investiga a la empresa

Visita la página web de la compañía, conoce sus productos, que noticias hay sobre la empresa y el sector a donde pertenece, lee su blog y sigue sus redes sociales. Identifica si dicha marca empleadora es donde te gustaría trabajar.

» 9. Prepárate para las entrevistas

No puedes llegar a una entrevista de trabajo sin preparación, de ahí la importancia de investigar sobre la empresa. Estudia la vacante para la que estás aplicando poniendo énfasis en las competencias. Si hay algún tema que no conoces, puedes decir que no tienes miedo a aprender. Prepara un mini discurso sobre estos puntos para lograr una mayor empatía con el reclutador. Ensaya las preguntas y practica las respuestas (puedes poner la foto de la persona a la que más confianza le tengas para disminuir los nervios), pon atención a tu expresión corporal y cuida tu vestimenta.

» 10. Ten en mente las preguntas comunes

Algunas de las preguntas más comunes en un proceso de entrevista laboral son las siguientes:

• ¿Cuáles son tus fortalezas?
• ¿Cuáles son tus debilidades?
• ¿Por qué quieres trabajar con nosotros?
• ¿Dónde te ves en cinco o diez años?
• ¿Qué puedes ofrecer que otros candidatos no tengan?
• ¿Por qué no trabajaste en estos periodos de tiempo?
• ¿Estás dispuesto a cambiar de ciudad?
• ¿Tienes disponibilidad para viajar?

Una de las preguntas clave entre los seleccionadores es: ¿por qué debemos contratarte? Una forma de responder para destacar es reflejar que se entiende la filosofía de la empresa. Para ello, mira videos de su CEO, sus comerciales y sus valores para comentar que eres compatible con esos principios, así lograrás una mayor conexión con el reclutador. Trasmite las ganas que tienes de trabajar con ellos, qué te gusta de la empresa. Resalta tus cualidades alineadas a las expuestas en el anuncio o la vacante.