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Transición a una economía verde: La agenda climática con implicaciones laborales
Las emisiones cero pueden hacer la diferencia ante el desempleo que existe en la región.
Las estrategias de descarbonización en América Latina y el Caribe tienen potencial para una transformación económica inclusiva, donde la creación de empleo será un beneficio clave de la transición a una economía de cero emisiones netas.
Así lo establece el estudio Sinergias de creación de empleo y descarbonización en América Latina: un análisis exploratorio basado en simulación, realizado por el Tecnológico de Monterrey, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Organización RAND, donde se agrega que, ante el desempleo en la región, las emisiones cero pueden hacer la diferencia.
“Alcanzar las emisiones netas cero para 2050 en América Latina y el Caribe es técnicamente factible y ofrece una variedad de beneficios potenciales. Los caminos para alcanzar este objetivo varían y dependen de las características específicas de casa país, como la dependencia de combustibles fósiles en la generación de electricidad y el transporte y la relevancia económica de las industrias de alimentos de origen animal", refiere el estudio.
Las recomendaciones para la descarbonización
Pese a que cada país establecerá sus transformaciones, el estudio tiene unas recomendaciones generales para que se produzcan multiplicadores de empleo:
- Reducir la demanda de uso final de energía térmica, mejoras en la estructura de los edificios, lo que generará siete empleos en total por cada millón de dólares invertidos.
- Aumentar la proporción de energías renovables, por ejemplo, eólica, solar, bioenergía, en la generación de electricidad, lo que crearía seis empleos en total por cada millón de dólares invertidos.
- Mejorar el tratamiento de aguas residuales urbanas e industriales con lo que se crearían seis empleos en total por cada millón de dólares invertidos.
Estos son algunos de los sectores que tienen el potencial de ser los multiplicadores del empleo:
1. Agricultura, bosques y otros usos de la tierra
La mejora de la productividad de los cultivos y de las prácticas de cultivo de arroz implican principalmente inversiones en los sectores de agricultura y electricidad y maquinaria. Esta asignación tiene el potencial de crear un promedio de 8.5 empleos totales por cada millón de dólares.
Mientras que las iniciativas en el sector ganadero, como la reducción de la fermentación entérica y la mejora de la conversión alimenticia, también generan multiplicadores de empleo promedio de nueve empleos por cada millón de dólares dentro de este grupo.
2. Residuos
La gestión de aguas residuales se perfila como una de las áreas más prometedoras en términos de potencial de creación de empleo en los países de América Latina y el Caribe.
Los mayores multiplicadores de empleo están asociados con la mejora de la infraestructura de tratamiento de aguas residuales industriales y domésticas.
Por su parte, México y Honduras presentan un escenario favorable para la creación de empleo, en particular en lo que respecta a la captura de biogás de las instalaciones de tratamiento de aguas residuales para la producción de energía, y generarían 7.5 empleos totales por cada millón de dólares invertidos.
3. Edificios
Las transformaciones de política destinadas a reducir la demanda de energía térmica para el uso final mediante la mejora del aislamiento de los edificios y la transición a la calefacción eléctrica mediante la modernización (por ejemplo, estufas eléctricas) producen fuertes multiplicadores de empleo promedio.
Esto es especialmente relevante para las conexiones con el sector de la construcción, un importante contribuyente a las oportunidades de empleo tanto directas como indirectas.
4. Producción de energía
El sector energético, un impulsor clave en el esfuerzo global de descarbonización, presenta numerosas oportunidades para avanzar en la agenda climática.
Dentro de la tecnología energética, las actividades enfocadas en reducir las pérdidas de transmisión involucran la modernización y mejora de la infraestructura de transmisión y distribución.
Estas inversiones se concentran principalmente en el sector eléctrico y de maquinaria (E&M), lo que resulta en multiplicadores promedio de siete empleos totales por millón de dólares dentro de la mitad superior de los 17 países.
5. Transporte
Las vías de descarbonización energética para el transporte, analizadas en este estudio, se relacionan principalmente con la transición del transporte por carretera, ferrocarril y transporte marítimo a combustibles alternativos.
En particular, la transición de los combustibles fósiles a la electricidad en vehículos ligeros y la adopción de una combinación de electricidad e hidrógeno para impulsar camiones medianos y pesados ofrecen una promesa significativa para la mitigación del cambio climático y la creación de empleo.
6. Industria
Las transformaciones de políticas en el sector industrial abarcan acciones específicas y generales para cada industria que implican mejorar la eficiencia de los materiales, especialmente en la producción de cemento y acero, sustituir materiales (por ejemplo, materiales vírgenes por desechos), mejorar la eficiencia energética industrial y realizar la transición de combustibles fósiles a electricidad e hidrógeno derivados de energías renovables.
En el ámbito de la energía industrial, la transición de la combustión de combustibles fósiles a alternativas más limpias para el calor industrial, que abarquen todos los niveles de temperatura, tiene un potencial significativo para la creación de empleo en los países de América Latina y el Caribe.
El análisis recomienda que, para abordar los desafíos de la economía política en torno a la agenda climática, las políticas deben garantizar que los trabajadores, las empresas y las comunidades afectadas negativamente por estas transiciones reciban el apoyo adecuado y se les permita integrarse a la economía verde.