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Kenia domina el mundo
Los atletas kenianos han logrado adueñarse de 10 de los 16 maratones considerados de élite en la temporada 2011, con lo que reafirman su poderío en los 42.195 kilómetros.
Kenia es, sin duda, el rey del mundo. Al menos en lo que al maratón se refiere. De apariencia menuda, casi esquelética. A su piel la distingue un color tostado inigualable, pero si algo diferencia a los kenianos es la firmeza en sus piernas, en sus pasos, que les han dado este año la supremacía en los cinco maratones más importantes del mundo.
No han dejado un título para nadie más. Por algo son los reyes de los 42.195 kilómetros. En Boston, Geoffrey Mutai se coronó; en Londres, Emmanuel Mutai hizo lo propio; en Berlín, Patrick Makau se quedó con el triunfo; en Chicago, Moses Mosop se adueñó de la competencia, y en Nueva York, Geoffrey Mutai volvió a bañarse de gloria.
Los números que los coronan
Las cifras son tan frías como contundentes. Los kenianos han ganado las últimas ediciones en categoría masculina en 22 de los 33 maratones pertenecientes a las tres categorías del circuito mundial Federación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF), la misma proporción de triunfos (10 de 16) entre las de categoría élite, la máxima del atletismo mundial.
Los 11 éxitos que se les han escapado se los reparten Etiopía, con siete triunfos, Marruecos, con tres, e Italia, con uno.
Del mismo modo, los kenianos se apoderaron del título en el maratón durante el Mundial de Atletismo de Daegu, con lo que no han dejado lugar a que alguien más brille en esta especialidad.
Pero los reyes de Kenia no se han conformado con quedarse con tantos títulos, sino que también este 2011 han recuperado la plusmarca mundial de la especialidad que les arrebató el etíope Haile Gebrselassie. Lo hicieron en dos ocasiones aunque solamente les fue reconocida una.
Primero, Patrick Makau conquistó la plusmarca oficial en el maratón de Berlín al quebrar el récord de Haile (2:03.59 horas) y dejarlo en 2:03.38 horas.
Luego, Geoffrey Mutai se convirtió en el hombre más rápido en recorrer los 42.195 kilómetros en tan sólo 2:03.01 horas en el maratón de Boston, pero su marca no fue homologada por la IAAF porque el recorrido tenía demasiado desnivel.
El domingo, de nuevo Mutai puso la corona a su país al quedarse con el título en Nueva York y además de eso, logró imponer un récord en la carrera con 2:05.06 horas, con lo que demostró que los kenianos siguen dispuestos a dominar el mundo del maratón, porque, sencillamente, para ellos correr es la mejor manera de ganarse la vida.
