Tigres rinde octavo título a su linaje de resiliencia

A pesar de la euforia que los invadía por haber logrado el título del torneo Clausura 2023 con una remontada como visitante frente a Chivas, los jugadores y cuerpo técnico de Tigres insistieron en dedicar su nueva corona al espíritu de resiliencia que ha acompañado a la institución desde los años opacos en el fondo de la tabla e incluso en el descenso.

“No nos dimos por vencidos nunca porque eso es lo que representa esta institución: se fue al descenso (en 1996), volvió (en 1997), perdimos finales y a los seis meses salimos campeones, entonces la historia de este club es esa, es levantarse de las caídas y lo vivimos con mucha intensidad”, enfatizó el portero Nahuel Guzmán después de la victoria por 3-2 sobre Guadalajara.

Antes de que un grupo dirigencial comandado por el emporio cementero de Cemex, denominado Sinergia Deportiva, tomara a Tigres a finales del siglo pasado, el equipo sólo ostentaba dos títulos en primera división (1978 y 1982) y tocaron fondo al ser enviados al descenso por su acérrimo rival, Monterrey, al cierre de la temporada 1995-96. Fue una herida que caló en lo profundo de la organización felina y que ha servido de inspiración para una etapa completamente opuesta.

“En una pequeña cuota estoy devolviendo la tristeza más grande que nos tocó vivir con el descenso. Eso todavía es una deuda más grande, pero ahora el que yo pueda volver con mi cuerpo técnico y ganar es una cuota de tantas que le debemos a la institución y a la afición. En esto del futbol son menos las satisfacciones y más las amarguras, entonces cada tropiezo es aprendizaje, levantarse y seguir caminando”, diagnosticó Robert Dante Siboldi, entrenador del equipo y gestor del trofeo del Clausura 2023.

Siboldi fue parte del plantel de Tigres que descendió en 1996 con una derrota ante Rayados. El uruguayo poco a poco ha edificado su perfil como un entrenador exitoso en el futbol mexicano y al cierre de este torneo fue contratado por el equipo regiomontano para salvar el semestre tanto en la Liga MX como en la Concachampions. Logró lo primero y el sabor fue muy grato.

“No lo dudamos (Siboldi y su familia), en el momento en el que nos ofrecieron venir (a Tigres), ya sea por dos meses, dos días o 10 años, no había que pensarlo, y además sabiendo con la afición, directiva e institución que tenemos para estar siempre en los primeros lugares, con base a eso tomé este desafío”.

Después de los despidos de Diego Cocca y Marco Antonio ‘Chima’ Ruiz antes de la jornada 15, Tigres vivió el primer torneo de su historia con tres entrenadores, creando un ambiente de incertidumbre rumbo a la fase final. Siboldi sólo ganó uno de sus tres partidos de fase regular pero el colchón que dejaron sus predecesores alcanzó para meterse al repechaje y, ahí, la historia sería completamente diferente.

“Sin duda encontré un vestidor muy incierto, expectante de ver qué íbamos a hacer, era el tercer entrenador en el mismo torneo, pero quiero hacer mención de Diego Cocca por el armado del plantel y por los puntos que consiguieron dentro del torneo tanto él como ‘Chima’ y todo su cuerpo técnico; es para ellos también este logro”.

Tigres se metió a la postemporada con 25 puntos, de los cuales Siboldi aportó apenas cuatro, pero su mayor incidencia se dio a partir del repechaje, venciendo primero a Puebla, después a Toluca (en cuartos de final), a Rayados (en semifinales) y a Chivas en la última batalla, logrando un equilibrio de rendimiento entre los veteranos como André-Pierre Gignac y Guido Pizarro, así como con jóvenes como Sebastián Córdova, Diego Lainez y Jesús Garza.

“Todos fallamos, pero nunca dejamos de intentar ir al frente porque esta es la definición de esta institución: sufrir, todas las finales que hemos ganado lo hemos hecho sufriendo, pero hoy la octava es importante por esta mezcla de jóvenes y de viejitos que tenemos en el plantel”, evaluó Gignac, quien convirtió el primero de los tres goles para la remontada ante Chivas.

En la actualidad Tigres tiene uno de los presupuestos más altos de la Liga MX, rondando entre los 400 y 450 millones de pesos anuales, de acuerdo con reportes de especialistas a este diario. Eso le ha permitido fortalecer su plantilla de experimentados con figuras emergentes, como lo fue Diego Lainez en este semestre.

“Hoy me toca ser campeón y estoy muy feliz por ello. Quiero seguir ganando, gracias a Dios en mi corta carrera ya he ganado algunos títulos y quiero seguir ganando con Tigres, que fue el equipo que dio todo por mí en mi regreso a México. Si fracasé o no (en Europa), soy campeón ahora”, mencionó Lainez durante las celebraciones de lo que para él es su tercer título a nivel de clubes a sus 22 años, tras ganar otra Liga MX con América (en 2018) y una Copa del Rey con el Betis (en 2022).

Desde la parte dirigencial, este también es un campeonato que reivindica a los directivos que llegaron después de la era ‘Tuca’ Ferretti. Mauricio Culebro asumió la presidencia de Tigres en verano de 2021 en sustitución de Alejandro Rodríguez y Miguel Ángel Garza, quienes acompañaron a Ferretti en la época ganadora de los cinco trofeos entre 2011 y 2019.

Después de contratar a Miguel Herrera, Diego Cocca y darle la oportunidad a ‘Chima’ Ruiz, finalmente el indicado para regresar a Tigres al sendero del triunfo fue Robert Dante Siboldi, un camino que fue difícil pero que enorgullece a Mauricio Culebro por los resultados.

“Tuvimos un torneo muy complicado, nos tocó tomar decisiones, pero siempre estuvimos tranquilos porque sabíamos el grupo de jugadores que teníamos y siempre he dicho que una persona se mide por cómo se repone ante las adversidades. Cuando llegué a este equipo me dijeron que le gusta sufrir y creo que todo el torneo fue así, nunca perdimos la fe y estamos siempre agradecidos de este grupo de grandes personas y profesionales”.

Tigres jugará el Campeón de Campeones de la Liga MX en el verano ante Pachuca (campeón del primer semestre de la temporada 2022-23) y el próximo año será uno de los seis representantes de México con boleto seguro para la Liga de Campeones de la Concacaf, por lo que su legado podría ampliarse.

En el caso de Robert Dante Siboldi, este es su segundo título de Liga MX como entrenador tras haber ganado el Clausura 2018 con Santos y luego de haber dirigido a Cruz Azul, Xolos y Veracruz. Logró 62% de efectividad en 13 partidos con Tigres en dos meses, pero gracias a la estrella de 2023, el presidente felino ya lo ratificó al menos ante los medios: “Claro que ya se ganó la renovación y se merece que lo anunciemos”, dijo Mauricio Culebro desde la celebración en el estadio Akron.