Cambio de Repecos al RIF deja boquete por $30,000 millones

El Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) ha dejado de ingresar al menos 30,000 millones de pesos al erario público, debido a la resistencia de los contribuyentes a continuar tributando en el régimen, además de que desencadenó mayores índices de informalidad en el país, alertó Alejandro Salcedo, presidente de la Asociación Latinoamericana de Micros, Pequeños y Medianos Empresarios (Alampyme).

En el primer bimestre del 2015, al menos 20,000 pequeñas empresas y negocios formales en México quebraron u optaron por trabajar en la informalidad, principalmente por no tener la capacidad económica para cumplir con los requerimientos del RIF , calculó.

El también miembro de la dirigencia colegiada de la Coordinadora Nacional para la Defensa de la Economía Social (Condes), enfatizó que el RIF rompe con el mecanismo de equidad del esquema tributario, y ello provocó que poco más de 20 millones de empresas estén en el limbo sin contribuir con la economía nacional, lo que deja pérdidas al erario.

Además de que, puntualizó, hay resistencia para sumarse al régimen, ya que el costo que destina un pequeño contribuyente para cumplir con sus requerimientos es de 25,000 pesos; a este gasto, calculó, se le debe sumar el pago mensual de un contador o de un software para entregar comprobantes fiscales digitales por Internet.

Es un esquema que los contribuyentes inscritos en el RIF no van a capitalizar, es decir, o compran los insumos para su negocio o invierten capital en tecnología para evitar problemas con el fisco , dijo Salcedo.

Angélica Gómez, vicepresidenta de Relaciones y Difusión del Instituto Mexicano de Contadores Públicos, compartió que al 24 de marzo había 4 millones 359,310 unidades económicas inscritas en el RIF.

De acuerdo con cifras del Servicio de Administración Tributaria (SAT), al cierre del 2014 se tenía un registro de 4 millones 313,144 contribuyentes, lo que demuestra que en el primer trimestre del año sólo se han incorporado 46,166 unidades económicas.

La realidad es que no hay avance de nuevos contribuyentes inscritos en el RIF, esto se debe a que vivimos en un país con terrorismo fiscal, y con ello no se alcanzarán mayores tasas de crecimiento, además de que se desatará mayor descontento social , aseveró Salcedo.

Por su parte, Olga Ávila, académica de la Universidad Panamericana, confirmó que el interés por parte de los pequeños empresarios la principal fuente económica del país es nulo, ya que cumplir con el régimen es complejo.

Hay un nivel de desconfianza alto; además no son atractivos todos los beneficios del programa Crezcamos Juntos; un programa al que el fisco federal le ha invertido mucho dinero sin obtener los resultados deseados , puntualizó.

Los especialistas coinciden en que a pesar de que el gobierno extendió los beneficios del RIF durante el 2015, esto no será suficiente para atraer a un mayor número de contribuyentes a la formalidad; lo que hace pensar que el fisco en algún momento tomará la decisión de salir a cazar a los contribuyentes a las calles , opinó Ávila.

Salcedo insistió en que el gobierno deberá regresar al esquema del pequeño contribuyente (Repeco) con un programa equitativo de recaudación, y con ello generar mayor crecimiento económico y elevar los ingresos del erario.

Hoy, reconoció, existe el temor, por parte de los contribuyentes que no quieren incorporarse al RIF, de que el SAT intensifique sus medidas de fiscalización y ello culmine en multas o sanciones; sin embargo, cuando ello suceda interpondremos un medio de defensa, como el amparo, para defender nuestros derechos , puntualizó.