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Los estadounidenses tomaron a Trump muy literalmente; eso lo puede perjudicar
Estados Unidos vive una ola de optimismo económico tras la victoria de Donald Trump, muestra de ello es el Índice en la Confianza del Consumidor que repuntó este mes, aunque algunos especialistas opinan que algunos estadounidenses pueden llevarse una decepción.
La tarde del martes 27 de diciembre, el presidente electo, Donald Trump, se felicitó por aumentar las expectativas de la población estadounidense. El Índice de Confianza del Consumidor para diciembre aumentó casi cuatro puntos, a 113.7, ¡el nivel más alto en casi 15 años! Gracias Donald escribió en Twitter.
Estaba en lo correcto. El Índice de Confianza del Consumidor, que ha sido utilizado para medir la perspectiva económica durante cinco décadas, registró un repunte después de que Trump ganó la carrera por la Casa Blanca. Eso es porque los estadounidenses anticipan más puestos de trabajo, mayores salarios y un clima de negocios más fuerte.
Lynn Franco, director de la Junta de Indicadores Económicos (Economic Indicators at the Conference Board), un grupo de investigación enfocada en los negocios que está acargo del índice del que habla Trump, dijo que aparentemente la elección desató un aumento en el ánimo. Pero no todo es tan perfecto.
Con la mira puesta en el 2017 , dijo Franco en su declaración, el que los consumidores continúen con ese optimismo depende de si las expectativas se materializan.
Estas expectativas parecen provenir de las promesas de campaña - y son altas. Trump prometió crear 25 millones de nuevos puestos de trabajo y borrar las regulaciones que él dice que obstaculizan los negocios en Estados Unidos.
Vamos a ganar en todos los niveles dijo la primavera pasada. Vamos a ganar económicamente. Vamos a ganar tanto que probablemente se cansen de ganar tanto. Y dirán: por favor, por favor, son demasiadas ganancias, ya no podemos más, señor Presidente.
El índice de confianza del consumidor se publica mensualmente basándose en una encuesta a sobre la opinión de 2,500 estadounidenses sobre la situación económica en ese momento y cuál es su expectativa sobre el futuro de ella. En la encuesta de diciembre, 23.6% de los que contestaron dijeron que ellos pensaban que durante los siguientes seis meses, habría una mejoría de los negocios estadounidenses, a diferencia del 16.4% que pensaba igual en noviembre. Los que esperan que crezca la creación de nuevos empleos saltó del 16.1% al 21 por ciento.
El número de índice - evaluado a 100 en 1985 - se calcula sobre la base de datos de cinco encuestas relacionadas con los sentimientos de los consumidores sobre los empleos, los salarios y las oportunidades económicas. Un aumento de la confianza entre los estadounidenses mayores distorsionó los números este mes, según muestran los datos. Aquellos mayores de 55 años se sentían cada vez mejor sobre el destino de la nación, aumentando de 79 esta vez el año pasado a 105.5. El optimismo entre los menores de 35 años, que suelen proyectar vistas más soleadas, cayó ligeramente durante ese tiempo, de 120.6 a 118.9.
Matt Dallek, un historiador político y profesor de la Universidad George Washington dijo que el mensaje de Trump emocionó a los votantes, pero podrían verse decepcionados. Lo tomaron literalmente , dijo Dallek. El tamaño de sus promesas y lo alejadas que están de los que realmente se puede lograr son peligros reales para él, políticamente hablando.
Trump estuvo viajando por todo el país durante un año, visitando economías locales que se desmoronan y les dijo a los que lo apoyan que él les traería de regreso sus trabajos, dijo Dallek. Y pese a que la creación de empleos en Estados Unidos han ido al alza, los empleos en las fábricas y la manufactura en general han disminuido por décadas. Los economistas explican que estas pérdidas tienen más que ver con el desarrollo de tecnología que con impuestos o las políticas de comercio.
Jon Nordstrom, un electricista jubilado y empleado del gobierno en Marion, Indiana, donde dos tercios de la gente respaldó a Trump (incluyendo Nordstrom), quiere que el presidente electo siga adelante con la reducción de los impuestos del país - una medida que cree que impulsaría la economía. Pero no se dejó impresionar por la promesa de Trump de detener la fuga de 800 puestos de trabajo en la planta de Carrier en Indianápolis para trasladarse a México. (Trump se había comprometido a salvar 1,100).
Muchas de estas personas van a perder su trabajo, dijo Nordstrom, de 71 años. ¿Dónde van a encontrar trabajo otra vez con ese nivel de sueldo?
El simpatizante de Trump, Ted Bergman, de 63 años, propietario de Bergman Tool & Machine en el condado de Mercer, Ohio, dijo que espera que su negocio mejore en la economía de Trump. El año pasado perdió algo de trabajo en favor de China y tuvo que despedir a un empleado.
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