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Monti adopta plan anticrisis en Italia
El premier Mario Monti anunció que las medidas incluyen recortes al presupuesto e instrumentos para combatir la evasión fiscal; serán presentadas al Parlamento para su aprobación.
El gobierno de Mario Monti adoptó ayer un draconiano plan anticrisis de 24,000 millones de euros con el fin de intentar proteger a Italia de la crisis de la deuda.
El plan prevé recortes en el gasto público, un aumento de los impuestos, en particular sobre la propiedad inmobiliaria, y una reforma de las jubilaciones, que los sindicatos rechazan, indicaron las fuentes.
Las medidas, que Monti comenzó a detallar en una conferencia de prensa, apuntan a que Italia logre el equilibrio presupuestario en el 2013.
Las medidas previstas son socialmente insoportables y un golpe muy duro para los jubilados , denunció Susanna Camusso, secretaria general de la Confederación General Italiana de Trabajadores (CGIL), principal sindicato italiano.
El jefe del gobierno italiano, Mario Monti, prometió poner bajo control estricto el déficit y la deuda de Italia.
No debemos ser percibidos en Europa como un foco de crisis , declaró Monti al destacar ser partidario de una Italia orgullosa de la cual la gente dejará de burlarse como lo hizo en el pasado .
Hoy se reúne con el Parlamento
El Primer Ministro se reunió con partidos políticos, sindicatos, grupos empresariales y grupos defensores de los consumidores sobre sus planes.
Tiene programado informar sobre las medidas a ambas cámaras del Parlamento este lunes.
Prometió que el plan que implementara será socialmente equitativo y que se enfocará en quienes no han pagado su parte de los impuestos.
Las partes que se reunieron con Monti han dicho que el paquete incluye probablemente el restablecimiento de un impopular impuesto a la propiedad de vivienda, abolido por Berlusconi.
Además, elevar en unos puntos porcentuales el impuesto a la venta y el impuesto sobre la renta a quienes tienen los ingresos más altos en aquella nación.
También buscaría que los italianos trabajen más de los 40 años necesarios actualmente para recibir una pensión, algo similar a lo impuesto en España.
Emma Marcegaglia, directora del grupo de presión de los industriales italianos Confindustria, dijo que la supervivencia del euro depende de que Italia apruebe medidas muy fuertes de austeridad y crecimiento.
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