Plan de Sheinbaum para simplificar al SAT será insuficiente para evitar una reforma fiscal

Claudia Sheinbaum, candidata presidencial de Morena, Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM), propuso una digitalización y simplificación en materia tributaria para obtener mayores ingresos públicos y de esta manera evitar una reforma fiscal durante su gobierno en caso de ganar las elecciones del próximo 2 de junio.

Sin embargo, si bien especialistas en la materia aseguran que es positiva la propuesta de digitalización y simplificación, dudan que sea suficiente para evitar una reforma fiscal en el siguiente sexenio, pues las finanzas del país cada vez están más presionadas y los niveles de recaudación de impuestos en México es de los más bajos en el mundo.

En los Pre-Criterios Generales de Política Económica 2025, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público estimó que el déficit público (medido a través de los Requerimientos Financieros del Sector Público) será de 5.9% en 2024 y para el 2025 se plantea que éste se reduzca a la mitad, lo que implicaría una reducción importante en el gasto público durante el primer año del siguiente sexenio.

José Luis Clavellina, director de investigación del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), aseguró que Sheinbaum ha propuesto una serie de proyectos como construir vivienda y trenes de pasajeros, además de incrementar el gasto en programas sociales.

No obstante, dijo, no queda claro si todas esas propuestas podrán ser financiadas con los ingresos adicionales que se obtengan por la automatización y simplificación, pues ya de por sí el próximo año habrá un recorte importante en el gasto público en inversión para reducir el déficit como lo planteó Hacienda.

Esta parte de digitalización y simplificación es buena idea, sí se puede aumentar la recaudación con estas medidas como lo han demostrado estudios a nivel internacional (....) pero no sé si será suficiente y en caso de que no, será necesario impulsar la reforma fiscal”, afirmó.

Puntualizó que una reforma fiscal no sólo es necesaria sino que en algún punto del próximo sexenio será inevitable, esto por las necesidades de gasto cada vez mayores en rubros como Petróleos Mexicanos (Pemex), las pensiones, el pago de la deuda, entre otros.

“A lo mejor no será una reforma fiscal como la que todos esperamos, es decir, implementar una serie de cambios al mismo tiempo, pero sí habrá cambios poco a poco porque es necesario fortalecer los ingresos públicos”, detalló.

Por su parte, Roberto Colín, integrante de la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, explicó que si bien es entendible que la candidata no quiera arriesgarse a decir que aumentará impuestos en plena campaña electoral, es innegable que “sí es necesaria una reforma fiscal”.

“El país tiene un tema de déficit y en el gremio (de contadores) esperábamos una reforma fiscal si no en 2025 sí en 2026 por la necesidad de recursos que hay para cubrir ese déficit”, declaró Roberto Colín.

Coincidió en que invertir en tecnología para digitalizar y simplificar al Servicio de Administración Tributaria (SAT) sí aumentará la recaudación de impuestos, pero no queda claro para cuánto va a alcanzar, además de que esa estrategia no es nueva y ya se realiza desde este sexenio.

“La corriente que planteó Sheinbaum es la que ya se trae desde este sexenio. Hay que recordar que el SAT, en su Plan Maestro 2024, ya planteaba fortalecer la fiscalización con modelos de Inteligencia Artificial (IA)”, comentó el integrante del Colegio.

Roberto Colín señaló que entre las áreas que se podrían digitalizar y simplificar en el siguiente sexenio están la de comercio exterior, pues actualmente en las aduanas hay un rezago importante en la tecnología que se utiliza y que ralentiza los procesos de importación y exportación de bienes.

Igualmente indicó que hay potencial para hacer más eficientes algunos trámites como la emisión de la e.firma, o bien para usar la tecnología con el fin de hacer una revisión más eficiente a los saldos a favor del IVA o bien para detectar conductas sospechosas en actividades vulnerables.

En el 2022, los ingresos tributarios (por la recaudación de impuestos) en México representaron el 16.9% del PIB nacional, con lo que fue el país que menos impuestos recaudó en términos relativos de los 34 que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).