Producción, productividad e inflación

Una de las películas que más impacto a mi generación en la década de los 70’s, fue “Cuando el destino nos alcance” (Soylent Green en Inglés) protagonizada por Charlton Heston y Edward G. Robinson. Para los adolescentes en aquel entonces fue un hito en nuestra formación, ya que nos presentaba un mundo en el futuro (año 2022) en donde la población y las necesidades de consumo habían llegado a superar la posibilidad de producción de alimentos y otros productos de aquel entonces, teniendo la necesidad de llevar el reciclaje al extremo, incluyendo a los seres humanos. Los productos naturales eran lujo de los super ricos.

La película en sí es de estilo apocalíptico, llevando las condiciones humanas al extremo; sin embargo, no podemos dejar de considerar las lecciones que nos daba en aquel momento, el agotamiento de los recursos, el calentamiento global, y la baja producción de alimentos causada por dichas situaciones llevando a una pobre distribución de la riqueza y el sacrificio de las personas en busca del “bien común”.

El mundo actual no tiene todavía esas características. La producción mundial de alimentos es, cuando menos en papel, suficiente para alimentar a toda la población del mundo.

Las proyecciones de producción mundial de cereales hechas por el departamento de agricultura de Estados Unidos para el ciclo agrícola 2021 – 2022 es que se producirán 1,123 millones de toneladas de maíz, 778.5 millones de toneladas de trigo, 146 millones de toneladas de cebada, 514 millones de toneladas de arroz, 353.8 millones de toneladas de soja (soya), 71.1 millones de toneladas de canola, 65.6 millones de toneladas de sorgo, y así sigue la lista.

Todos los productos mencionados presentan incrementos de producción respecto del año anterior; sin embargo, en el caso del trigo, Rusia es el 4º productor mundial y Ucrania es el 7º productor mundial, en el caso de la cebada Rusia es el 2º y Ucrania es el 4º productor mundial. Si nos vamos al petróleo, Rusia es el 2º productor mundial.

Todos estos datos, nos muestran el impacto que la guerra tiene entre estos dos países y que van a tener en precios de dichos productos, así como en otros donde son productores relevantes. Esperemos que el conflicto se resuelva pronto por que de otra manera van a tener un impacto muy importante en la inflación mundial.

El administrador de cualquier tipo de entidad tendrá que contemplar ese impacto en sus proyecciones de tal manera que existan acciones para minimizarlo y asegurar que tanto la entidad, sus socios comerciales, sus empleados y sus clientes y en general los consumidores de sus bienes o servicios, resientan esos impactos lo menos posible. Desde un punto de vista meramente capitalista, ¿cual puede ser la utilidad de subir los precios de sus productos, si corre el riesgo de quedarse sin clientes, o proveedores?

La planeación deberá considerar la forma en que pueda asegurar un suministro a un precio razonable, una eficiencia en la operación que pueda asimilar parte del impacto en el incremento de costos y un incremento moderado en los precios que logre que el mercado lo pueda absorber sin afectar en demasía la capacidad de adquisición.