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Aquejan a IP robo y extorsión tras reapertura por Covid-19

En Jalisco se han abierto, de enero a agosto pasado, 230 carpetas de investigación por robo a transportistas, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Además de las afectaciones económicas provocadas por el cierre de los negocios derivado de la pandemia de Covid-19, tras la reapertura de comercios en las entidades se ha agudizado la práctica de delitos contra el sector empresarial como la extorsión y el robo, señalaron líderes del gremio de la CDMX, el Edomex y Jalisco.

“Debido a la pandemia, muchos delitos migraron (...) aumentó mucho el delito de extorsión y creemos que es debido a esto y además surgieron nuevas modalidades. Creemos que se incrementó hasta un 60%”, dijo Armando Zúñiga Salinas, presidente de la Coparmex en la CDMX.

Entre las formas de extorsión se presentan modalidades vía redes sociales también.

El líder empresarial resaltó que en el caso de la capital, la extorsión común, la que se manifestaba a través de llamadas telefónicas desde los reclusorios, ya no es tan frecuente ya que, dijo, la delincuencia organizada se ha involucrado y el cobro de piso ha afectado más a los empresarios, incluso en las cadenas de logística.

“El pequeño comercio es el que más ha estado sufriendo la parte de cobro de derecho de piso (...) Cada vez se involucra más la delincuencia organizada, y hemos visto cómo cada vez va generando más violencia”, comentó.

Y añadió que “cuando se denuncian los delitos en las fiscalías, pues es complicado, porque no está actualizada la legislación y sufren mucho los MP para poder integrar una buena averiguación que pueda resultar en una buena impartición de justicia”. 

Sector restaurantero

Zúñiga Salinas destacó que suele ser el sector restaurantero el más afectado por la extorsión. En dicho ramo, dijo, hay una nueva modalidad en donde se les pide dinero a los empleados bajo el argumento de que el dueño supuestamente tuvo un accidente y necesita que se abran las cajas de seguridad.

Sobre la presencia de cárteles del crimen en este ilícito en la capital, el líder empresarial señaló que aunque muchas veces en las llamadas de extorsión se hace referencia a grupos criminales, en realidad en gran cantidad de ocasiones sólo se usa el nombre de estos grupos para intimidar.

Sin embargo, dijo, en algunos otros casos sí son directamente los cárteles quienes extorsionan, “pero por desgracia no hay un dato que señale el verdadero involucramiento de los cárteles en este delito”. 

Zúñiga Salinas relató que las afectaciones que se han presentado los empresarios víctimas de este delito, va desde las económicas, psicológicas o incluso el cierre de los negocios.

Por su parte, Yeri Correa Espinosa, presidenta de la Comisión de Seguridad y Justicia del Centro Empresarial Metropolitano del Estado de México, coincidió en que este delito se ha incrementado derivado a la pandemia, ya que la delincuencia busca fuentes alternativas de ingreso.

Explicó que, según datos del Observatorio Nacional Ciudadano, durante el primer semestre de este año se contabilizan 8.67 carpetas de investigación por cada 100,000 mexiquenses, un incremento de 13.19% respecto al mismo periodo de 2020.

Correa Espinosa indicó que entre las diversas modalidades de extorsión es el cobro de derecho de piso, llamadas telefónicas y la presencia de supuestos integrantes de organizaciones criminales, las que más se presentan en la entidad contra los empresarios.

Añadió que en el caso del Edomex, debido a que se tiene comunicación con diferentes autoridades es que se ha permitido tener una mejor manera de enfrentar este delito, ya que los empresarios han recibido cursos de prevención para conocer las nuevas modalidades.

Aunque, dijo, al ser una entidad con una gran población y su ubicación geográfica, la influencia de los grupos criminales es importante.

En el corredor industrial, las empresas que más han sufrido este delito son los restaurantes y el transporte (…) ante la pandemia se vuelven muy atractivos para las organizaciones delictivas”, dijo.

En tanto, también reconoció que el reto es impulsar la denuncia entre los afectados, ello al calcularse que hasta el 93% de estos ilícitos no se denuncian. 

Situación en Jalisco

Por otro lado, Carlos Villaseñor Franco, líder de la Coparmex en Jalisco, destacó que el delito de extorsión está en cuarto lugar de afectación a empresarios, con los robos a negocios como el que más se comente contra la IP de la entidad.

Mientras que el robo a transporte, también entre los primeros delitos, puede considerarse el de mayor impacto a los empresarios, debido a que pierden contratos por no poder suministrar y cumplir con los compromisos.

En cuanto a robo de transportista, en Jalisco se han registrado 230 carpetas de investigación por dicho delito entre enero y agosto de 2021, un alza de 21.6% en comparación con el mismo periodo del 2019 (189), de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Mientras que se se comparan las cifras de enero a agosto de este 2021 con el 2020 (272) hay una baja de 15.4 por ciento. 

Villaseñor Franco detalló que se estima que 55% de los empresarios de la entidad ha sufrido algún tipo de delito contra su patrimonio.

Aunado a que 150,000 del millón de unidades económicas que existen, con cifras al 2020, han implementado alguna medida de protección por inseguridad, con un impacto económico de 4,000 millones de pesos al año, en gastos para guardias, seguros, cámaras, escoltas para sus mercancías, entre otros.

“Son muchos delitos los que enfrentan las empresas, por ello es necesario que exista una mayor coordinación”, destacó.

maritza.perez@eleconomista.mx

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