Lectura 2:00 min
Arranca segundo semestre del 2021 con el fantasma de la inflación: ANPEC
El alza energética es el principal factor que ha detonado la espiral inflacionaria en el país, ya que en el último año las gasolinas han aumentado el 22%; gas LP 30%; la energía eléctrica 12%, factores que impactan los costos de producción y suministro, declaró Cuauhtémoc Rivera, presidente de la ANPEC.
El segundo semestre del 2021 estará marcado por alzas en los precios de la canasta básica y bienes de primera necesidad de los mexicanos, originados por el repunte de los costos de los energéticos de los últimos meses, que mantendrán debilitado el poder adquisitivo de los consumidores con el “fantasma de la inflación” hasta finales del siguiente año, anticiparon pequeños comerciantes.
El alza energética es el principal factor que ha detonado la espiral inflacionaria en el país, ya que en el último año las gasolinas han aumentado el 22%; gas LP 30%; la energía eléctrica 12%, factores que impactan los costos de producción y suministro, declaró Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
“La inflación revisada por Inegi para la primera quincena de junio de 6.02% (inflación subyacente) y 10.61% de la inflación no subyacente (servicios y alimentos) confirma los sondeos de mercado que mes a mes realizan los comerciantes para establecer la variación de precios en los productos de la canasta básica”, comentó.
Esto confirma la sensación térmica de mercado que ANPEC ha venido reportando, al prever que cerraremos el 2021 con una mayor inflación sin visos de poder controlarla. “Lamentablemente todo indica que los precios de los alimentos y servicios seguirán subiendo, abatiendo el consumo privado de los consumidores mexicanos, afectando aún más la ya vilipendiada economía familiar”, alertó Rivera.
Para el presidente de la ANPEC, “lo más dramático de este escenario es el pronóstico que anunciara Inegi al sentenciar que será hasta el tercer trimestre del 2022 cuando ‘tal vez’ podríamos volver a una tasa de inflación de 3%, originalmente prevista previo a la pandemia”.
Los pequeños comerciantes mencionaron que el elevado costo energético, prohibiciones comerciales, restricciones y factores climáticos, sumado a la demanda de alimentos, producto de la actual pandemia, es “el coctel perfecto” para recibir el segundo semestre del año con notables alzas de precios que continúan debilitando el poder adquisitivo de las familias mexicanas.