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CNA ve mayor peso del sector alimentario en el PIB en el 2040
El organismo presentó su “Visión de Futuro” en el que se prevé un crecimiento 12% superior si se realizan intervenciones de política pública favoreciendo la sustentabilidad y la derrama económica entre los trabajadores del sector.
Foto: Cuartoscuro
Alimentos para el futuro. Competitivos, sostenibles, adaptables, respetuosos con el ambiente y producidos con eficiencia, pero también con justicia distributiva. Así los visualiza el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) —como la norma— hacia el 2040.
No solo eso, el CNA también prevé que, lejos de achicar su peso —como ha sucedido en el mundo en las últimas décadas— el sector agroalimentario (agropecuario más agroindustria) elevará su aporte al Producto Interno Bruto (PIB) de México para ese año.
En el 2023, su cuota fue de 8.7% del PIB, pero llegaría a 9.2% en el 2040, aun si no se registra ninguna intervención de política pública para potenciar al sector. Ese es tan solo el escenario base del que parte el CNA en su “Visión de Futuro”, documento prospectivo que presentó este martes y que plantea una hoja de ruta para el sector.
Con la finalidad de evaluar los retos y oportunidades que ha tenido el sector agroalimentario en los últimos años e identificar las problemáticas transversales o estructurales que se han agudizado, el CNA diseñó un modelo metodológico de análisis multidimensional en cuatro vertientes: económica y productiva, institucional, social y de sostenibilidad y desarrollo tecnológico.
Y con esa base elaboró un conjunto de propuestas que agrupó en esas vetas. En el aspecto productivo, enfatizó la necesidad de integrar cadenas de valor y desarrollar infraestructura, además de fortalecer la inocuidad y sanidad alimentarias.
Fortalecer la estructura financiera y de seguros especializados, además de promover el desarrollo científico, la generación de datos y el uso de tecnologías, cierran la pinza.
En al ámbito social, pugna por la profesionalización y desarrollo de condiciones laborales, por el reconocimiento del papel activo de las mujeres y por la integración de jóvenes, pero también por la erradicación del trabajo infantil. Asimismo, destaca la importancia de reducir la migración de trabajadores y darles acceso a la tierra.
En cuanto a la esfera de sostenibilidad, se pone acento en la necesidad de un uso eficiente de los recursos hídricos, de una oferta diferenciada en políticas de acción climática y en la transferencia e innovación de tecnologías sostenibles.
En el aspecto institucional propone fortalecer las instituciones que garanticen que la visión futura se materialice, para lo cual resulta crucial contar con programas presupuestarios continuos, otorgar certeza jurídica a las inversiones y diferenciar las políticas por tamaño de productor y de cultivo.
Las previsiones
El CNA planteó que aun sin ningún tipo de intervención habría un crecimiento continuo en todos los sectores, proyectando para 2040 que el sector agroalimentario genere el equivalente al 9.18% del PIB, mientras que el sector secundario y el terciario aportarán el 19.54% y 71.28 por ciento. Pero un trabajo articulado entre los sectores público, privado y social debería impulsar la producción sectorial y “exceder estas expectativas”.
“Evaluando al sector agroalimentario en su conjunto, las proyecciones muestran una producción total de 2,048,426 millones de pesos (mdp) en 2040 sin intervenciones. Con la implementación de las políticas propuestas, se esperaría alcanzar un nivel de 2,287,507 mdp, un 12% adicional y 49% mayor que los 1,537,463 mdp actuales de 2023”, estimó el CNA.
