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No se generará una bolsa adicional en el Ramo 23
El aumento que se estima en el 2020 derivaría de un posible incremento en el subsidio de suministro de electricidad.
El mayor presupuesto que tendrá el Ramo 23 de Provisiones Salariales y Económicas en el 2020 se deberá por un incremento en el subsidio del servicio de electricidad y no porque se estén creando fondos nuevos, aseguró Fernando Arechederra Mustre, jefe de la Unidad de Coordinación con Entidades Federativas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
“El aumento no es porque se esté generando alguna bolsa adicional o fondo en el Ramo 23, sino porque aumenta el monto que se está estimando en el subsidio de suministro de electricidad. Se están considerando montos reales de los subsidios que son alrededor de 20,000 millones de pesos, por eso se ve tan grande el aumento”, dijo en entrevista con El Economista.
De acuerdo con datos del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, para el próximo año, se prevé que el Ramo 23 tenga recursos asignados por 131,300 millones de pesos, lo que significaría un incremento de 12.2%, en términos reales y en relación con el presupuesto que se le aprobó en el 2019.
Otra razón por la que se incrementa el presupuesto del Ramo 23 tiene que ver con que se esperan obtener mayores recursos del fondo para entidades federativas y municipios productores de hidrocarburos, el cual presentaría recursos por 6,850.3 millones de pesos, un aumento de 46.9%, respecto al presupuesto que se le aprobó para este año, explicó el funcionario.
Mencionó que de los recursos del Ramo 23, no todos son para gasto federalizado (transferencias a estados y municipios) y que el origen y función de este rubro es para lograr un equilibrio y balance presupuestario a lo largo del año fiscal.
A su parecer, uno de los problemas que se generaron en este apartado es que, en los últimos años, los presupuestos de estados y municipios los empezaron a planear con base en los subsidios que percibirían del Ramo 23, “lo cual no es correcto, pues una planeación financiera de mediano y largo plazo no puede estar basada en subsidios.
“Es un esquema que se fue pervirtiendo, nuestro mensaje es otro: los recursos que tenemos y que se van a distribuir son los que tengan certeza jurídica”, manifestó.
Por ello, insistió que el mensaje del presupuesto de los años 2019 y 2020 es la certeza jurídica. “Esto retoma el origen del sistema de coordinación fiscal, que busca armonizar los sistemas tributarios y fortalecer las haciendas públicas y para ello es fundamental que tu planeación presupuestaria esté en función de aquellos recursos que tienen certeza jurídica”.
Hay reglas de operación
Sobre si el Ramo 23 debería contar con un marco jurídico como el que se tiene en los ramos 28 y 33, el funcionario respondió: “El Ramo 23 tiene su fundamento jurídico en la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, está normado desde el 2006, los fondos que eventualmente se generan tienen reglas, como el Fondo Metropolitano, que tiene un consejo y reglas al igual que el Fondo Regional y el Fondo para Entidades Federativas y Municipios Productores de Hidrocarburos”.
Recordó que en el Ramo 23 también se tienen los recursos para prevenir y hacer frente a los desastres naturales.
Por un lado, se proyecta que el Fondo de Desastres Naturales registre un presupuesto en el próximo ejercicio fiscal por 3,800 millones de pesos (incremento anual de 0.7%), mientras el Fondo de Prevención de Desastres Naturales contaría con recursos por 200 millones de pesos (aumento de 6.7 por ciento).
Para el Fondo Regional, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación estima 1,869 millones de pesos, al Metropolitano 3,300 millones y al de Accesibilidad en el Transporte Público para las Personas con Discapacidad, 400 millones. Dichos fondos tendrán una reducción real de 3.5%, cada uno, respecto al presupuesto que se les aprobó en el 2019.
