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Urgen regulación efectiva de taxis en Quintana Roo

El costo por un traslado al Aeropuerto Internacional de Cancún llega hasta 1,200 pesos para turistas extranjeros.

Foto: Archivo EE

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Cancún, QR. El servicio de taxis en Quintana Roo se ha desarrollado durante décadas bajo un esquema de sindicatos que han monopolizado este sector en prácticamente todos los rincones del estado, incluidas las principales ciudades turísticas como Cancún.

El más fuerte, por número de operadores y unidades, es el de Cancún, llamado Sindicato Andrés Quintana Roo, con alrededor de 12,000 autos en operación, seguido de Playa del Carmen con el gremio Lázaro Cárdenas del Río con al menos 7,000 vehículos. En todo el estado son 14 los sindicatos que monopolizan el servicio de taxi.

Además de malas condiciones en la prestación del servicio, los cobros excesivos es otra de las principales quejas de los usuarios. Con la eventual entrada de Uber a Quintana Roo, tras el amparo concedido el pasado 11 de enero a la trasnacional que le permite operar sin una concesión en el estado, los contrastes en los cobros de uno y otro esquema de transportación se hacen evidentes.

Aunque en el papel existe un tarifario que expide el Instituto de Movilidad. El costo por un traslado al Aeropuerto Internacional de Cancún es de 329 pesos, contra los 375 que cobra Uber, pero en los hechos los taxis cobran entre 500 y 700 pesos a residentes locales y hasta 1,200 pesos a turistas extranjeros.

Se suma que en el 2019 se autorizó el último incremento tarifario para los 14 sindicatos que operan en Quintana Roo. En Cancún, según el Periódico Oficial de Quintana Roo, la tarifa mínima pasó de 35 a 37 pesos, pues en la entidad no existe el sistema de taxímetros, por lo que el operador determina si cobra la tarifa mínima o un poco más si considera que la distancia recorrida lo amerita.

Sin embargo, los usuarios reclaman que nunca se aplican los cobros mínimos, aunque el recorrido sea corto; actualmente el costo del servicio arranca en 50 pesos y puede dispararse hasta 200 pesos si destino es por las colonias populares más alejadas del centro de la ciudad.

Ante ello, el Observatorio Legislativo de Quintana Roo considera necesario adecuar Ley de Movilidad, que incluya temas de entrada legal de Uber, regular a los mototaxis, así como supervisar de manera más precisa las concesiones en los servicios de transporte en general.

Detalla que los taxis han operado durante décadas con gran permisividad, más allá de cualquier regulación, llegando a tomar la ley por mano propia, persiguiendo a los conductores de Uber y obligándolos a bajar a sus pasajeros.

Eduardo Galaviz Ibarra, presidente del organismo, dijo que el auge que ha cobrado el tema del transporte por el reciente amparo concedido a Uber es la oportunidad para retomar la adecuación a la normatividad general, lo cual, por muchos años, agregó, se ha quedado pendiente, a pesar de la gran actividad en materia de movilidad que hay en la entidad con el transporte de pasajeros, urbano, de carga y particulares, entre otros.

Amparo

Galaviz Ibarra recordó que el amparo otorgado a Uber exime a la empresa Uber de una concesión de transporte público, como lo establece la Ley de Movilidad, pero no de ser regulado, lo cual obligará a las autoridades estatales a aplicar reformas al reglamento para el control de este servicio brindado por plataforma digital.

En ese sentido, pidió arreglar la reforma de movilidad para evitar conflictos entre conductores de Uber y taxistas en la ciudad.

estados@eleconomista.mx

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