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Piñera exclama un “ya basta” por las protestas
A más de 40 días de manifestaciones, saqueos e incendios, que han dejado un saldo de al menos 23 muertos, el presidente de Chile manifestó su rechazo a la ola de violencia registrada durante las manifestaciones en diversas regiones del país.
Santiago. A más de 40 días de manifestaciones, saqueos e incendios, que han dejado un saldo de al menos 23 muertos y miles de heridos, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, manifestó su rechazo a la ola de violencia registrada durante las manifestaciones en diversas regiones del país.
Llegó el momento de decir basta, el gobierno está haciendo su trabajo”, expresó.
“La violencia está causando un daño que puede ser irreparable”, agregó el mandatario, en un mensaje en el palacio de gobierno de la Moneda, en el que apuró al Congreso a aprobar un proyecto de leyes que incluyen aumentar las sanciones para quienes provoquen desórdenes públicos y anunció que, a partir del lunes, 2,500 nuevos policías se integrarán a las labores de control.
Policía chilena, en la mira
Por su parte, la policía chilena enfrenta los desafíos de contener los niveles de violencia social que no cesan, así como responder a denuncias por violaciones a los derechos humanos.
Carabineros de Chile, policía militarizada, enfrenta denuncias por atropellos a los derechos humanos en el control de las protestas y la detención de los manifestantes, sumadas a cuestionamientos por su ineficacia a la hora de enfrentar asaltos al comercio o proteger la propiedad privada en el peor estallido social de los últimos 30 años en Chile.
Cerca de 300 personas han sufrido graves lesiones oculares producto de balines y perdigones disparados por la policía, hecho que ha sido criticado por distintas organizaciones humanitarias.
En un intento por controlar la situación de desorden el presidente Sebastián Piñera presentó un proyecto para que los militares resguarden infraestructura crítica e informó el pasado domingo que pidió ayuda técnica a policías de Inglaterra, Francia y España.
Francia negó dar asesoramiento. Mientras que España aclaró que hasta el momento “no hay una decisión tomada” en temas de colaboración.