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China aprueba más cultivos transgénicos para aumentar rendimientos y garantizar seguridad alimentaria
Las variedades aprobadas incluyen semillas del grupo de piensos Dabeinong, con sede en Pekín, y de China National Seed Group, filial del productor de semillas y pesticidas Syngenta Group.
China aprobó cinco variedades de cultivos editados genéticamente y 12 tipos de soja, maíz y algodón modificados genéticamente, ampliando las autorizaciones para impulsar los cultivos de alto rendimiento, reducir la dependencia de las importaciones y garantizar la seguridad alimentaria.
El Ministerio de Agricultura y Asuntos Rurales concedió certificados de seguridad a las 17 variedades de cultivos, según un documento publicado el martes en su página web. Los cultivos editados genéticamente que fueron aprobados incluyen dos variedades de soja y una de trigo, maíz y arroz.
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Las variedades aprobadas incluyen semillas del grupo de piensos Dabeinong, con sede en Pekín, y de China National Seed Group, filial del productor de semillas y pesticidas Syngenta Group.
A diferencia de la modificación genética, que consiste en insertar genes extraños en una planta, la edición genética altera los genes existentes para potenciar o mejorar las características de la planta. Algunos científicos consideran la edición genética menos arriesgada que la modificación genética.
China también ha autorizado la importación de una variedad de soja modificada genéticamente resistente a los insectos y tolerante a los herbicidas de la empresa química alemana BASF, exclusivamente como material de procesamiento, añadió el Ministerio.
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En el último año, el país ha aumentado las autorizaciones de semillas de maíz y soja transgénicos de mayor rendimiento para aumentar la producción nacional y reducir las importaciones de grano.
China importa sobre todo cultivos modificados genéticamente, como el maíz y la soja, para la alimentación animal, mientras que cultiva variedades no modificadas genéticamente para el consumo alimentario. Muchos consumidores chinos siguen preocupados por la seguridad de los cultivos alimentarios modificados genéticamente.
Los certificados de seguridad de las variedades recién aprobadas son válidos durante cinco años, a partir del 25 de diciembre, según el documento del ministerio.