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Sequía reduce inventarios de granos y eleva los precios

Los futuros del maíz han subido más de 50% en los últimos dos meses; alertan riesgo de inflación en países consumidores.

El próximo viernes, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por su sigla en inglés) dará a conocer su reporte mensual en el que se espera se confirme que la peor sequía desde 1988 ha devastado los campos de maíz.

Lo anterior mantendrá a los inventarios en niveles bajos por tercer año consecutivo y las reservas globales caerían a su nivel más bajo en cuatro años.

Se estima que el gobierno estadounidense recortará otro 15% su pronóstico de la cosecha de maíz para este año, afectada por la peor sequía, con lo cual los precios se mantendrán elevados, aumentando la preocupación en naciones como China, que está tratando de reducir su inflación.

Se prevé que la cosecha de maíz estadounidense sea la más pequeña en cinco años, lo que llevaría a los inventarios finales a 660 millones de bushels para el ciclo 2012/2013, los niveles más bajos en 17 años y casi la mitad de lo previsto por el gobierno en julio, cuando la recortó en 12 por ciento.

Asimismo, se espera que recorte su estimado para la producción de soya en 8%, lo que pondría a los inventarios domésticos en su nivel más bajo en 32 años, desde que hay registro, a 112 millones de bushels.

Ante la sequía, los futuros del maíz han subido en más de 50% en los últimos dos meses y tocaron niveles por arriba de los 8 dólares por bushel, cotizaciones nunca antes vistas.

SOYA Y TRIGO, PRESIONADOS

Mientras que la soya subió casi 30% desde mediados de junio, aunque los precios se mantienen 9% por debajo del récord de 17.77 dólares por bushel, alcanzado a mediados de julio.

En este contexto, China ha pedido a los productores que eviten aumentar los precios de los aceites comestibles a menos que sea absolutamente necesario , aunque no impuso un control sobre los precios, indicó Wilmar International Ltd., el mayor productor mundial de aceite de palma.

La última vez que China puso un techo a los precios de los aceites comestibles fue en el 2010, a raíz de una creciente inflación.

Los productores no tienen planes de aumentar sus precios de aceite de soya en el corto plazo, pues los precios del mercado han caído 3% esta semana debido a la baja de los precios del aceite de palma, sustituto clave del aceite de soya.

Una fuerte cosecha de colza canadiense, una oleaginosa que compite con la soya, absorbería parte de la demanda global.

Los problemas amenazan con multiplicarse, pues una sequía en el este de Europa limita las perspectivas de la cosecha de trigo en los principales países exportadores de granos, incluyendo a Rusia y Kazajistán.

Goldman Sachs prevé que la producción mundial de trigo, excluyendo a China e India, caiga por debajo de la estimación actual del USDA de 665 millones de toneladas en el ciclo 2012/2013 a su nivel más bajo desde 2007/2008.

Un nuevo deterioro en las condiciones climáticas, posibles restricciones de exportación de la FSU (exestados de la Unión Soviética) y una demanda contenida crean riesgos de que los inventarios de trigo disminuyan aún más de lo esperado , indicó Goldman en una nota a sus clientes.

Un monzón en India por debajo del promedio provocó que la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura recortara su pronóstico para el 2012 de la producción de arroz en 7.8 millones de toneladas a 724.5 millones de toneladas.

Una combinación de bajos cultivos de arroz y trigo y problemas de producción para el maíz y la soya llevó a una crisis alimenticia en el 2008 que provocó disturbios en casi 30 países.

Los precios de los huevos y de las aves de corral subirán seguidos por la leche, el cerdo y la carne vacuna , dijo Scott Irwin, profesor de economía agrícola de la Universidad de Illinois en Urbana-Champaign.

Los analistas dijeron que los precios del cerdo y de la carne vacuna podrían caer en el corto plazo, dado que los rancheros y agricultores sacrifican su ganado y rebaños de cerdos debido a los altos costos de alimentación; sin embargo, el próximo año, los consumidores podrían sentir el efecto cuando suban los precios de la carne como resultado de una menor cantidad de ganado y cerdos.

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