Coworking, negocio disruptor

México está en el foco de atención de un negocio disruptor: las oficinas flexibles o coworking.

Las empresas que operan en México han penetrado sólo 5% del mercado, lo que implica una enorme potencialidad.

De acuerdo con un informe de Everest Group, 68% de las grandes empresas considera que en el 2021 sus empleados no estarán sujetos a una oficina.

Las cifras de las firmas inmobiliarias de oficinas coinciden en el notable y acelerado crecimiento del negocio del coworking.

La Ciudad de México está incluida en el top ten de las ciudades con más espacio de trabajo colaborativo del mundo.

La competencia es feroz entre compañías como IOS Offices, WeWork, IZA Business Centers, Público y Terminal 1, entre otras muchas más. Según cifras gubernamentales existen más de 70 espacios de coworking en la ciudad de México, Guadalajara y Monterrey. En ese contexto llega a México la cadena de coworking más grande de Latinoamérica: Comunal Coworking, una empresa de origen peruano que está iniciando con una inversión de 2 millones de dólares la apertura de su primera sede internacional en la Ciudad de México, por ser considerada la oportunidad más grande en la región.

Viene respaldada por los fondos, de riesgo y tradicionales, latinoamericanos y estadunidenses más importantes y por el poderoso grupo peruano Wiese dedicado a inversiones en actividades inmobiliarias, mineras, de banca, hoteleras, pesqueras, y por la red internacional de emprendedores Endeavor.

Su concepto está basado en la industria de hospitalidad y ofrece servicios de oficina y ambiente colaborativo, tipo hotel 5 estrellas. Está enfocado en las tendencias globales como son las economías colaborativas y los modelos de negocio asset-light, que implica que las empresas inviertan en menos activos de capital, en comparación con el valor de sus operaciones.

Conversé con Ernesto de Olazával, CEO y cofundador de Comunal Coworking, quien en el 2013, con otros dos emprendedores abrieron su primer espacio de coworking en Perú.

La perspectiva que tiene sobre México, es muy optimista por la expansión que podrá tener en la atención de los grupos corporativos, especialmente los financieros y las perqueñas y medianas empresas. A seis años de que iniciaron el negocio, hoy administran más de 40,000 metros cuadrados de oficinas.

Alrededor de 90% de su facturación proviene del alquiler de oficinas privadas y los clientes actuales han podido observar ahorros de más de 30% en promedio en comparación a lo que gastaban en una oficina tradicional. Su plan es multiplicar su inversión en México en un plazo de dos años. Aunque por ahora no tienen definido su presupuesto de inversión, calculan que serán capaces de levantar el capital suficiente para, en ese tiempo, ser un actor protagónico. Los espacios colaborativos están marcando un cambio en el esquema y relaciones de trabajo. Al mismo tiempo están iniciando un nuevo modelo de negocio que sin ser necesariamente propietario de los bienes raíces que renta, ofrece alternativas que reducen los costos de las empresas y emprendedores.

Atisbos

¿PRÁCTICA MONOPÓLICA? Investigan la probable comisión de una práctica monopólica en el mercado de servicios de telefonía móvil y venta de equipos, en México.

La Autoridad Investigadora del IFT, que preside Gabriel Contreras inició la investigación correspondiente. Se investiga —luego de una denuncia— si se cometieron conductas con la intención o efecto de desplazar indebidamente a otros agentes económicos, impedirles sustancialmente su acceso o establecer ventajas exclusivas en favor de uno o varios agentes económicos en los mercados minoristas de servicios de  telecomunicaciones móviles y de comercialización de equipos terminales móviles.

HACKEO. Vaya susto el que se llevaron en Pemex, que dirige Octavio Romero, con el hackeo del que fueron objeto. Aseguraron anoche que ya había sido superado el problema. Sería importante que dejen claro si es cierta o falsa la versión de que la petrolera habría dejado de tener la protección respectiva por la política de austeridad.