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Urgen al Legislativo cumplir con ley de marihuana
Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes, en contra de legalizar enervante en México.
A seis meses de que el pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dictó la declaratoria general de inconstitucionalidad que elimina la prohibición sobre el uso recreativo del cannabis y el Tetrahidrocannabinol (THC), que en conjunto se conoce como marihuana, el tema sobre la despenalización del uso lúdico del enervante sigue atorado en el Congreso de la Unión a pesar de que ha sido discutido y votado una y otra vez por senadores y diputados federales desde 2017.
Pablo Girault, miembro de México Unido contra la Delincuencia (MUCD), y Fernando Dworak, experto en materia legislativa, afirmaron que urge que el poder Legislativo se aboque a acatar la resolución judicial.
El 28 de junio del 2021, con su resolución, los ministros exhortaron de nuevo al poder Legislativo a legislar sobre el derecho constitucional al autoconsumo recreativo de la marihuana para generar seguridad jurídica a los usuarios y terceras personas, y a emitir información para el ejercicio responsable de ese derecho.
“Claramente es urgente legislar en la materia”, dijo Girault para quien no hay voluntad política del poder Legislativo, ni del Ejecutivo federal para resolver el asunto.
“El presidente (de la República) cuando era oposición y estaba haciendo su campaña decía que lo iba a pasar”, comentó en relación con la citada despenalización.
“Ha tenido mayoría en ambas cámaras y no lo ha pasado porque no ha querido; ha pasado todo lo demás, menos la despenalización de la marihuana para uso lúdico”.
Recordó que Olga Sánchez Cordero, presidenta de la Mesa Directiva del Senado, también presentó desde 2018 una iniciativa en la materia, que sigue pendiente de votación.
“La Suprema Corte ya les dijo que tienen que modificar esa ley porque los artículos declarados inconstitucionales, los que penalizan el uso recreativo, ya no son válidos para nadie. Por lo tanto, hay un vacío. Tampoco han publicado el Reglamento del uso de la marihuana medicinal; no han querido”.
En su opinión, el que no se despenalice el uso de la marihuana impacta en los niveles de violencia e inseguridad en el país.
Aunque aclaró que eso no quiere decir que en el momento en que entre en función la legislación sobre el consumo de marihuana se acabará el problema de violencia en México, porque es claro que el problema ya no es solo de bandas de narcotraficantes, sino de bandas de crimen organizado que están en muchos otros negocios y que están tomando control del territorio.
Presión al Congreso
Por su parte, Dworak recordó que la Corte tiene facultades para ampliar las libertades, cuando el poder Legislativo “no quiere o no puede tomar una decisión”, como en el caso de la despenalización del uso recreativo de la marihuana.
“No puede obligar la Corte al Congreso a legislar en el tema, pero ciertas de sus interpretaciones amplían el margen de libertades”.
Desde su visión, “si hay una presión adecuada de grupos interesados en liberalizar el consumo (de la marihuana) y ciertas condiciones de comercio, el Congreso va a reaccionar; no reacciona porque la urgencia la marcan los grupos organizados de la ciudadanía.
“Estamos hablando de un problema de incidencia y de estrategia para la toma de decisiones por parte de grupos de presión, no tanto de una voluntad política”, aseguró, para obligar al poder Legislativo a legislar en la materia.
“Así es como funcionan muchas veces los órganos legislativos. Hay que ir con los legisladores clave para un tema”.
Uso recreativo, contrarioa tratados de la ONU: JIFE
Para la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC por su sigla en inglés), es de suma importancia las decisiones que vayan a tomar las y los legisladores del Congreso de la Unión con respecto a la regulación del cannabis en México ya que, alertan, una regulación con para fines recreativos es contraria a las convenciones internacionales de la ONU.
Raúl Martín del Campo, integrante de la JIFE, señala que en lo que se refiere a México, la Junta Internacional está dándole seguimiento a los temas relacionados con la regulación de los diferentes precursores químicos en el país, además de la posibilidad de que la Nación fortalezca sus programas de prevención y tratamiento de las drogas y respecto a las decisiones que va a tomar sobre la regulación del cannabis sobre todo, dijo, en si van a ser congruentes o no con las convenciones internacionales en la materia y en las que México forma parte.
“La JIFE lo está observando, está esperando a que se concreten los pasos porque todavía no se concretan lo suficiente y la JIFE está en comunicación con el gobierno mexicano precisamente para asesorarle en este tema”, explicó.
Y es que el también experto en prevención y control de las adicciones recordó que la regulación de un mercado legal de cannabis para fines recreativos de adultos iría en contra de las convenciones internacionales, pues la junta solo acepta su consumo medicinal y científico.
“La OMS (Organización Mundial de la Salud) se ha manifestado con respecto a que fumar cannabis no es la mejor manera de administra el medicamento”, sostuvo.
En el pasado, la JIFE ha advertido sobre el impacto en la salud del uso de esta droga, ello al subrayar que la Convención de 1961, de la que México es firmante, tiene el objetivo de proteger la salud y el bienestar de la humanidad y el cannabis no sólo es adictivo, sino que puede afectar algunas funciones fundamentales del cerebro.
Según la UNODC, fumar marihuana es más cancerígeno que fumar tabaco y su aprobación tendrá el efecto perverso de alentar su experimentación temprana, reduciendo la edad de la primera vez que se usa, además de contribuir a problemas de desarrollo, adicción y otros trastornos.
Antecedentes
Fue en el 2007 cuando la diputada federal Elsa Conde Rodríguez, del entonces Partido Alternativa Socialdemócrata y Campesina (PASC), presentó la primera iniciativa sobre el uso de la marihuana en la cual planteaba normar el acceso seguro y legal para el consumo medicinal de la Cannabis. En el proyecto también se buscaba permitir el autocultivo de la planta y la creación de una ley para los consumidores de la droga.
Sin embargo, pasaron otros nueve años para que el tema se retomara de manera seria en el Congreso de la Unión. En el 2016, el Senado aprobó una iniciativa enviada por el presidente Enrique Peña Nieto en la cual se establecía que la Secretaría de Salud deberían diseñar políticas públicas para regular el uso medicinal de esta planta y de sus derivados.
Mientras que, en el 2018, y luego de diversos amparos ciudadanos contra la prohibición administrativa del cannabis, es que la Suprema Corte de Justicia de la Nación declaró inconstitucional la prohibición absoluta del uso personas de esta planta, y con ello ordenó al Congreso legislar en la materia, acción que se mantiene pendiente de cumplir.
Camino verde a la regulación
- 2018- La SCJN resolvió el quinto amparo que declara inconstitucional la prohibición absoluta del uso personal de cannabis, por lo que ordenó al Congreso a legislar en la materia.
- 2019- Solicita el Senado la primera prórroga a SCJN. El máximo tribunal lo otorgó en noviembre de ese año.
- 2020- La Suprema Corte confirmó segunda prórroga. La cual venció en diciembre del 2020.
- 2020- En noviembre el Senado aprobó el proyecto de dictamen por el que se expide la Ley para la Regulación del Cannabis y es turnado a la Cámara baja.
- 2020- Los diputados solicitaron la tercera prórroga a la Suprema Corte de Justicia. La SCJN aceptó otorgarlo y puso de límite hasta el 30 abril del 2021.
- 2021- En marzo se aprueba una ley en San Lázaro y se turna a la Cámara alta, sin embargo, el Senado anunció que buscaría otra prórroga.
- 2021- En junio la SCJN invalida, con efectos generales, la prohibición absoluta contenida en la Ley General de Salud para realizar actividades relacionadas con el autoconsumo lúdico.
- 2021- En julio se publicó la Declaratoria General de Inconstitucionalidad en el Diario Oficial de la Federación. En la que se estableció que la Cofepris tendrá que autorizar permisos para consumir y portar marihuana para fines recreativos y los lineamientos para adquirir la semilla.