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Urgen destinar recursos a prevenir desastres
Mientras el territorio mexicano se encuentra expuesto a un alto nivel y gran variedad de peligros, provocados por fenómenos naturales en combinación con la actividad humana; la OCDE y especialistas en políticas de protección civil advierten la necesidad de virar las medidas de atención hacia la prevención de riesgos.
Mientras el territorio mexicano se encuentra expuesto a un alto nivel y gran variedad de peligros, provocados por fenómenos naturales en combinación con la actividad humana; la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE ) y especialistas en políticas de protección civil advierten la necesidad de virar las medidas de atención hacia la prevención de riesgos.
De acuerdo con un estudio de la OCDE sobre el Sistema Nacional de Protección Civil en México (Sinaproc), lanzado a mediados del año, indica que pese a las mejoras del organismo en los últimos 25 años, es necesario cambiar su enfoque, centrándose en la prevención.
Al respecto, el coordinador de Protección Civil y Prevención de Desastres de la Universidad Iberoamericana (UIA), Mario Garza calificó de deficiente la prevención de desastres naturales, pues la administración gubernamental privilegia una política pública de atención de emergencias.
Basta revisar el presupuesto que se asigna al Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) y el Fondo para la Prevención de Desastres Naturales (Fopreden), de los cuales 90% del presupuesto está destinado a la atención de desastres. Eso es un indicador sintomático de las prioridades de las políticas públicas , dijo el experto.
La historia de los desastres naturales en el país no es nueva, refirió en entrevista uno de los principales investigadores de Centro de Investigación para el Desarrollo AC (CIDAC), Luis Alberto Serra Barragán. Al contar los últimos 10 eventos de este tipo, el país registra una pérdida de más de 4.5 millones de dólares. El investigador destacó que de estos 10 siniestros sólo uno ha sido un sismo y los demás se tratan de huracanes o inundaciones, y cíclicamente se ven dañadas las mismas entidades, como Tabasco, debido a una combinación entre la ubicación geográfica y ausencia de infraestructura, para encarar esta clase de contingencias.
Por tanto, es necesario que el Sinaproc centre la atención en detener o reducir los daños antes de que ocurran. Ello es compatible con dar un lugar preponderante a la adaptación al cambio climático, en la una visión estratégica del país en materia de desarrollo.
El 13 de octubre se celebra el Día Internacional para la Reducción de Desastres Naturales. Este año se enfoca a las personas con algún tipo de discapacidad y su vulnerabilidad ante los desastres.
ana.langner@eleconomista.mx