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Hay margen para abaratar costos de servicios bancarios, pero debe ser por competencia: CNBV
El presidente de la CNBV, Bernardo González precisó que hoy esta Comisión no participa en la discusión sobre el tema de las comisiones en el Senado, pero que lo hará si se le requiere.
Para el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Bernardo González, sí hay espacio para mejorar los precios en el mercado de servicios financieros, pero esto debe darse a partir de la competencia.
Entrevistado en el marco de la presentación de la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) dijo que esto ya se vio, derivado de la reforma financiera del 2014, en el caso de los créditos hipotecarios, donde las tasas han bajado de forma considerable en los últimos años, pese a que la tasa de referencia ha subido.
“Que sea a partir de la competencia. Hemos visto esa reducción tanto de tasas como de otros precios en el sistema financiero, pero sin duda todavía queda espacio para seguir abaratando costos”, expuso.
Añadió: “estas tasas de crédito hipotecario de largo plazo se han mantenido (en niveles bajos) en gran medida por la competencia, porque se flexibilizó en la reforma financiera”.
De no hacerse a través de la competencia, dijo el funcionario, se establecerían diferentes reglas y el regulador no tendría suficientes elementos y podría equivocarse en la determinación de precios.
El presidente de la CNBV precisó que hoy esta Comisión no participa en la discusión sobre el tema de las comisiones en el Senado, pero que lo hará si se le requiere.
Usuarios informados pueden beneficiarse: AMB
Marcos Martínez, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM) mencionó por su parte que para la inclusión financiera, es fundamental contar con ciudadanos bien informados.
“Aún hay millones de mexicanos que desconocen los avances alcanzados y todos los beneficios que como usuarios informados pueden obtener, desde aquellos productos libres de cargo hasta las mejores opciones para proteger su patrimonio”, expuso.
Resaltó que la falta de educación financiera no tiene que ver ni con el grado de preparación ni con el nivel socioeconómico de un individuo. “Hay gente preparada, en altos niveles de responsabilidad, que tienen una profunda carencia de educación financiera, lo que hace evidente el trabajo que tenemos que hacer”.
