Lectura 4:00 min
Morosidad en microfinanzas crecería hasta cuatro veces: expertos
En el país, el sector ofrece servicios financieros a las personas,muchas de ellas del sector informal, de bajos ingresos, especialmente para sus actividades productivas.
La situación económica actual impactará en la cartera de las entidades especializas en las microfinanzas, mismas que atienden a gran parte de los sectores de menores ingresos del país. En los primeros cálculos al respecto, se estima que, debido a las consecuencias derivadas de la contingencia del coronavirus en la población de escasos recursos, la morosidad de las carteras de dichas instituciones se elevaría hasta cuatro veces.
En una seminario en línea organizado por la firma Axon Headhunting, Aarón Silva Nava, socio de la consultoría A. Silva y Asociados, indicó que en la crisis del 2008, la morosidad en las carteras de microfinanzas se elevó hasta tres veces para ubicarse en porcentajes cercanos a 25% y en ésta, derivado de la coyuntura y el impacto económico de la contingencia, se tendría un mayor incremento.
“No tenemos un referente cercano, porque la crisis del 2008 y del 2009 fue diferente a la actual, dónde el Índice de Morosidad Ajustado (Imora) de las microfinanzas, pasó de 9 a 25%, es decir un crecimiento de tres veces en cinco meses. Es previsible que, en esta ocasión, exista un incremento en el Imora de tres a cuatro veces en las carteras de microfinanzas en un periodo muy breve”, comentó Silva Nava.
Las microfinanzas en México son los servicios financieros que ofrecen instituciones de distintas figuras a las personas, muchas de ellas del sector informal, de bajos ingresos, especialmente para sus actividades productivas. El Imora es el indicador más amplio de la morosidad de una cartera de crédito, al considerar quitas y castigos que realiza una institución para limpiar su balance.
Pese a que no hay datos oficiales del sector de las microfinanzas en su conjunto, existen asociaciones que presentan indicadores de acuerdo a la información de sus afiliados. Por ejemplo, la red ProDesarrollo, que representa a casi 70 entidades microfinancieras del país, identificó que, al cierre del 2019, el nivel de morosidad en conjunto de sus representadas, sin considerar quitas ni castigos, era de 3.53%, porcentaje que, con base en las estimaciones del consultor, podría llegar a niveles de 15% en el corto plazo.
A marzo, Compartamos Banco, el máximo referente de las microfinanzas en México, tenía un Imora de 11.47%, desde 11.19% que presentó cierre del 2019.
El consultor apuntó que el panorama para las personas de más bajos recursos no es favorable, ya que estudios arrojan que la población de la base de la pirámide cuenta con muy poca liquidez para hacer frente a contingencias.
“Los mexicanos en este segmento sólo tienen reservas para cubrir gastos esenciales durante cuatro semanas, es el nivel más bajo y el de más rápido deterioro de un estudio que recopiló información de ocho países”, añadió Silva Nava.
El especialista comentó que los 3 millones de microcréditos de 25,000 pesos otorgados por el gobierno federal a microempresarios para paliar el momento económico, podrían tener un impacto limitado además de generar una cultura de no pago, entre los receptores de estos préstamos.
“Si bien es un apoyo que puede servir para empresas muy pequeñas o para personas que trabajan por cuenta propia, es algo muy limitado y es la única respuesta fiscal hasta el momento que se tiene como respuesta a la crisis”, detalló Silva Nava.
Recomendaciones para las microfinancieras en el corto plazo:
- Cuidar la liquidez: negociar reprogramaciones de pagos de crédito, diferir pago con proveedores y vender activos.
- Elaborar escenarios de estrés con colocación y cobranzas reducidas.
- Identificar aliados estratégicos, como las fintech, para poder sortear la crisis.
- Revisar modelo comercial y de riesgos.
- Preparar estrategia de reestructuración masiva.