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Epístola de Zoé Robledo para el mundo
“Una arma literaria: Selección de cartas famosas” Norma Aguilera.
Hace unos días el director general del IMSS Zoé Robledo publicó una epístola titulada de “Tuxtla a Miami, con todo respeto” para que, utilizando de vehículos a los doctores Julio Frenk y Octavio Gómez Dantés -F&D-, todo el mundo se pudiera contestar la interrogante ¿Qué hicimos?
Utilizo la acepción de epístola, no como una carta o misiva que se escribe a alguien, sino en sentido literario como “una composición poética en forma de carta, en que el autor -Zoe Robledo- se dirige o finge dirigirse a una persona real o imaginaria -F&D-, y cuyo fin suele ser moralizante, instructivo o satírico”. De mi cosecha agrego que fue dirigida al mundo o a los personajes que en él habitan y que no piensan igual que él.
Todo inició por una invitación de F&D para desandar el camino que tomó el gobierno federal y transitar hacia un fondo universal de salud que le garantice los mismos servicios en salud a todos los mexicanos, aparecida en una columna titulada “Apartheid Médico”.
El visionario Zoé, que ha echado a volar su imaginación con motivo del 80 aniversario del IMSS, olvidando que uno es “dueño de su silencio y esclavo de sus palabras”, dio entrevistas a modo, una de éstas sirvió a F&D para su propuesta, la cuál no le gustó y escribió al día siguiente que “en caliente se toma el caldo” ilustrando con su epístola con el adjetivo calificativo “con todo respeto” aquello en lo que consideró “deberían investigar más”.
Siendo universitarios de cepa F&D, al día siguiente publicaron réplica titulada “De Tuxtla a Miami” y ya, supongo, sin respeto o de manera irónica agregando la interrogante, ¿y Copenhague? El punto central fue ratificar que el sistema de salud que está construyendo - destruyendo digo yo- el gobierno federal, los asalariados son derechohabientes y los pobres no asalariados, “derechocarecientes”.
El silencio ha sido ahora la respuesta -método recurrente del gobierno federal- a los argumentos vertidos por F&D. Ya no hubo sátira ni recomendaciones como “le recomedaría hacer bien su investigación”. Señalo que en esta tesitura, Zoé Robledo solo se dirige al actual rector de la Universidad de Miami, y no al Investigador del Instituto Nacional de Salud Pública, Octavio Gómez Dantes. Lo correcto hubiera sido decir “les recomiendo” en plural.
Desde León, Gto. este escribidor quiere llamar la atención a solo dos de muchas de las aseveraciones de la epístola de Zoé
Robledo que pudieran ser contestadas, si quiere en frío, como el gaspacho.
Primera aseveración epistolar.- “Es histórico lo que nunca se ha hecho. El 6 de febrero de 2023, con el banderazo del levantamiento diagnóstico de los servicios de salud en el estado de Chiapas la cosa es distinta: se pensó, se acordó, se diseñó, en compañia del gobernador Rutilio Escandón, se dio del primer paso de la transformación del sistema de salud y la atención médica del estado”.
Preguntas a su aseveración: ¿Cuánto tiempo llevará recorrer todas las un mil 774 unidades médicas, desde las Casas de Salud hasta la alta especialidad? ¿Para qué se van a recorrer? ¿Lo histórico es lo tardío de la supuesta intervención? ¿Qué hizo el gobierno federal en los 1,527 días que lleva en el gobierno? ¿Qué acciones han llevado a cabo de las publicadas hace 1,312 días en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, donde por cierto, el SS-IMSS- Bienestar ni siquiera aparecía en los sueños del mesías del palacio nacional? El INSABI, vigente en Tuxtla y Chiapas oficialmente desde enero del 2020 -1,139 días- ¿qué hizo de las responsabilidades que le otorgan la Ley General de Salud si ni siquiera tenía el diagnóstico? Los funcionarios del IMSS-Bienestar ¿tampoco hicieron el trabajo elemental en estos 4.2 años de gobierno en funciones? ¿Cómo programaban medicamentos, médicos, enfermeras? ¿Qué podrán hacer, incluso juntos, si Chiapas es uno de los estados que dan menos aportaciones estatales solidarias a la salud y el SS-IMSS-Bienestar tampoco tiene recursos asignados, solo la promesa del inquilino de “no faltarán recursos”. Ojo, solo les quedan 656 días? ¿Servirán los 500 quizá médicos cubanos que están ahora yendo al sur? Por último ¿Qué papel juega en su “arreglo” de los servicios de salud la autoridad sanitaria responsable en materia de salubridad general, como lo es por ejemplo la Dirección General de Planeación y Desarrollo en Salud -DGPLADES-, quienes se etiquetan como el principal espacio para el diseño, desarrollo e implantación de innovaciones de los sistemas de salud en México?
Segunda aseveración.- “Quizá en Miami no apareció la noticia, pero IMSS Bienestar ya no sólo es un Programa, es un organismo público descentralizado (OPD) publicado en el Diario Oficial de la Federación el 31 de agosto la de 2022. Lo que nunca fue el seguro popular, y no lo era porque nuna fue una institución de atención.
Preguntas a su segunda aseveración: Si el IMSS, la SSA, el ISSSTE, el ISSFAM, el INSABI, el Sistema de Protección Social en Salud se construyeron después de su paso en el Congreso de la Unión, a veces por iniciativa del Ejecutivo y en las últimas ocasiones por el Legislativo, ¿Por qué razón la OPD Servicios de Salud IMSS-Bienestar no pasó por el Congreso? ¿Es una criatura no reconocida -o no deseada- como tal en la estructura programática del PEF 2023 por la falla garrafal de la única institución del gobierno federal planeada en Ley que fue el INSABI? El Sistema de Protección Social en Salud, conocido como seguro popular, creado por Ley a propuesta del Ejecutivo, ¿consideraba el otorgamiento de servicios en las 32 entidades federativas, y el traspaso del dinero al IMSS-Bienestar en aquellos sitios, como Tuxtla y alrededores, donde la atención primaria se daba en clínicas operadas por este subsistema? ¿Están haciendo un sistema de salud integrado y uniforme? ¿Porqué por ejemplo, los SS-IMSS-Bienestar de Nayarit se negaron el 26 de enero a recibir medicamentos para el ejercicio 2023, por excrito señalan que órdenes superior por la “incertidumbre referente a la firma del acuerdo de coordinación con el INSABI y su institución; motivo por el cuál, sírvase la presente como evidencia de rechazo de la recepción de mercancías”? ¿Así de coordinados estarán también en los acuerdos de coordinación para el intercambio y/o prestación unilateral de servicios de atención médica? ¿Por qué en cuatro años solo 7 entidades los ratificaron en 2022 y solo parcialmente? ¿Las tarifas del IMSS ordinario 2023 porqué son mucho más caras que las publicadas el pasado 8 de febrero para el resto del sistema?, ¿Son insumos de menos calidad? ¿Habrá atención de segunda y de cuarta? Por último, ¿el modelo de atención MAS-Bienestar se aplicará en el IMSS ordinario y en el resto de instituciones de seguridad social o sólo en los derechocarecientes atendidos por el INSABI o el SS-IMSS-Bienestar?
Mucho me temo, estimados lectores, que las respuestas nos llevarán a la misma conclusión que F&D: es necesario una gran convocatoria para repensar cómo hacer efectivo el derecho a la protección de salud y el financiamiento necesario para lograrlo.
Concluyo respondiendo a Zoé Robledo su pregunta ¿Qué hicimos? Hasta ahora, destruir el sistema nacional de salud, urge desandar este camino de la cuarta trastornación (sic).
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