Incertidumbre, radio pasillo y otros riesgos de una comunicación interna deficiente

En comunicación no existen vacíos, si en una empresa los encargados de hacerlo prefieren callar, alguien más tomará ese lugar y será el famosísimo “radio pasillo”. Al no ser una fuente fidedigna, sino producto del “es que me enteré”, “me dijeron”, “fulanito o sotanito me contó”, se genera una gran incertidumbre al interior con efectos muy negativos.

Cuando se toman decisiones, hay cambios y nuevos proyectos que no se permean a todos los integrantes de la organización, los colaboradores viven momentos inquietantes y de mucha incertidumbre, lo que termina por hacer el clima laboral tóxico

La comunicación interna son todos aquellos mensajes que transmiten valores, objetivos, políticas y noticias relevantes de la empresa a los colaboradores; juega un papel fundamental en el fortalecimiento de la cultura empresarial, la colaboración efectiva, la motivación de los empleados y el logro de objetivos organizacionales, de acuerdo con la consultora PeopleNext.

La firma señala que una buena comunicación interna fomenta la colaboración, aumenta la productividad y fortalece la cultura empresarial. Los colaboradores informados se comprometen, crean equipos más sólidos y mejoran el clima laboral.

Una encuesta realizada por McKinsey, reveló que los equipos bien conectados ven un aumento de productividad entre 20 y 25 por ciento.

Efectos negativos de una comunicación interna deficiente

En el lado contrario de la balanza encontramos las malas comunicaciones en el lugar de trabajo que generan frustraciones, confusión y un entorno extremadamente tenso en el que las personas no están motivadas para ser productivas y no están inspiradas para colaborar.

Marco Arru, especialista en comunicación organizacional, refiere que cuando una empresa no comunica adecuadamente, el discurso se pierde y las líneas estratégicas dejan de estar claras.

La falta de comunicación también pega en una de las grandes preocupaciones de las organizaciones: el compromiso, este se reducirá ante la incertidumbre, porque no se sienten parte de las organizaciones, agrega.

El hecho de que los flujos de comunicación no corran por canales formales con la transparencia y velocidad adecuadas, producen vacíos de información que son llenados por el rumor, prejuicios positivos o negativos o verosímiles, pero falsos que desvían la atención de la gestión profesional, advierte.

Además, las compañías requieren desarrollar y retener el talento clave en la organización, y sin profundas bases de información dinámicas resulta muy difícil la gestión de esta variable para el crecimiento organizacional.

Marco Arru considera que si los trabajadores sienten que no están informados de lo que pasa y que sus ideas u opiniones no importan, dejarán de poner interés y pasión en lo que hacen; se convertirán en colaboradores poco productivos.

En ese sentido, recomienda incorporar nuevos hábitos y caminar hacia organizaciones más abiertas y horizontales donde la comunicación favorezca el debate, la transmisión de conocimiento y el intercambio de ideas. Esto implica herramientas eficaces de comunicación interna, plataformas que faciliten la acumulación y el fácil acceso al conocimiento, algo de lo que aún muchas empresas adolecen, explica.

Consejos prácticos para mejorar la comunicación interna

La consultora PeopleNext sugiere una serie de estrategias que servirán a las organizaciones para reforzar la comunicación interna:

» 1 Reuniones regulares:

La comunicación cara a cara es importante, programar reuniones periódicas, tanto individuales como de equipo, será una forma de mantener a los empleados informados y fomentar la comunicación abierta.

» 2 Herramientas de colaboración en línea

Las herramientas tecnológicas permitirán una comunicación más fluida, independientemente del modelo de trabajo que tengan en tu empresa. Permitirán compartir archivos, enviar mensajes instantáneos y colaborar en proyectos de manera eficiente.

» 3. Retroalimentación abierta

La comunicación debe ser bidireccional, por eso se debe fomentar espacios y una cultura donde los empleados se sientan cómodos expresando sus ideas y opiniones. Establece canales formales e informales para recopilar su retroalimentación, como encuestas anónimas.

» 4. Promueve la comunicación ascendente

Anima a los empleados a compartir sus ideas y preocupaciones directamente con los líderes y gerentes. Construye un ambiente en el que se valores y dé seguimiento a las sugerencias y comentarios de los empleados.

» 5. Comunicación horizontal

Facilita la colaboración y el intercambio de información entre diferentes equipos y departamentos. Organiza eventos sociales, como almuerzos o actividades grupales, para fomentar la interacción y la comunicación entre los empleados de diferentes áreas.

Marco Arru advierte que la mayoría de los problemas en las organizaciones están relacionados con una mala gestión formal de la comunicación, eso se traduce en conflictos y situaciones que dañan la eficiencia, la productividad y el clima laboral.

“No resolver a tiempo estos problemas provocan consecuencias que terminan por afectar los objetivos de negocio y beneficios de la organización, así como a su comunicación, reputación e imagen. Es competencia del liderazgo reconocer estas dificultades, intervenir y mejorar la salud de las conversaciones”, afirma.