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Morena propone permisos laborales para cuidados de personas mayores
La iniciativa presentada en la Cámara Alta busca incorporar una nueva prestación en la legislación laboral para permitir que los trabajadores se ausenten hasta 10 días al año para el cuidado de personas mayores a su cargo.
El Senado deberá evaluar una reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) para incorporar los permisos laborales geriátricos, un periodo de días libres a los que tendrían derecho los trabajadores para el cuidado de personas mayores de 60 años. El objetivo es reconocer desde la legislación de trabajo la importancia de los cuidados en la vejez y reducir la presión que tienen hijos y personas que asumen este rol.
La iniciativa presentada en la Cámara de Senadores plantea un permiso laboral con goce de sueldo de cinco días por cada semestre del año; es decir, 10 días anuales, para atender los cuidados de personas mayores en casos de enfermedad o atención médica.
“Es necesario hacer una reflexión en materia laboral, dada la situación en la que nuestro país envejece aceleradamente, sobre que tantas facilidades existen por parte de los patrones para que sus trabajadores se ausenten de manera justificada para el cuidado de sus padres adultos mayores”, señala la senadora Luisa Cortés García (Morena), promovente del proyecto.
Los permisos geriátricos aún son escasos en el mercado laboral, principalmente en el continente americano, sólo Perú, Costa Rica y Canadá cuentan con días libres para que los trabajadores atiendan necesidades de salud de sus padres, de acuerdo con el Centro Global de Análisis de Políticas Públicas (World Policy Analysis Center). En los casos de Uruguay, Nicaragua y Honduras, existe esta figura, pero con restricciones. Este tipo de licencias son más comunes en Europa.
En México, según la Encuesta Nacional para el Sistema de Cuidados (Enasic), el 30.4% de quienes cuidan a personas mayores de 60 años son hijos o nietos. Al menos 600,000 adultos mayores requieren más tiempo de cuidados, principalmente en labores de enfermería y compañía, asistencia a educación especial o actividades y para tareas domésticas.
“Las personas mayores constituyen un grupo en situación de vulnerabilidad, en diversas sociedades. El maltrato psicológico es el más importante, seguido del abuso económico y patrimonial, la desatención, el maltrato físico y el abuso sexual”, afirma Luisa Cortés García en la exposición de motivos de la reforma.
Si bien la propuesta incorpora entre las obligaciones patronales los permisos geriátricos, también plantea que “las leyes en la materia, así como los reglamentos establecerán los requisitos necesarios para acceder a esta prestación”.
En ese sentido, la iniciativa propone también un plazo de 180 días para que el Poder Ejecutivo actualice “las reglamentaciones necesarias donde se establecerán los requisitos necesarios para acceder a esta prestación en las instituciones de seguridad social”.
Permisos laborales: lo aprobado y lo propuesto
Si bien las dos legislaturas pasadas marcaron el mayor avance en reformas laborales con 15 proyectos aprobados, el periodo más activo en los últimos 30 años, en permisos laborales vinculados con el cuidado no hubo mucho cambio.
La reforma más importante en esta materia fue la modificación a la Ley del Seguro Social para que los padres con hijos menores de 16 años que sean diagnosticados con cáncer cuentan con una licencia de hasta 28 días cuando se requiera descanso médico u hospitalización.
Esta licencia es otorgada por el IMSS y puede ser usada las veces que sea necesaria por un periodo máximo de tres años y sin exceder 364 días.
Entre las reformas laborales que sólo quedaron en buenos deseos y tienen un enfoque en facilitar a las personas trabajadoras las tareas de cuidado, se encuentran los incrementos de los permisos de paternidad, y la creación de una licencia para ausentarse de las actividades laborales por la hospitalización o intervención quirúrgica del padre, madre, hijos, cónyuge o concubino o concubina.
Por ahora, la falta de regulación de permisos en la legislación laboral para el cuidado de personas mayores, hospitalización o incluso fallecimiento de un familiar, deja abierta la posibilidad a que la empresa otorgue o no el día libre.