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Bills, hundidos por decisiones directivas

Los cambios en el equipo no han podido ajustarse a mejores resultados deportivos. Tienen nuevo Quarterback y coordinador ofensivo esta campaña ¿A qué se debe la racha negativa?

“No estamos satisfechos con la ofensiva y no sólo se trata de Tyrod Taylor (mariscal de campo de los Bills del 2015-2017). El head coach, Sean McDermott, y yo conversaremos sobre todo porque sabemos que debemos mejorar. (El equipo) está lejos de ser un producto terminado”, comentó  a la prensa el gerente general de Buffalo, Brandon Beane.

La idea del directivo era mejorar el desempeño de su equipo, que en la temporada 2017 jugó por primera vez los playoffs desde 1999. Para ello prescindió de dos de sus piezas más importantes en el ataque: Taylor -a quien lo canjeó por selecciones colegiales con Cleveland- y Rick Dennison, quien era su coordinador ofensivo y lo despidió.

Para suplir a Taylor le dio la titulariad a Nathan Peterman -quien sólo había iniciado un juego como titular en la NFL- y seleccionó  en el Draft a Josh Allen, quien había brillado en la Universidad de Wyoming.

Para ocupar el puesto de coordinador ofensivo firmó a Brian Daboll, quien la última vez que había estado en ese puesto en la NFL fue en2012 con los Kansas City Chiefs y al que los hundió como el peor ataque de la liga.

Beane se arriesgó y fracasó.

Los Bills son un desastre. Su récord es de dos victorias y seis derrotas; promedian 10.9 puntos por encuentro y en la posición de quarterback han jugado con Peterman, Allen y Derek Anderson, quien lo firmaron hace unas semanas y que actualmente se encuentra lesionado por una conmoción.

“Sé que lo estamos en la dirección correcta”, mencionó McDermott en conferencia de prensa. “Tenemos la misma visión para este equipo. tanto Beane como yo. A veces no obtenemos los resultados necesariamente en el marcador, y eso es frustrante”.

Mientras el head coach del equipo da la cara, Beane evita dar declaraciones a la prensa. En cambio, se ha dedicado a hacer compras de pánico.

Ayer firmó al quarterback Matt Barkley -quien no juega un partido en la NFL desde 2016- y a Terrell Pryor, quien estaba desempleado y que puede jugar como receptor o mariscal  de campo.

El panorama, incluso a futuro, es desalentador para la franquicia. Allen sufre molestias en el brazo y el equipo informó que podría perderse el resto de la temporada debido a que padece una lesión parecida a la que sufren algunos pitchers y podría someterse a una cirugía conocida como Tommy John.

Ese tipo de procedimiento provoca que los peloteros queden fuera el resto de la temporada.

“Contra Chicago (el equipo contra el que juegan el domingo)jugaremos con Peterman como quarterback. Lo vamos a apoyar con todo lo que tenemos”.

Los Bills, pese a sus malas decisiones, se empecinan en seguir su plan inicial.

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