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Comunicación y confiabilidad al empuje de Checo
El mexicano vive su mejor temporada y busca un podio inédito en el Mundial de Pilotos, para lo cual debe mejorar su conexión con Red Bull.
Para el piloto mexicano de Fórmula 1, Checo Pérez, la temporada 2022 está siendo la mejor de las 12 que lleva de trayectoria en el máximo circuito del automovilismo. Luego de medio año de actividades (con 11 de 22 carreras disputadas), el tapatío ha sido pieza clave para que su escudería, Red Bull Racing, domine el Mundial de Constructores y también durante gran parte del calendario se ha posicionado en el podio del Mundial de Pilotos.
La segunda mitad de la temporada se activará durante el Gran Premio de Francia, donde Pérez ha dejado clara su postura de ser un candidato a lo más alto: “Aún estoy en la lucha por el Mundial de Pilotos, así que, personalmente, es importante para mí no perder más puntos”, dijo el mexicano, quien hasta el momento es el tercer mejor conductor de la competencia con 151 puntos, debajo de los 170 de Charles Leclerc (Ferrari) y de los 208 de su coequipero, Max Verstappen.
Pero para que Pérez pueda cumplir su objetivo, necesita afinar su relación con Red Bull con tareas dentro y fuera del monoplaza. En dos de las últimas tres carreras (Gran Premio de Austria y de Canadá) se ha tenido que retirar por problemas de confiabilidad con su coche, algo que no puede seguir ocurriendo si aspira al podio del Mundial de Pilotos.
“Lo que podemos esperar de Checo en esta segunda mitad de temporada es que otra vez va a brindar su 110%, sabemos que suele tener segundas partes muy altas, va a ir a buscar victorias, pero también depende de factores como la competencia con Ferrari y la confiabilidad. Durante la primera mitad de temporada, la mayor cantidad de los puntos perdidos de ambos equipos (Red Bul y Ferrari) y por parte de sus cuatro pilotos ha sido por temas de falta de confiabilidad de sus autos”, explica Alberto Tello de Meneses, consultor en comunicación estratégica, imagen y percepción pública, además de especialista en temas de Fórmula 1.
La confiabilidad o a veces simplemente llamada fiabilidad se refiere a la confianza que un piloto tiene sobre el comportamiento de su monoplaza, de acuerdo con los ajustes que este recibe por parte de su escudería y su equipo de ingenieros.
Sin embargo, en los primeros 11 Grandes Premios de la temporada 2022, Red Bull ha visto a sus pilotos abandonar la pista en cuatro ocasiones por problemas en la bomba de combustible, la bomba de gasolina y fallas en la caja de engranajes. Eso hace que su distancia respecto a Ferrari en el Mundial de Constructores se haya reducido a 56 puntos (Red Bull tiene 359 y Ferrari 303).
Desde la opinión del especialista Tello de Meneses, la solución a las fallas mecánicas se encuentra en la presión mediática que Checo Pérez debe realizar hacia su propia escudería, como cuando después del Gran Premio de España se declaró inconforme por la decisión de dejarse rebasar por Verstappen y dijo que tenía que hablar con los directores del equipo.
“Lo que hemos analizado desde la perspectiva de comunicación estratégica y alta dirección son las tendencias que hay alrededor de Red Bull. Lo que vemos que funciona muy bien en Verstappen y su familia, incluido su papá (Jos Verstappen), es que ellos presionan públicamente por el tema de actualizaciones o de necesidades específicas y ese tipo de liderazgo, que de pronto pudiera parecer muy agresivo, parece gustar e identificarse con la escudería”.
De acuerdo con una entrevista concedida a Servus TV, Jos Verstappen declaró que él se entera antes que su hijo de todas las adecuaciones que recibe su monoplaza, además de solicitar y aprobar los cambios en conjunto con Gianpiero Lambiase, el ingeniero principal del piloto neerlandés que actualmente busca el bicampeonato de la Fórmula 1.
“Esto es algo que le ha hecho falta a Checo: aprovechar mejor la comunicación pública, el manejo de las entrevistas, para buscar y sobre todo establecer cuáles son sus necesidades. Previo a la carrera de Austria manifestó que el auto empezaba a alejarse de su estilo de manejo, dejando a la interpretación de manera muy clara que los desarrollos o las actualizaciones habían sido más hacia satisfacer las necesidades de Max Verstappen.
“Todo esto activa, en el tema de la comunicación, la atención del equipo y cuando se activa esto inmediatamente llama a que le den las herramientas para que él pueda luchar. En el lado del garage de Checo Pérez no existe la experiencia y la retroalimentación que recibe Verstappen con Gianpiero Lambiase, por ejemplo”.
Estas mejoras de comunicación y confiabilidad están en búsqueda del Mundial de Pilotos para Checo Pérez, pues en materia de otras estadísticas ya logró en media temporada lo que nunca había conseguido: seis podios (Australia, Italia, España, Mónaco, Azerbaiyán y Gran Bretaña), superando los cinco que obtuvo en 2021. En total, acumula 11 podios con Red Bull, dejando atrás los 10 que había tenido en una década con Sauber, McLaren, Force India y Racing Point.
Además, su consolidación en la escudería en este segundo año ha hecho que dentro del mismo equipo lo vean como una carta fuerte para el cierre de temporada: “Absolutamente, Pérez sigue en la pelea por el título. Solo estamos en la mitad del campeonato, las cosas cambian bastante y todavía queda un largo camino por recorrer”, definió Christian Horner, jefe de Red Bull Racing.
En las últimas cuatro temporadas, el piloto mexicano ha demostrado que las segundas mitades le vienen bien: en 2018 entró siete veces al Top 10; en 2019 lo hizo ocho veces; en 2020 cerró con dos podios; y en 2021 obtuvo tres podios y tres posiciones en el Top 5.
Para el cierre de 2022, Checo todavía tiene aspiraciones de tener buenos papeles en circuitos como los de Hungría, Singapur, Japón, Estados Unidos, Brasil y por supuesto en la Ciudad de México. Por su parte, Red Bull Racing aspira a ser la primera escudería con el 1-2 en el Mundial de Pilotos desde que Mercedes lo consiguiera en 2020 con Lewis Hamilton y Valtteri Bottas; además, eso sería un hecho inédito para la escudería austriaca.