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Comisionistas gaseros del Valle de México mantienen paro de labores
El representante del Gremio Gasero Nacional aseguró que los distribuidores de gas licuado de petróleo continuarán su paro de labores como una medida de presión hasta que reciban una respuesta a sus peticiones.
Ante el tope de precios al consumidor para los distribuidores de gas licuado de petróleo (LP), los comisionistas que ofrecen sus servicios para llevar el combustible a los hogares mantendrán paros de labores en distintas zonas del Valle de México este martes, aunque no habrá más bloqueos ni manifestaciones.
Así lo detalló Enrique Medrano, vocero del recientemente integrado Gremio Gasero Nacional, quien en entrevista con Radio Fórmula aseveró que el paro de labores de los gaseros es más obligatorio que una medida de presión, porque prácticamente, dijo, están impedidos para operar ante la falta de ganancia.
“Simplemente estaremos haciendo un paro de labores. No nos estaremos manifestando ni haciendo cierre de vialidades, nada de eso, simplemente dejamos de laborar a partir de ayer a las dos de la tarde, hasta que tengamos una respuesta o una alternativa a nuestras peticiones“, explicó.
El lunes, comsionistas gaseros de esta agrupación se manifestaron afuera de las oficinas de la Secretaría de Energía en la colonia del Valle, exigiendo el aumento de un peso en el precio máximo para esta semana, petición que les fue negada.
Y es que, a decir de los empresarios, el precio máximo no les permite cubrir sus costos, a pesar de que en promedio del gas LP a nivel nacional para la semana del 10 al 16 de octubre será ya 3.4% superior al último precio real que los distribuidores reportaron en promedio antes de la política de control de precios, luego de que para esta semana la Comisión Reguladora de Energía (CRE) determinó un tope de 26.05 pesos por kilogramo, mismo que además es superior en 2.2% al de la semana anterior, y que cumple su segunda semana en haber rebasado los precios previos al 1 de agosto, cuando se determinaron los precios máximos para evitar abusos por parte de los comercializadores.
Así, el precio máximo promedio nacional del combustible que utilizan al menos seis de cada 10 hogares en el país es 86 centavos más caro de lo que en la realidad costaba antes de la política del gobierno federal para frenar el alza de precios. Esto significa que el tanque más utilizado por los mexicanos, de 20 kilogramos en promedio nacional tendría un precio de 521 pesos a nivel nacional, con lo que es 17.2 pesos más caro que el último reporte real de los distribuidores.
“Vamos a dejar de operar, pero no porque estemos haciendo una medida de presión hacia la sociedad, es porque somos inoperantes, con el margen que nos están dando las empresas no podemos salir a trabajar“, aseguró el líder de los comisionistas.
En tanto, la Asociación Mexicana de Distribuidores de Gas Licuado de Petróleo (LP) y Empresas Conexas (Amexgas) estima que ha cerrado aproximadamente 10% del total de las rutas de reparto en el país, es decir, a partir de agosto se ha dejado de trabajar paulatinamente en 3,500 zonas, debido al control de precios máximos implementado por el gobierno federal.
Lo anterior, según los empresarios, impide a las empresas distribuidoras cubrir los costos necesarios para su operación, situación que podría agravarse en los próximos días, luego de que a medio día de este lunes se suscitó un conflicto violento entre los agrupados como comisionistas y funcionarios de la Secretaría de Energía.
En México hasta hace un mes existían 35,000 rutas de reparto y 4,700 estaciones de servicio, mediante las cuales se realizaban más de un millón de servicios diarios, según la Amexgas.