Plan para el agua en el Valle de México apuesta por nuevas fuentes y proyectos de reutilización

El Valle de México enfrenta una complejidad hídrica, que necesita de un plan integral con diversificación de las fuentes de abastecimiento, optimización de la infraestructura existente, y cooperación regional; con un enfoque en la sostenibilidad y reutilización del agua, señaló José Alfredo Galindo Sosa, titular del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) durante el Foro Nacional del Agua 2024, organizado por el Colegio de Ingenieros Civiles Mexicanos (CICM).

Una de las medidas más relevantes del nuevo plan es la búsqueda de fuentes alternativas que reduzcan la dependencia de los sistemas tradicionales, como el Cutzamala, el cual sufre de sobreexplotación “no podemos seguir dependiendo únicamente de fuentes externas y dejar de aprovechar el agua que tenemos en la cuenca, si no actuamos ahora, las consecuencias para el futuro serán graves", advirtió.

Dentro de esta diversificación se incluye la utilización de la presa Guadalupe, un proyecto en colaboración con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y el Estado de México que permitirá incorporar hasta un metro cúbico de agua potable por segundo al sistema de abastecimiento.

Además, Sacmex planea aprovechar el agua subterránea con proyectos de recarga de acuíferos, especialmente en zonas donde se presenta hundimiento debido a la sobreexplotación, para ello es necesaria la reutilización de aguas residuales mediante nuevas plantas de tratamiento y la instalación de humedales artificiales. Estos sistemas, que ya han demostrado su eficacia en algunos puntos de la ciudad, permitirán tratar las aguas negras y grises para su reutilización en áreas urbanas y agrícolas.

“El parque hídrico ‘La Quebradora’, en Iztapalapa, es un ejemplo de cómo podemos regenerar y aprovechar mejor el recurso hídrico en la ciudad. Proyectos como este deben replicarse en otras delegaciones”, comentó Galindo Sosa, el agua tratada podrá emplearse para el riego de zonas verdes y parques, lo que reduciría la presión sobre el suministro de agua potable.

Asimismo, Sacmex busca regenerar cuerpos de agua deteriorados, como el lago de Xico en Tláhuac, para integrarlos al ecosistema y aprovechar su capacidad de almacenamiento. Estas iniciativas forman parte de un enfoque que busca gestionar el agua de manera local, aprovechando el ciclo natural y las características geográficas del Valle de México.

Captación de agua de lluvia: una alternativa sostenible

Otro de los ejes fundamentales del plan es la captación y aprovechamiento de agua de lluvia, en lugar de expulsar el agua de la cuenca, el objetivo es retenerla y utilizarla dentro del área metropolitana, como sucede con el Parque Ecológico Lago de Texcoco, que ayuda a mitigar las inundaciones y canalizar el agua para su uso posterior.

"Necesitamos pensar en el agua de lluvia como un recurso valioso, no como un problema", afirmó el titular de Sacmex, con este enfoque, se reduciría la cantidad de agua que se desecha y se generaría un sistema de captación que beneficiaría a las zonas más afectadas por la escasez.

Mejora en la red de distribución y reducción de fugas

Uno de los mayores desafíos en la Ciudad de México es la antigüedad de la red de distribución, que provoca pérdidas de hasta el 30% del agua potable, aunque no hay una estimación exacta, de acuerdo con el titular de Sacmex; el plan también incluye inversiones en la modernización de esta infraestructura, con la meta de reducir las fugas y optimizar la eficiencia del sistema.

“La red de distribución actual no es sostenible, las fugas representan un desperdicio enorme, por lo que es prioritario trabajar en la modernización de la infraestructura”, explicó Galindo Sosa. Además, se planea instalar sistemas de monitoreo para detectar fugas con mayor rapidez y mejorar la respuesta en situaciones de emergencia.

Inversión y viabilidad

El titular de Sacmex reconoció que estos proyectos requieren una inversión considerable y enfrentan retos de viabilidad, especialmente en términos de infraestructura y financiamiento, sin embargo, destacó que la implementación de estas medidas es fundamental para garantizar el abastecimiento de agua en el futuro. 

“Estamos conscientes de los desafíos, pero es el momento de actuar con responsabilidad para asegurar un futuro hídrico estable en el Valle de México”, concluyó Galindo Sosa.

La ejecución del plan dependerá del compromiso de las autoridades locales y federales, así como de la colaboración con otros estados y organismos involucrados en la gestión del agua, si bien los costos y tiempos de implementación son considerables, Sacmex apuesta porque estas acciones logren subsanar la gestión hídrica en la región sin dejar posponerlo y que con eso la situación se vuelva crítica.