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La buena fortuna le ha dejado de sonreír a Germán Larrea

La buena fortuna parece no sonreírle a Germán Larrea, presidente de Grupo México (GMéxico), ya que a pesar de que su patrimonio personal se calcula en más de 14,700 millones de dólares según la pasada edición de marzo de Forbes, tendrá que negociar la creación de un fideicomiso por 385 millones de dólares.

La buena fortuna parece no sonreírle a Germán Larrea, presidente de Grupo México (GMéxico), ya que a pesar de que su patrimonio personal se calcula en más de 14,700 millones de dólares según la pasada edición de marzo de Forbes, tendrá que negociar la creación de un fideicomiso por 385 millones de dólares.

Larrea tiene redes de negocios en varios sectores económicos: minero, infraestructura, transporte ferroviario, cines con Cinemex y en el sector de aeropuertos a través de Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP).

Pero no sólo eso: hace unas semanas se habló de la intención del magnate por participar en la licitación de la tercera cadena de televisión abierta, lo que ocasionó su salida como consejero independiente de Grupo Televisa.

El empresario, cuyo rostro es poco conocido, tuvo una de sus últimas apariciones en la reunión de consejeros de Banamex, a la que asistió el presidente Enrique Peña Nieto. Según versiones periodísticas, el mandatario le dijo: todo dentro de la ley , a lo que el empresario sólo contestó: sí, señor presidente .

En GAP, GMéxico inició hace años la compra de acciones en el mercado, logrando así una tenencia de 25%, lo que provocó que se le acusara de violar los estatutos.

Este conflicto se dirime en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y se espera que en octubre o noviembre se dé a conocer el fallo.

romina.roman@eleconomista.mx

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