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El Presupuesto de Egresos para el 2023
El Ejecutivo federal propuso a la Cámara de Diputados un Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para el ejercicio fiscal del 2023 de 8.3 billones de pesos (bdp), el más alto en la historia. ¿Cómo se compara esta propuesta con presupuestos de otros años? Veamos algunos ejemplos.
Para el 2000 el PEF fue de 1.1 bdp. Traído a valor presente, el PEF de aquel año sería hoy de 3.03 bdp. De hecho, para el 2019 –primer ejercicio de la actual administración–, el PEF sería de 5.8 bdp (el doble del último año de la gestión de Ernesto Zedillo).
El PEF para el 2023 será, entonces, de casi el triple del de 2000. Una lectura del PEF de los últimos años revela que la actual administración gasta mucho más que los gobiernos anteriores sin haber podido generar condiciones de crecimiento.
En el 2012 –último año de gobierno de Felipe Calderón (cuyo PEF fue de 3.7 bdp)– los recursos sumados de las secretarías de Defensa y Marina fueron de 75,200 millones de pesos y el de Comunicaciones y Transportes fue de 85,500 millones de pesos.
Es decir, se invertiría 18% más en infraestructura que en las fuerzas armadas. El PEF del 2019 otorgó a Sedena y Semar un presupuesto de 125,700 millones de pesos, mientras que a la SCT uno de 66,500 millones de pesos.
Para el 2023, el PEF proyecta un gasto en las fuerzas armadas de 153,700 millones de pesos y en infraestructura de 77,400 millones de pesos; es decir, el gasto militar será el doble que el de infraestructura.
Si sumamos los 99,000 millones que erogaría la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana al de las fuerzas armadas (que ya incluyen a la Guardia Nacional), en el 2023 gastaremos 43,000 millones de pesos más en rubros militares que en el presupuesto otorgado a la Secretaría de Salud, cuya partida de compra de medicinas tendrá un recorte de 14% con respecto al PEF del 2022.
En términos reales (incluida la inflación tenida desde el 2012), en el 2023 el gobierno piensa gastar 30% más en la Sedena y la Semar que lo que se presupuestó en el último año de Calderón.
El PEF para el 2023 es superior al del 2022 en 1 bdp. Al no preverse un incremento impositivo, este nuevo gasto federal habrá de financiarse con la contratación de deuda, la cual se estima también crecerá en 30% según lo anunciado en el Paquete Económico.
El manejo de la deuda implicará el pago de intereses por cerca de 1 bdp, es decir todo el incremento para este año servirá tan solo para cubrir el servicio de la deuda. Recordemos que 1 bdp equivale ahora a la tercera parte (en términos reales) del PEF del último año del presidente Zedillo. Tampoco descartemos recortes.
Resulta cuestionable un presupuesto de esas dimensiones para financiar un modelo de gasto que no ha generado crecimiento económico en cuatro años y que asigna mayores recursos a las fuerzas armadas antes que a la inversión productiva o a una infraestructura que realmente cierre brechas con la población más desprotegida.
@erevillamx