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El sorprendente “superpeso”
El “superpeso”, como se le conoce popularmente al peso mexicano, que registra una notable apreciación en su cotización frente al dólar, se ubica en un nivel que nadie anticipó.
Su fortaleza ha generado sorpresa incluso entre los expertos. Al mismo tiempo ha levantado una amplia gama de interrogantes. La pregunta central, es: ¿por qué está tan apreciado el peso?
Y desde ahí, se generan muchas preguntas más:
¿Cuánto más se apreciará y cuánto tiempo más permanecerá en esa condición de “superpeso”?
¿Se registrará una devaluación por las elecciones en México?
¿Afectará al “superpeso”, las elecciones de EU?
No hay quien tenga una respuesta contundente, sobre estas preguntas.
Nadie puede anticipar cuánto más se apreciará el peso ni cuánto tiempo mantendrá su fortaleza.
Sin embargo, la mayoría de los analistas coinciden en algunos factores comunes, que explican la fortaleza del peso: el flujo de dólares que generan las exportaciones, el histórico nivel de remesas y las Inversiones Extranjeras Directas.
Y por supuesto, destaca el elevado “premio” que ofrece Banco de México a los inversionistas, aún con la recientemente recortada tasa de interés de referencia, que pasó de 11.25% –que mantuvo casi por un año– a 11.0%.
Todo ello, más la potencial llegada de Inversiones Extranjeras Directas por la relocalización de empresas o nearshoring.
Prácticamente todos los analistas especializados reconocen que el comportamiento de la divisa nacional ha sorprendido a todos.
La moneda mexicana se ha colocado en los últimos meses, en distintos momentos, como la moneda más apreciada.
El equipo de análisis de CIBanco, encabezado por Jorge Gordillo refiere que el peso mexicano comenzó el mes de abril, en su mejor nivel, desde diciembre de 2015. El dólar spot cotizó en alrededor de 16.50 pesos por unidad.
Refiere que el fortalecimiento del peso ha sido una sorpresa, y ha hecho más complicado anticipar el comportamiento de la moneda, por los altos niveles de incertidumbre.
Ni siquiera el recorte en 25 puntos base que hizo Banxico en días pasados, provocó un rebote en la paridad.
No hay una respuesta clara de hasta qué nivel podría apreciarse el peso mexicano, destaca el análisis.
Advierte que la mayoría de los analistas coinciden en que en el mediano plazo la moneda se podría depreciar, pero la resiliencia mostrada hasta ahora puede seguir generando fallos en los pronósticos.
A muy corto plazo no se vislumbra un factor que pudiera presionar al peso.
Con ello, durante abril, la moneda mexicana podría aprovechar para consolidar aún más sus actuales niveles o incluso extender un poco su rally positivo.
Técnicamente tiene espacio para apreciarse hacia 16.30 (spot), aunque aclara, no es el escenario base en CIBanco.
En cuanto al proceso electoral local destaca que no se percibe un alto nivel de riesgo para México y por ende para las inversiones en pesos.
Y anota que es muy limitado un posible impacto negativo por la posibilidad de un triunfo de Donald Trump en las elecciones de EU.
Por su parte, el equipo de análisis de Intercam, encabezado por Alejandra Marcos señala que durante el pasado mes de marzo, el peso mexicano fue la moneda que mayor apreciación tuvo con una variación de 3.0% respecto al cierre de febrero.
Explica que hay dos determinantes fundamentales para el comportamiento del tipo de cambio:
1).- el que se registra en la cuenta corriente y 2).- la operatividad del peso en los mercados internacionales.Respecto a la cuenta corriente, estiman, que este año se registrará un déficit cercano a los 15 mil millones de dólares, es decir -0.8% del PIB.
Este monto se refiere a las necesidades de financiamiento en divisa extranjera que el país necesita para sus operaciones, el cual, será plenamente financiado a través de la Inversión Extranjera Directa la cual se estima en el orden de 40 mil millones de dólares.
Otro factor fundamental ocurre fuera. El peso es una de las monedas más líquidas y profundas a nivel mundial.
Diariamente se operan 114 mil millones de dólares, de los cuales 80% se operan fuera del país y por ende no se registran en las cuentas externas.
Considera que durante las elecciones presidenciales, históricamente el peso, pierde aproximadamente el 6% de valor al inicio del periodo electoral, para posteriormente apreciarse casi en la misma magnitud.
En ese contexto, anticipa que esta vez, no será diferente.
La directora de análisis de Banco Base, Gaby Siller opina que lo que más apoya la apreciación del peso es la especulación sobre México y el potencial beneficio del nearshoring.
Advierte que ante la falta de agua y energía, respeto al Estado de Derecho y certidumbre en la política económica interna, las expectativas positivas podrían no concretarse y las apuestas a favor del peso se desmoronen.
El “superpeso” ha sorprendido a todos y a todos nos mantiene a la expectativa. Veremos.