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El juicio antimonopolio de Walmart en México
Walmart protagoniza un juicio antimonopolio en su contra por la presunción de que impuso prácticas anticompetitivas y fijó precios verticalmente en el mercado en detrimento de proveedores, competidores y consumidores en México valiéndose de su posición dominante. Pronostico un futuro lleno de risas.
Los corredores en la Bolsa Mexicana de Valores dan por descontado que Walmart de México recibirá una sanción y redujeron el valor de sus acciones poco más de 6% en una semana.
Yo tengo mis dudas de que el castigo vaya a ser de envergadura suficiente para lastimar a Walmart y disuadir a otros de imitar sus pasos. El mayor daño contra Walmart será reputacional, pero nada que un gigante acostumbrado a hacer su voluntad no pueda superar.
Este juicio de la autoridad antimonopolio, conocida como la Cofece, es el primer asunto de gran envergadura bajo la presidencia de la comisionada Andrea Marván Saltiel, una abogada por la Universidad Iberoamericana que asumió el cargo apenas en marzo de 2023.
Dicen los vagos que según el sapo, la pedrada, pero aquí no aplica la matemática pura. Hay mucha historia para confirmarlo.
La mayor sanción prevista en la ley por aplicar prácticas monopólicas relativas, como de las que se acusa a Walmart, es de 8% de sus ingresos en el último año de aplicación de la conducta ilícita. Suponiendo que fue en 2020, cuando la Cofece inició la investigación contra Walmart que derivó en este juicio (expediente IO-002-2020), la multa máxima contra Walmart podría alcanzar los 2,700 millones de dólares considerando el tipo de cambio promedio anual. Pero eso no ocurrirá aunque todos los enemigos de Walmart —que no son pocos— enciendan sus veladoras.
Para empezar, nunca en México la autoridad antimonopolio ha impuesto una sanción individual de más de 1,000 millones de pesos. La Cofece se ha caracterizado por imponer las sanciones máximas que puede defender en tribunales, por más irrisorias que parezcan.
“El Poder Judicial lo que nos ha dicho es que uno no fija la multa en el máximo, sino que tiene que empezar por el mínimo y luego multiplicarlo y no te puedes pasar”, dijo Alejandra Palacios Prieto, excomisionada presidenta de la Cofece (2013-2021), en una comparecencia de 2021 con senadores para defender las multas ridículas contra 7 bancos que se coludieron para fijar precios en el mercado de bonos gubernamentales. La multa total contra los conspiradores, entre ellos entre ellos los gigantes Deutsche Bank, Barclays, Citibanamex y BBVA, fue de 35 millones 75,000 pesos (1.4 millones de dólares al tipo de cambio de ese año). “Si no nos gusta ese tamaño de multas, lo que hay que hacer es modificar el sistema para que las multas sean más altas”, dijo Palacios. Al sistema, por supuesto, no se le movió una coma.
En el caso Walmart, la Cofece deberá considerar, además de los ingresos de la compañía, el daño estimado al mercado ocasionado por sus supuestas conductas anticompetitivas. También deberá tomar en cuenta la defensa de la compañía durante el juicio. Y después, como dijo Palacios, deberá imponer la sanción comenzando por el monto más bajo para luego ir subiendo poquito a poquito sin romper la cuerda de la proporcionalidad.
Por si fuera poco, una cosa es sancionar y otra cobrar, si no que le pregunten a la agencia de privacidad, el Inai, en su vigilancia a los bancos y el sector financiero y la protección de datos personales.
Todos los infractores tienen derecho a apelar en tribunales las decisiones de la autoridad sancionatoria, sobre todo los que quieren mantener un historial limpio que impida sanciones por reincidencia. Será el caso de Walmart.
A menos que la nueva comisionada presidenta Marván Saltiel se quiera estrenar con un litigio perdedor, ella y el pleno de la Cofece tendrán que irse por el camino ya conocido, lo que implica imponer una sanción que sus abogados puedan defender.
¿Quieres saber el futuro? Está lleno de risas.