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Sector Financiero

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Nuevo gobierno contará con un sistema bancario sólido: S&P

En abril, la entonces candidata presidencial, Claudia Sheinbaum, estuvo en la 87 Convención Bancaria, donde, ante el gremio, expuso lo que se ha logrado y parte de su plan de gobierno que incluyó mantener las finanzas públicas sanas.

Fotos El Economista. Gilberto Marquina GMEL ECONOMISTA

En los últimos años el sector bancario en México se ha mantenido sólido, con la llave del crédito abierta y con ganancias importantes que incluso han marcado récord.

Hoy, a unos días de que se llevó a cabo la elección presidencial y a pocos meses de que inicie el nuevo gobierno que encabezará la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, el sector bancario mexicano mantiene esos niveles.

De acuerdo con cifras oficiales, el Índice de Capitalización (ICAP) se ubica en 19.49% (cuando el mínimo es 10.5%), mientras que el Coeficiente de Cobertura de Liquidez (CCL) es superior a 350%; el crédito continúa creciendo (5.6% en abril) y la morosidad se ubica en 2.0 por ciento.

Un reporte reciente de Standard & Poor´s Global, con motivo de los resultados de las elecciones del pasado domingo, considera que la administración de Claudia Sheinbaum iniciará su mandato con un sistema financiero sólido, ya que los fundamentales se mantienen fuertes.

“A pesar de las altas tasas de interés, el sector bancario ha aumentado su cartera de crédito basándose en políticas conservadoras de otorgamiento. Esto se refleja en tasas moderadas de crecimiento, indicadores saludables de la calidad de activos y una sólida rentabilidad que han permitido seguir fortaleciendo sus posiciones de capital. Además, el sector se beneficia de una liquidez sólida y de una amplia base de depósitos de bajo costo”, señala el documento.

En este sentido, no espera cambios significativos en el sistema bancario, en términos de la dinámica competitiva, una vez que asuma el cargo el nuevo gobierno. “Esperamos que los bancos comerciales sigan siendo el principal proveedor de crédito en el país, con 45 a 50% del préstamo total”.

Si se mantiene política económica, habría estabilidad del negocio

El análisis de S&P resalta que durante su campaña, la hoy virtual presidenta electa, se comprometió a mantener la actual política económica –que ha sido ratificada este martes– basada en preservar la disciplina fiscal, mantener la autonomía del banco central y garantizar la estabilidad de la deuda pública.

“Estos pilares generarían condiciones estables de negocio y operación para los sectores bancario y seguros mexicanos”, apunta.

eduardo.juarez@eleconomista.mx

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