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Lesión de Haddad, sin costo extra para Guadalajara Open

La baja de la tenista brasileña Beatriz Haddad Maia por un accidente en su hotel no implicó indemnización a los organizadores y tampoco represalias legales. Fue un foco de atención a los reglamentos y manejo de crisis.

Foto: Reuters

Foto: Reuters

El Guadalajara Open tuvo que esquivar otro tope en su ya de por sí mermado inicio de edición 2023. Tras las bajas de último minuto de sus principales rankeadas, en el segundo día de actividades de su cuadro principal, la tenista brasileña Beatriz Haddad Maia se vio obligada a darse de baja por un accidente en su hotel.

La propia jugadora dio a conocer la noticia a través de sus redes sociales unas horas antes de disputar su choque de primera ronda contra la estadounidense Danielle Collins en la jornada del lunes, adjuntando una foto en la que mostraba sus manos con gasas.

“La noche del domingo en el hotel, saliendo de la ducha, la puerta se abrió y eso terminó cortando algunas partes de mi cuerpo. Tuve que ir al hospital para que me hicieran algunas puntadas en ambas manos y por eso, lamentablemente, no podré jugar en México”, escribió la brasileña, ranking 15 del mundo.

No hubo un comunicado oficial de parte del torneo, sólo se emitió el siguiente mensaje: “Beatriz Haddad Maia se ha retirado debido a una lesión en la mano. La sustituye Sachia Vickery, perdedora afortunada (lucky loser)”, mientras que en redes sociales le enviaron un mensaje: “Vibras positivas a nuestra amiga Beatriz, te vemos el próximo año”.

Haddad Maia era la novena mejor sembrada del Guadalajara Open 2023 y su baja por el accidente en un hotel de tierras tapatías causó revuelo en redes sociales, con aficionados y especialistas de tenis dudando de las garantías de seguridad hacia las jugadoras en un torneo WTA 1000, que está apenas un escalón debajo de los Grand Slams.

El Economista consultó a Gustavo Santoscoy García, codirector del Guadalajara Open, para conocer la postura oficial de los organizadores respecto a la lesión de la brasileña, top 20 del mundo, en temas como seguros, indemnización, aprendizajes y otras repercusiones para un evento de jerarquía WTA 1000.

Responsabilidades y medidas contra el hotel

Santoscoy García relató el incidente de Haddad Maia: “Llegó a su hotel, se metió a bañar y lo que parece ser es que la puerta no estaba bien asegurada, se soltó y cayó encima de ella. Tuvo algunas cortadas en las manos, al principio no parecía una lesión muy grave, sin embargo, recibió dos puntos en la mano izquierda y uno en la derecha, con lo cual es imposible jugar”.

La brasileña, que buscaba el primer título WTA 1000 de su carrera en Guadalajara tras haber perdido una final en Canadá en 2022, es zurda, por lo que con dos puntadas en su mano izquierda decidió que no podría seguir en el torneo.

- ¿Qué responsabilidad les atañe como organizadores ante este tipo de sucesos?

“Tenemos que proveer el servicio médico, un doctor aprobado por la WTA que, junto a las fisioterapeutas que trae la propia WTA, hace una valoración y con eso se toma la decisión de que eran necesarias unas suturas. La llevamos al hospital, se hicieron los procedimientos correctos con el seguro de jugadoras y de la WTA y ella toma la decisión de no jugar”.

El codirector explica que tanto la jugadora como los organizadores cuentan con un seguro. Para las tenistas es una exigencia de la WTA contar con dicho seguro para poder participar en su temporada, mientras que GS Sports Management, la empresa a cargo del torneo, tiene uno de responsabilidad civil dentro y fuera del complejo.

También recalca que ante este tipo de sucesos inesperados la responsabilidad de los organizadores se enfoca a brindar todas las facilidades médicas a la jugadora lo más pronto posible, sobre todo porque el accidente se dio fuera de las actividades tenísticas.

- ¿Qué medidas tomarán como organizadores con respecto al hotel del accidente?

“Los hoteles con los que trabajamos tienen seguro de responsabilidad civil. Todavía es muy temprano para saber qué va a pasar con el hotel, pero bueno, los accidentes pasan y hay que estar listos y cubiertos. Como ella misma dijo, fue un accidente, algo inoportuno, y esperamos que se recupere lo antes posible. Por confidencialidad no podemos revelar el nombre del hotel”.

Indemnización y represalias legales

De acuerdo con una fuente especializada en eventos de tenis consultada por este diario, un WTA 1000 no requiere que los organizadores paguen a las jugadoras por participar, ya que los puntos y la bolsa de premiación lo hacen lo suficientemente atractivo para que ellas solas se inscriban, a diferencia de un torneo WTA 250 o 500.

Aunado a eso, el accidente de Haddad Maia no requirió de una indemnización ni el pago de ningún otro tipo por parte de GS Sports Management: “Para nada, al final fue un accidente que sucedió fuera del torneo. Lo más que podemos hacer es apoyarla con el servicio médico, el traslado al hospital, facilitarle la llegada y la asistencia médica”, especifica Gustavo Santoscoy.

Relata que la gente de WTA fue quien se comunicó con él para darle a conocer el incidente y que luego platicó con el agente de la jugadora, haciéndole saber que el semblante de Beatriz era bueno. Incluso, su recuperación se estima entre cinco y 10 días.

-¿Hay riesgo de que Beatriz tome alguna decisión legal en contra del torneo?

“No, con nosotros no tiene por qué. Tenemos buena relación con ella y al final no tuvimos nada que ver con el accidente, fue directamente con el hotel. No sabría decir si habrá alguna acción (contra el hotel), nosotros nos metemos hasta donde la WTA rige y eso es proveer un doctor y las facilidades médicas, pero es un tema que sucedió fuera (del evento) y no tenemos nada que ver en ese sentido”.

Santoscoy García agrega que platicó con Beatriz Haddad Maia la mañana del lunes, antes de llevarla al aeropuerto, y que se despidió en buenos términos con los organizadores del Guadalajara Open, “sólo un poco desanimada por no poder quedarse”. Así lo manifestó la misma jugadora en su post de redes sociales.

Lamentablemente no podré jugar en México, un lugar especial para nosotras las tenistas debido a toda la recepción tan afectuosa de la gente y los esfuerzos del torneo (…) Agradezco el cariño y las buenas vibras de todos, nos vemos pronto”.

Las últimas dos temporadas han impulsado el nivel de Haddad Maia en el WTA Tour. En 2022 fue finalista del WTA 1000 de Canadá y en 2023 llegó a semifinales en Roland Garros y campeona de dobles en el WTA 1000 de Madrid. También en este año firmó el mejor ranking de su carrera al ser décima en mayo.

Beatriz se sumó a las bajas de Iga Swiatek, Coco Gauff, Elena Rybakina y Jessica Pegula, mientras que en la jornada del lunes se agregaron Belinda Bencic (quinta sembrada del torneo) y Danielle Collins por molestias físicas.

-¿Qué se aprendió de la situación con Beatriz en cuanto a la organización del torneo?

“Saber que los accidentes pueden pasar, en cualquier sentido, y hay que tener un plan como se hizo este año para preparar a todos los integrantes del equipo y siempre estar con los ojos abiertos de que puede haber un accidente en cualquier área, son cosas que no se pueden predecir. Esto no nos tomó desprevenidos, apoyamos sobre lo que nos correspondió y es parte de la preparación que hacemos año con año”, concluye Gustavo Santoscoy.

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